Dimite la alcaldesa de Maracena por la investigación del secuestro de otra concejala
Berta Linares, regidora en funciones del municipio, ha tomado la decisión para que la candidatura socialista pueda pactar con IU y, así, tener posibilidad de entrar al ayuntamiento.
El tornado político que se desató el martes 21 de febrero en el municipio granadino de Maracena sigue coleando. Tras el secuestro de Vanessa Romero, concejala socialista, a manos de la pareja de la alcaldesa de la misma localidad, Pedro Gómez Rosa, fueron muchos los dedos que apuntaron a la propia regidora, Berta Linares, como implicada en el suceso. Y antes de que se iniciara cualquier tipo de trámite judicial ya era imposible que el caso no salpicase a su reelección.
La entonces alcaldesa en funciones no tardó en esclarecer los hechos a través de una rueda de prensa en la que se mostró visiblemente afectada. Allí relató que ya había cortado la relación con Gómez y se desmarcó de la acusación de indicios de delito que señalaba el juez. Sin embargo, el ciclón político ha sido superior y, ahora, ha terminado por forzar la dimisión de Linares.
Había encabezado la lista más votada, pese a quedar lejos de la mayoría absoluta que el PSOE venía alcanzando desde hacía cuatro legislaturas. Y el escándalo protagonizado por su pareja pone en peligro el éxito de la candidatura socialista. En esa línea ha deslizado, a través de un comunicado, su dimisión, justificándola como un paso atrás para promover un pacto que evite “la entrada de la ultraderecha en el ayuntamiento y el desmantelamiento de sus servicios públicos”.
Sin dimisión no hay pacto con IU ni alcaldía
La primera formación que puso sobre la mesa su dimisión como condición para pactar fue Izquierda Unida, que posee tres ediles en el consistorio. Sumados a los siete del PSOE, obtendrían diez; y, aun así, no les daría para llegar a los once concejales que marcan la mayoría absoluta.
La clave de la izquierda en el ayuntamiento de Maracena estaría en buscar el apoyo de un grupo independiente para rebasar esta cifra. Y como IU entra en cualquier ecuación, la decisión de Linares era una obligación dentro del partido. Únicamente ha manifestado que resulta “muy extraño que después de tres meses de prórroga del secreto de sumario, a dos días de las elecciones, se abra”.
“La exposición mediática y el desgaste personal me ha llevado a anteponer los objetivos de seguir contribuyendo una Maracena mejor por encima de cualquier objetivo personal”, ha argumentado en el texto. Una decisión que, insiste, toma pese a no estar “siquiera investigada ni imputada, ni me han llamado a declarar aún, pero ante tanto ruido y bulo malintencionado”.