Qué es el ‘dead bounce rate’: la señal que anticipa qué podría pasar con la economía
Algunos expertos consideran que el crecimiento del primer trimestre de 2023 puede ser un rebote que precede a la caída. En la Eurozona y España, ha sido el sector exterior el que ha mantenido el crecimiento al alza.
Los datos recientes del Producto Interior Bruto (PIB) han revelado que la economía en los países desarrollados gozan de buena salud. No obstante, hay otros indicadores que anticipan la llegada de una recesión, como el comercio internacional, el cual está cayendo a una de las tasas más rápidas de las últimas tres décadas en términos de volumen.
El comercio internacional hace referencia a la compra, venta o intercambio de bienes y servicios entre todos los países del mundo. Aunque todo hace indicar que al final del primer trimestre se podría estabilizar, los datos históricos exhiben que una contracción como la actual en este indicador suele anticipar la llegada de una recesión.
Economías desarrolladas
Las relaciones comerciales internacionales no son nuevas, pero se han incrementado en los últimos años por las economías abiertas que promueven la eliminación de barreras arancelarias y no arancelarias. Además del PIB, otros indicadores como los PMI o el empleo revelan que las economías desarrolladas aún tienen fuerza.
De la misma manera, indicadores como la curva de tipos o el comercio internacional advierten de la llegada de una recesión inminente, una caída significativa de la actividad económica que acontece en el conjunto de la economía y para un número suficiente de meses, y que resulta visible en términos de producción, empleo, renta real, y otros indicadores.
El consumo en la Eurozona y España
A pesar de que el PIB es un indicador muy retrasado, por ahora sus resultados han sido sorprendentemente positivos. Economías como la española o la estadounidense crecen a un ritmo notable, mientras otros países como Alemania han esquivado la recesión por la mínima.
Por todo ello, algunos expertos consideran que el crecimiento del primer trimestre de 2023 puede ser una suerte de ‘rebote del gato muerto’, es decir, el rebote que precede a la caída. En la Eurozona, y especialmente en España, ha sido el sector exterior el que ha mantenido el crecimiento al alza, mientras que el consumo está dando síntomas evidentes de agotamiento.
La perspectiva de John Kemps
La caída de los últimos tres meses del comercio internacional medida por volumen es la que revela un dato muy preocupante, según el analista John Kemps, de Reuters. “En todos los períodos de tres meses superpuestos desde 1992; los volúmenes solo han caído así de rápido durante las últimas tres recesiones en 2020, 2008/2009 y 2001/2002″, exhibe este experto.
Si el patrón se repite y se sigue cumpliendo, la economía debería entrar en recesión a corto plazo. Además, este experto aporta más datos que demuestran un enfriamiento de la economía: “Como reflejo de la desaceleración mundial, la red ferroviaria de EEUU transportó 1,06 millones de contenedores en febrero, el nivel más bajo para ese mes desde el 2015″, concluyó Kemps.