Un día en el pasado de Pedro Sánchez: “Tiene razón Mourinho”
Recopilamos algunos de los tuits más curiosos del recién reelegido presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Bienvenidos a su lejano ayer.
Esta es la historia de un hombre y un teclado. Las memorias de un Homo sapiens con acceso a internet. El humano que aporreaba, quizás en aquellos tiempos, una Blackberry y compartía a diario la crónica de su vida. Twitter comenzaba a salir del nido. Se empezaba a tener conexión en el móvil en la calle, sin tener que estar enchufado a una red wifi. Nacían los poetas digitales. “#CopaRojiblanca #atleti #CopaRojiblanca #atleti #CopaRojiblanca #atleti #CopaRojiblanca #atleti #CopaRojiblanca #atleti #CopaRojiblanca”, punzada directa al corazón.
Este artículo es un día con el Pedro Sánchez del pasado a través de sus tuits. Una guía de lo más ordinaria, normal, pero lo más difícil de la literatura es hacerla sencilla y conseguir que el lector se sienta identificado. Eso dicen. A continuación, un tuit que representa a España.
Si no sabes qué comer, Sánchez siempre tuvo una recomendación gastronómica en su agenda y memoria. Aconseja un restaurante, pero oculta su nombre. Crack de la novela negra. Genio de las gincanas: “Comiendo en un rest. Vegetariano de la c/ Santiago, paralela a Mayor, en Madrid, delicioso. Bien de precio y buena comida. Os lo recomiendo”. Pero si prefieres las evidencias y perderte el misterio de la vida, el presidente también tuvo un restaurante para ti en 2011.
Tras una buena comida en El Bodegón, a uno le entra la modorra. Nos sentamos a tomar el café, pero los ojos pesan y el brasero de la abuela invita a dormir un poco. Echamos la siesta e intentamos olvidarnos de cualquier preocupación. Pero es imposible escapar de las dudas existenciales.
Sigues pensando en la existencia y de pronto eres un astronauta.
Nos despertamos, pero antes de ponernos en marcha, encendemos la televisión. Uno espera matar el tiempo y descansar, pues hasta ahora ha marchado a comer, se ha ido a El Bodegón, se ha echado una siesta como “un solo ser” y lo único que quiere es entretenerse con algún buen programa. Sin embargo, aparece en la pantalla una imagen dantesca.
“Dennis Rodman y Kim Jong-un sentados en la cancha en Corea del Norte. ¿De verdad?”. Sin embargo, el día está a punto de mejorar: cambias de canal y aparece otro gran filósofo. De esos que fueron polémicos, pero nos dieron ideas rápidas, verticales, que funcionan como contragolpes.
Pensar tanto cansa. Hora darle algo fácil a la mente, y un repentino recuerdo aparece en la memoria: nuestra fuente favorita. Aquella que no podemos dejar de mirar. Qué pedazo de fuente. ¿Cuál será la fuente favorita de los demás?
Parece que mucha gente coincide contigo. La fuente Rosales hace equipo.
Pero no te puedes despistar. Eres político y has caído en la deriva de la vida cotidiana. Tu trabajo es velar por los derechos humanos más importantes.
Ni con un tuit has conseguido que te feliciten. Empiezas a sentirte abatido. Pero sales a pasear y escuchas los vencejos que anuncian la llegada de la primavera. Miras al cielo, atardece. No hay nadie en las calles, el tiempo se detiene y sientes que la ciudad es tuya. Recuerdas que es mejor la ilusión que la obsesión. Hay que volver a ponerse en marcha.
Hay que remontar esto. Terminas el día como mejor sabes.
Finaliza la jornada y das las gracias por haberte marchado a comer, a El Bodegón, a la siesta y a los astronautas. A Dennis Rodman un poco. A ser un solo ser y a los vencejos. A las pizzas. A que somos los mejores “Ooohhheeeeoooheeeee!!!”. A Mourinho y a los años bisiestos. Al Atleti. Pero, sobre todo, a la fuente Rosales. Es tu favorita. Solo puedes desear lo mejor a todos.