El trámite obligatorio que hay que hacer para no perder el Ingreso Mínimo Vital

El Ingreso Mínimo Vital (INM) es una de las prestaciones más importantes que hoy en día concede el Gobierno. Se trata de una ayuda mensual dirigida a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o están integradas en una unidad de convivencia y carecen de recursos económicos básicos para cubrir sus necesidades.

Esta prestación beneficia a millones de españoles, concretamente en 2023 más de 2,15 millones de personas cobraron esta renta. Sin embargo, para poder optar a esta ayuda económica no solo es necesario cumplir con una serie de requisitos, sino que también es fundamental presentar la Declaración de la Renta.

El hecho de no realizar este trámite supondría la suspensión de la prestación. Además, cabe destacar que no solo deben presentarla los titulares del Ingreso Mínimo Vital, sino que también deben hacerlo todos los miembros que figuran en la misma unidad de convivencia, en caso de ese ser el caso. El plazo para hacerlo este año es hasta el 1 de julio.

¿Por qué es tan importante?

La Declaración de la Renta es un trámite obligatorio para todas aquellas personas que quieran beneficiarse del IMV, ya que con ello la Seguridad Social puede comprobar que aquellos que lo obtienen no exceden la renta mínima ni sobrepasan los ingresos establecidos. Además, según las rentas del ciudadano se pueden producir ciertos cambios sobre la cuantía a recibir.

Actualmente, los mínimos para optar a esta prestación son de 966,74 euros para una unidad de convivencia formada por un adulto y dos menores, dos adultos y un menor o tres adultos. Sin embargo, ascenderá a 1.148,01 euros en caso de estar formado por un adulto y tres menores, dos adultos y dos menores, tres adultos y un menor o cuatro adultos.

Nuevos avances de la ayuda

El pasado mes de marzo, el Gobierno anunció una serie de medidas dirigidas a mejorar el Ingreso Mínimo Vital. Entre las novedades destaca el aumento de la cuantía, que está previsto que incremente en un 3% a partir de julio de 2024. Con ello un beneficiario individual pasaría a percibir 620,26 euros mensuales, y una unidad de familia con dos miembros recibiría 830,52 euros.

A su vez, el Gobierno también tiene previsto ampliar el alcance de la ayuda, de forma que pueda llegar a más personas en situación de vulnerabilidad. Para ello se procederá a eliminar algunas barreras administrativas y a simplificar el proceso de solicitud. Finalmente, también se implementarán nuevos programas de formación y acompañamiento para fomentar el refuerzo de la inserción laboral de los beneficiarios del IMV.

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