El último informe de la OTAN deja en muy mal lugar a España
El informe anual de la Alianza Atlántica señala a España como el miembro que menos invierte en Defensa, por detrás de Luxemburgo y Eslovenia.


Un gasto mayor en Defensa. Es lo que vienen solicitando desde numerosos gobierno de Europa tras el inicio del conflicto en Ucrania. Una medida que también piden desde la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y, especialmente, Estados Unidos a través de su presidente, Donald Trump. En los últimos años los esfuerzos por incrementar el gasto militar han sido varios por parte de algunos países. Pero, todavía, queda bastante por hacer en algunos casos.
Es, por ejemplo, la situación de España. Este jueves, el secretario general de la Alianza Atlántica, Mark Rutte, compartió el informe anual de la organización. En el mismo, donde se hace un repaso a las cuestiones internas del bloque, se habla también de las partidas de Defensa. Y ahí, España tiene trabajo por hacer. Es uno de los nueve países que está por debajo del listón del 2% del producto interior bruto (PIB) de inversión en Defensa.
De hecho, España está a la cola de los países de la Alianza en lo relativo al gasto en Defensa. Apenas destinó una partida del 1,24% del PIB en el año pasado, situándose por debajo de países como Eslovenia, Luxemburgo y Bélgica. El resto de países por debajo de este 2% marcado por la OTAN son Eslovenia, Canadá, Portugal, Italia, Montenegro y Croacia.
España, contraria a la tendencia general
En los últimos años, España ha estado ocupando los últimos puestos de esta lista con la inversión en Defensa. Para este año, además, ha estado algunas décimas por debajo de lo esperado por las previsiones de la OTAN, que apuntaban a un 1,28%. Esto contrasta claramente con la tendencia alcista entre los aliados europeos, que en 2024 tuvieron un aumento inédito del 19,4%, sumando así una década de incrementos.
Hasta un total de 22 países superaron el mínimo sugerido por la Alianza, tras adquirir dicho compromiso en la cumbre de Gales en 2014. A la cabeza de esta lista se encuentra Polonia, un país que ha duplicado su gasto en la última década, pasando de menos de un 2% a un 4,07%. Le siguen Estonia (3,41%), Letonia (3,39%), Estados Unidos (3,19%) y Lituania (3,11%).
En los últimos días, Pedro Sánchez anunció un paquete de 10.471 millones de euros para alcanzar el compromiso de llegar al 2% del PIB en gasto en Seguridad y Defensa en este mismo año 2025, acelerando un camino en el que se estimaba alcanzarlo en el año 2029. Los datos, eso sí, están lejos del nuevo listón que reclama Estados Unidos, que pide incrementar la cifra hasta el 5%, mientras que la OTAN espera alcanzar un acuerdo para que llegue, al menos, al 3%.
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El informe indica que, a pesar de que las inversiones en Defensa crecieron durante el pasado año, el objetivo es “acelerar nuestro trabajo para apoyar una base industrial de defensa transatlántica más sólida, resiliente e innovadora”. Como secretario general de la organización, Rutte asegura que su prioridad es “impulsar esta adaptación para que la OTAN pueda ser aún más fuerte, más ágil y esté preparada para disuadir y defenderse con credibilidad de todas las amenazas a nuestra seguridad”.
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