NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ACTUALIDAD

Qué es el hidrógeno verde, cuánto cuesta instalarlo y cuáles son sus ventajas e inconvenientes

Existen tres tipos distintos de hidrógeno: hidrógeno gris, hidrógeno azul e hidrógeno verde, una de las energías renovables.

Actualizado a
hidrógeno verde

El hidrógeno verde es una energía producida mediante electrólisis. La corriente se conecta a través de electrodos en el agua; el agua se descompone en hidrógeno y oxígeno.

Es una energía perfectamente viable para la aviación, autobuses, camiones, ferrocarriles, siderurgia, industria petroquímica, transporte marítimo.... Una manera de ahorrar en energía fósil y pasar a un proceso más limpio y barato.

El hidrógeno es el elemento químico más abundante del mundo: es ligero, almacenable, denso en energía y no genera en sí emisiones directas de contaminantes.

Cuánto cuesta

Una investigación publicada en Nature Energy concluye que los sistemas híbridos (de generación de hidrógeno a partir de energía renovable, generalmente eólica o solar), pueden llegar a ser rentables a partir de los 3,23 euros el kilo.

El mismo estudio apunta que los costes de los electrolizadores están disminuyendo, lo que podría abaratar de forma considerable el gasto asociado a la generación de hidrógeno con energía procedente de fuentes renovables, lo que que supondría una energía casi perfecta en materia de sostenibilidad energética.

Según ha contado a National Geographic el presidente de la Asociación Española del Hidrógeno, Javier Brey, ya es perfectamente viable. “La electrólisis es el segundo método de producción de hidrógeno a escala industrial de todo el mundo. Además, es un método limpio, cuyo coste resulta proporcional al de la energía eléctrica empleada en su producción”. Para el experto, valores inferiores a los 2,5 céntimos por kWh nos dan precios de unos 2,5 euros por kilogramo, lo que lo convierte en “una solución viable para la “descarbonización” de sectores como el industrial, del transporte o la energía”.

En los próximos 10 años los costes de producción de hidrógeno verde (cuyo coste actual oscila en torno a los 3,5-5 €/kg), descenderán en un 70%, o incluso más, si los precios de la electricidad procedente de fuentes renovables siguen disminuyendo como hasta ahora.

Tipos de hidrógeno verde

  • Hidrógeno gris: se produce con combustibles fósiles y conlleva importantes emisiones de CO2.
  • Hid:rógeno azul: se produce por combustibles fósiles con tecnologías de captura y almacenamiento de carbón (menos contaminante que el gris). Alrededor de las tres cuartas partes del hidrógeno que se produce actualmente es a partir del gas natural. El hidrógeno azul podría ser una solución inicial, mientras que el verde aumenta la capacidad de producción y almacenamiento para industrias como la siderurgia. Sin embargo, el hidrógeno azul no elimina las emisiones de carbono, solo las reduce.
  • Hidrógeno turquesa: se produce mediante pirólisis a partir de gas natural, pero sigue siendo un combustible fósil y por lo tanto no está libre de emisiones.
  • Hidrógeno verde: conocido como el hidrógeno renovable, es un combustible limpio que permite almacenar y emplear energía procedente de fuentes renovables. Es considerado ya como el sustituto de los combustibles fósiles en industrias difíciles de descarbonizar, el transporte pesado, el transporte marítimo y la aviación.

El principal problema

La distribución. Adecuar la red de gasoductos para el uso de hidrógeno, un gas que es más difícil de transportar sin peligro de fuga y que puede estropear el estado de las tuberías.

La transformación tendrá un alto coste pero el beneficio final es el modelo de cero emisiones deseado. Se toma como ejemplo el llamado gas - ciudad, que pasó al gas natural, y que ahora (o cuando se pueda) puede llegar a pasar lo mismo con el hidrógeno verde. Tal vez utilizar los canales del gas natural sería una opción a valorar.

La gran ventaja

  • Energía limpia: el único residuo que emite es agua.
  • 100% renovable: se genera empleando recursos naturales que no se agotan, como son la energía eólica o la energía solar.
  • Es almacenable: se puede comprimir y almacenar en tanques.
  • Es transportable: gracias a que es un elemento muy ligero, los tanques de hidrógeno comprimido permiten un manejo más sencillo que las baterías de litio.