Siria advierte de una próxima invasión de Turquía: “Las consecuencias serán catastróficas”

Ilham Ahmed, representante del gobierno sirio de las Fuerzas Democráticas (SDF), hizo un llamamiento al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump: le pidió que influyera en el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y evitara una posible invasión, cuyo objetivo es “establecer un control de facto” sobre el territorio kurdo y “obligar” a Estados Unidos a cooperar.

Y es que desde hace días han recalcado desde Siria que Turquía está llevando soldados a la frontera. Afirman que la acumulación de fuerzas terrestres que comenzó después de la caída del régimen de Bashar a Assad es similar a las acciones que llevó a cabo el ejército turco antes de la invasión del noreste de Siria en 2019.

Una posible invasión afectaría sobre manera a los residentes kurdos de Kobani y muchas comunidades cristianas correrían el riesgo de ser desalojados. Ahmed cree que si Turquía lleva a cabo la operación de invasión, las consecuencias serán catastróficas con más de 200.000 personas muertas.

Qué son las SDF

Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) son una alianza militar formada por diversas milicias kurdas, árabes, asirias, armenias, turcomanas y circasianas. Fueron fundadas en octubre de 2015, y su objetivo principal es luchar por una Siria secular, democrática y federal. Han jugado un papel crucial en la guerra civil siria, especialmente en la lucha contra el Estado Islámico (ISIS).

Las SDF incluyen las Unidades de Autodefensa del Pueblo Kurdo, que Ankara considera una rama del grupo paramilitar Partido de los Trabajadores del Kurdistán. Este último lleva muchos años luchando contra las autoridades turcas. La organización es considerada terrorista por Turquía, Estados Unidos y la UE.

Pese a esta consideración, la cuestión kurda entre Estados Unidos y Turquía ha dado un vuelco, ya que Washington apoya a las SDF por temor al resurgimiento del Estado Islámico, no sólo en Siria sino en toda la zona.

En el noreste de Siria, los enfrentamientos recientes entre las fuerzas kurdas y las milicias sirias respaldadas por Turquía han desplazado a más de 100.000 personas. Estos combates han surgido tras la caída del régimen de Bashar al Asad, con las fuerzas kurdas perdiendo territorio frente a las milicias respaldadas por Turquía. Y es precisamente en Turquía donde los debates sobre la resolución de la cuestión kurda han resurgido, especialmente en relación con el líder kurdo encarcelado Abdullah Öcalan. La situación sigue siendo un tema delicado y de gran importancia regional.

Abdullah Öcalan, también conocido como “Apo,” es un político, escritor y activista kurdo, nacido el 4 de abril de 1949 en Ömerli, Turquía. Es el fundador y líder del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), una organización que lucha por los derechos y la autonomía del pueblo kurdo.

Öcalan fue arrestado en 1999 y condenado a cadena perpetua por cargos de traición y separatismo. Desde entonces, ha estado encarcelado en la isla de Imrali, en Turquía. A pesar de su encarcelamiento, sigue siendo una figura influyente y simbólica en la lucha kurda.

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