Rusia declara como “indeseable” a Deutsche Welle
Moscú ha calificado como “organización indeseable” a la cadena de noticias alemana DW, al denunciar que difunde “propaganda hostil”.
Deutsche Welle es la agencia estatal de noticias de Alemania, al estilo de la Agencia EFE, la BBC, RTVE... su trabajo periodístico no gusta a Moscú, y desde febrero de 2022, cuando dio comienzo la invasión en Ucrania, está en vigor una prohibición de emisión en el país y la página web está bloqueada, mientras que desde marzo de ese mismo año la cadena alemana es considerada un “agente extranjero” por parte de Moscú.
Con todo, este domingo se ha dado un paso más, ya que las autoridades rusas han declarado “organización indeseable” a la cadena de noticias alemana Deutsche Welle (DW), al denunciar que difunde “propaganda hostil” hacia Moscú. Y para apoyar más su decisión, el aparato del Estado a través de la Fiscalía General de Rusia ha tomado la decisión a petición de la Duma que considera al medio como “pionero de la propaganda antirrusa hostil”, según ha indicado el diputado Vasili Piskariov, del oficialista Rusia Unida, que ha señalado que la colaboración con DW se castigará como una infracción de ley.
Lo que ha hecho que la directora general de DW, Barbara Massing, haya criticado el anuncio al considerar que agrava la situación de los medios en el país, puesto que a partir de ahora los empleados rusos de la cadena alemana se enfrentan a multas o incluso penas de prisión. En un comunicado ha añadido que no se dejará intimidar por el “intento de silenciar a los medios de comunicación libres”.
Cómo puede afectar a los seguidores de DW
Los problemas legales para los espectadores, oyentes y seguidores de DW en Rusia comienzan si las autoridades definen el comportamiento de una persona como “participación en las actividades de una organización indeseable”, según Ivan Pavlov, abogado ruso en el exilio y fundador del grupo jurídico Pervy Otdel (Primer Departamento).
Esto podría incluir la republicación de material audiovisual o escrito en las redes sociales. El mero hecho de mencionar una organización “indeseable” en un chat público o en un sitio web podría dar lugar a un proceso judicial. Las personas que se considere que participan en las actividades de organizaciones “indeseables” pueden ser sancionadas con multas que oscilan entre los 53 y 160 euros.
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Pero hay más. Los directivos de organizaciones “indeseables” se enfrentan a un proceso penal inmediato, al igual que las personas que las financian, por ejemplo, mediante donaciones. Las personas que participan en la producción de una organización “indeseable”, por ejemplo, comentando un artículo escrito o participando en una emisión, también podrían ser procesadas, afirmó el experto.
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