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EEUU convierte un fracaso armamentístico en una amenaza mundial de última generación

El USS Zumwalt, un destructor de 7.500 millones de dólares, se convierte en una plataforma para probar el nuevo sistema de misiles hipersónicos que podría cambiar la guerra naval

USS Zumwalt
Wikimedia Commons

La Marina de los Estados Unidos está transformando lo que inicialmente se consideraba un fracaso en un avance armamentístico de última generación. El “USS Zumwalt”, uno de los destructores más avanzados de la flota, se está adaptando para albergar la primera arma hipersónica a bordo de un barco de guerra. Esta transición se produce en un astillero de Mississippi, donde los trabajadores están instalando misiles avanzados que reemplazarán el sistema de armas original, que nunca fue activado debido a su altísimo coste.

Un cambio estratégico

El ‘Zumwalt’, que en sus primeras etapas fue considerado un error costoso debido a sus sistemas de armas ineficaces, está ahora a punto de convertirse en una plataforma de ataque ultramoderna.“Fue un error costoso, pero la Armada podría arrebatar la victoria de las fauces de la derrota aquí y sacarles algún provecho convirtiéndolas en una plataforma hipersónica”, comentó Bryan Clark, analista de defensa del Instituto Hudson. Con este nuevo sistema, el ‘Zumwalt’ podría realizar ataques rápidos y precisos a distancias mucho mayores, maximizando su utilidad.

Avance en la carrera armamentística global

Este giro en la historia del destructor se da en un contexto de creciente presión global. Durante las últimas dos décadas, Estados Unidos ha desarrollado varios tipos de armas hipersónicas, pero la reciente competencia de Rusia y China ha acelerado el impulso para producir estos sistemas con urgencia. Las armas hipersónicas viajan a velocidades superiores a Mach 5 (4.828 km/h), lo que las hace mucho más rápidas, maniobrables y difíciles de interceptar.

Entre los nuevos desarrollos, se destaca el sistema “Conventional Prompt Strike”, un misil balístico que, tras lanzarse, despliega un vehículo de planeo hipersónico capaz de alcanzar velocidades de hasta ocho veces la velocidad del sonido. Este sistema, desarrollado conjuntamente por la Marina y el Ejército de EE.UU, está diseñado para ofrecer una capacidad de ataque global sin precedentes.

Tecnología de vanguardia a un precio elevado

A pesar de los avances, el Zumwalt ha sido un tema controvertido. Originalmente, fue concebido como una plataforma de ataque terrestre mediante un avanzado sistema de proyectiles asistidos por cohetes, pero este proyecto fue cancelado por el elevado coste de cada proyectil. Sin embargo, el ‘Zumwalt’ sigue siendo el destructor de superficie más avanzado en términos de nuevas tecnologías, incluyendo propulsión eléctrica y un diseño furtivo.

A pesar de las críticas sobre su costo, con un precio de 7.500 millones de dólares por barco, los analistas coinciden en que la incorporación de armamento hipersónico podría justificar la inversión. “El enemigo no tiene defensa efectiva contra estos misiles, y la Marina de los EE.UU no puede permitirse quedarse atrás”, explicó el contraalmirante retirado Ray Spicer. Este cambio estratégico no solo representa un reto en términos militares, sino también una demostración del poder de innovación ante un proyecto que parecía condenado al fracaso.

La Marina de los EE.UU. está decidida a aprovechar este cambio, y si las pruebas resultan exitosas, el ‘Zumwalt’ podría estar listo para llevar este revolucionario sistema a la flota hacia 2027 o 2028. A pesar de las voces críticas sobre el coste de este sistema, lo que está claro es que el futuro de la guerra naval podría estar marcado por una nueva era de velocidad y precisión sin igual.

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