EEUU confundió el dron enemigo que atacó su base en Jordania y mató a tres soldados
De acuerdo con Wall Street Journal, la base estadounidense lo confundió con uno propio que regresaba al enclave situado cerca de las fronteras con Siria e Irak.
La tensión en Oriente Medio dio este domingo un nuevo paso. Un ataque en Jordania acabó con la vida de tres soldados estadounidenses, además de herir a, al menos, otras 34 personas. Un ataque del que el presidente norteamericano, Joe Biden, culpó directamente a militantes respaldados por Irán, un país que ha negado tales acusaciones.
El ataque, realizado con drones, tuvo lugar en la conocida como ‘Torre 22′, un puesto norteamericano en Jordania del que poco se sabe. Se encuentra en una posición estratégica, en el punto más al noreste de Jordania y muy cercano a las fronteras con Siria e Irak. En esta base, de apoyo logístico, hay unos 350 efectivos del Ejército y de la Fuerza Aérea estadounidense.
Esta ubicación se encuentra también cerca del cuartel estadounidense de Al-Tanf, para el que sirve como centro de suministro y que está situado al otro lado de la frontera con Siria. Este enclave ha tenido un papel importante en la lucha contra Estado Islámico además de ser fundamental en la estrategia de contención del fortalecimiento militar de Irán en el este de Siria. La Torre 22 se encuentra muy cerca de este cuartel de Al-Tanf, por lo que permitiría a las unidades allí presentes ayudarles en caso de que fuera necesario. Sobre esta instalación militar, no obstante, hay muchas dudas.
Un ataque que Estados Unidos no pudo evitar al confundir el dron enemigo con uno propio. De acuerdo con el diario Wall Street Journal, en el mismo momento del ataque, un dron estadounidense regresaba hacia la base militar tras una misión sobre Siria. El medio, citando fuentes del Pentágono, no confirma si fue una confusión fortuita o si el aparato pudo valerse del dron estadounidense para ‘ocultarse’ o confundir a los radares.
De este modo, la base militar no activó los mecanismos de defensa para abatirlo, pues no fue detectado como una amenaza. En el momento del ataque, además, la base no contaba con misiles antiaéreos Patriot, aunque sí que contaba con otros mecanismos para poder repeler el ataque.
Los militares operan en funciones de apoyo, también para la coalición internacional contra el grupo yihadista Estado Islámico, según informó el Comando Central de EEUU (CENTCOM). En un primer momento, Jordania había afirmado que el ataque había sido contra Al-Tanf, una base que el grupo que reivindicó el ataque (Resistencia Islámica en Irak) citaba como objetivo.
Apoyo de Estados Unidos en Jordania
El ataque perpetrado este domingo no es una novedad en sí, pues en los últimos años se han repetido las ofensivas en diferentes bases de EEUU en la zona. Pero desde los ataques de Hamás a Israel el pasado 7 de octubre la tensión ha ido a más, con 158 incidentes registrados en las bases de Siria e Irak. Hasta el de este domingo, ninguno había sido especialmente grave.
La presencia de Estados Unidos en Jordania ha ido a más en la última década. Desde el inicio del conflicto sirio, en 2011, EEUU ha gastado cientos de millones de dólares en ayudar a Ammán a forjar un sistema de vigilancia conocido como Programa de Seguridad Fronteriza, con el fin de evitar la infiltración de militantes desde Irak y Siria.
Es, de este modo, uno de los países que más financiación militar reciben desde Washington. No en vano, Jordania cuenta con cientos de instructores procedentes de Estados Unidos y es uno de los pocos aliados de la región que realiza ejercicios con tropas estadounidenses a lo largo del año.