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POLÍTICA

Sale a la luz un vídeo inédito de Putin

Se hacen públicas unas imágenes de Vladimir Putin en chándal jugando al tenis de mesa en un viaje a Finlandia en 1990.

Sale a la luz un vídeo inédito de Putin

Se ha filtrado en redes sociales un vídeo del presidente ruso Vladimir Putin durante una visita a Finlandia a principios de la década de 1990. En las imágenes se aprecia a un Putin muy distinto al de ahora, con un corte de pelo más largo y un chándal ochentero, jugando sonriente al ping-pong junto al alcalde de entonces de San Petersburgo.

La empresa de radio y televisión finlandesa YLE obtuvo la grabación casera de una fuente anónima. El vídeo fue filmado durante las vacaciones del Primero de Mayo, poco después de que Putin se convirtiera en asesor de Anatoly Sobchak, el alcalde de San Petersbugo, con quien se le ve en un ambiente de confianza en las imágenes.

Aparte de jugar al tenis de mesa contra los guardaespaldas del alcalde, también se han dado a conocer imágenes del grupo pescando, comiendo o jugando a los dardos. “Lo más sorprendente es que está sonriendo. Parece humano, más que el demonio en el que se ha convertido”, afirma Luke Harding, experto de Rusia y corresponsal en Moscú para el periódico The Guardian.

Contexto del vídeo

Putin regresó a Leningrado en 1990, ahora San Petersburgo, después de pasar cinco años como oficial de la KGB en la ciudad de Dresde, al este de Alemania. Allí, se unió al equipo de Sobchak y se convirtió en Jefe del Comité de Relaciones Exteriores, siendo responsable de los acuerdos comerciales y la inversión extranjera.

Alrededor de estas fechas datan las primeras acusaciones de corrupción contra Putin. El ahora mandatario ruso afirma que renunció a la KGB en agosto de 1991 en protesta por su golpe de Estado fallido contra Mikhail Gorbachev. Según una fuente anónima de YLE, Putin confirmó que trabajaba para la agencia de espionaje durante la visita.

El Putin de la grabación jugando al tenis de mesa se muestra como un hombre reservado y sonriente que no se dejaba grabar de frente. Una imagen que contrasta completamente con la figura actual del presidente ruso. A partir de entonces y hasta la actualidad, sus apariciones públicas han sido cuidadosamente controladas y escenificadas.