¿Afecta la reducción de jornada a los trabajadores que ya trabajan menos de 37,5 horas?
El PSOE y Sumar han anunciado un acuerdo de gobierno de cara a la investidura de Pedro Sánchez que incluye una reducción de la jornada laboral
El Partido Socialista está tratando de darle forma a la investidura de Pedro Sánchez, aún sin fecha, tras el fracaso de Núñez Feijoó en su intento de salir nombrado Presidente. Por el momento, las relaciones entre el PSOE y Sumar se han acercado y han anunciado un pacto de gobierno de cara a la investidura que incluiría medidas sociales y económicas como la extensión de la cuota reducida para autónomos o la reducción de la jornada laboral.
Reducir la jornada laboral es una de las propuestas más perseguidas por Yolanda Díaz, líder de Sumar y actual Vicepresidenta segunda y Ministra de Trabajo en funciones. Con el acuerdo anunciado se ha pactado esta medida de la que, a falta de su aprobación y desarrollo que permitiría conocer todos sus puntos en profundidad, ya se sabe la información más general.
¿Cómo sería la reducción de la jornada laboral?
La idea principal es reducir la jornada laboral actual, establecida en 40 horas semanales, a 38,5 horas en el año 2024, con la proyección de llevar la reducción hasta las 37,5 en el 2025. Como han anunciado los partidos: “Su aplicación se producirá de forma progresiva reduciéndose hasta las 38,5 horas en 2024 y culminándose en 2025. A partir de entonces se constituirá una mesa con los interlocutores sociales que evalúe los resultados de la reducción y siga avanzando en la disminución de la jornada legal teniendo en cuenta las características de los distintos sectores de actividad”.
¿A quién afectaría la reducción de la jornada laboral?
Según estiman los cálculos del Ministerio de Trabajo esta medida podría afectar a 12 millones de trabajadores, lo que significa un 83,3% de los asalariados en el sector privado. El resto de trabajadores que no se verían afectados si la propuesta se termina por aprobar son aquellos que ya tienen jornadas de 37,5 horas semanales o menos.
Es importante clarificar que, para conocer a quién afecta la medida, no hay que basarse en las horas que el trabajador realiza a la semana, si no en las horas estipuladas por el convenio colectivo al que se acoge su profesión.
En el caso de los trabajadores que pertenezcan a una empresa cuyo convenio interno, el que se pacta entre la dirección de la misma y los comités, tenga estipulada una jornada, por ejemplo, de 37,5 horas semanales, pero la empresa pertenezca a un sector en el que el convenio colectivo marca 39,5 horas semanales como jornada, la medida no obliga a la empresa a reducir las horas de su convenio interno, pero tampoco la exime de ello, los órganos correspondientes dentro de la empresa podrán negociar con la dirección una nueva reducción para mantener los privilegios previos frente a otras empresas del mismo sector.
Un caso práctico es el del sector público, donde más de tres millones de trabajadores tienen una jornada pactada de 37,5 horas semanales, y cuyo sindicato específico, el CSIF, ya está reclamando que estos empleados puedan reducir su jornada hasta las 35 horas a la semana.