¿Cuáles son las pensiones de la Seguridad Social que caducan y cuáles son indefinidas?
Las pensiones que caducan se otorgan por un período específico. Estas pensiones suelen estar vinculadas a circunstancias particulares. Por otro lado, las pensiones indefinidas suelen estar relacionadas con la jubilación.
El sistema de pensiones de la Seguridad Social es un pilar fundamental en la vida de millones de personas, proporcionando un apoyo financiero crucial durante la jubilación y en situaciones de necesidad. Dentro de este sistema, existen dos categorías importantes: las pensiones que caducan y las pensiones indefinidas.
Cada una de estas categorías juega un papel vital en la planificación financiera de los ciudadanos, ofreciendo un abanico de opciones para asegurar su bienestar a largo plazo. Aparte de esta clasificación, las pensiones también están divididas entre las contributivas -destinadas a personas que han cumplido con un periodo de cotización- y las no contributivas -no cumplen con el requisito anterior-.
Pensiones que prescriben a los cinco años
Según informa la Seguridad Social, hay pensiones que prescriben a los cinco años. Sin embargo, en este grupo no entran las de jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares. En los casos que sucede esta caducidad, su plazo cuenta desde el día siguiente al que tiene lugar el hecho que lo ha causado.
Ahora bien, también puede ocurrir una interrupción de estas pensiones e, incluso si no se dan las condiciones, la persona podría perderlas. Esta situación puede ocurrir, por ejemplo, por una reclamación extrajudicial de un acreedor o de la Seguridad Social, o bien por un expediente de la Inspección de Trabajo.
Dos tipos de pensiones
Las pensiones que caducan, también conocidas como pensiones temporales o pensiones de duración determinada, se otorgan por un período específico. Estas pensiones suelen estar vinculadas a circunstancias particulares, como la incapacidad temporal debido a una enfermedad o accidente. Estas pensiones están diseñadas para brindar apoyo económico durante el período de necesidad y se suspenden o finalizan cuando se cumplen las condiciones preestablecidas.
Por otro lado, las pensiones indefinidas, también conocidas como pensiones vitalicias, son aquellas que se otorgan de manera permanente, sin un límite de tiempo predefinido. Estas pensiones suelen estar relacionadas con la jubilación y se otorgan a las personas que han alcanzado la edad de retiro o que cumplen con los requisitos específicos establecidos por la Seguridad Social.
Particularidades
Tal y como establece la Ley General de la Seguridad Social, el derecho a percibir las prestaciones de un solo pago caduca al año. Este plazo empezaría a contar desde el día siguiente en que se notificó su aprobación. A su vez, en cuanto al pago periódico, el derecho a percibir cada mensualidad caduca un año después de su respectivo vencimiento.
En el caso de las pensiones no contributivas, hay tres motivos que pueden llevar a la Seguridad Social a retirarla:
- Superar el límite de ingresos que están fijados para cobrar una pensión no contributiva. Esto varía según la situación familiar del beneficiario.
- No declarar los ingresos de la unidad de convivencia en los tres primeros meses del año.
- No informar de cualquier cambio en sus datos personales.
En el caso de la pensión por discapacidad, también es posible perderla si tiene lugar una revisión de esa incapacidad declaada o si a esta persona se le reconoce la pensión por jubilación.
También hay casos más graves como, por ejemplo, que la Seguridad Social inicie una investigación y detecte alguna irregularidad en la concesión de la pensión. En estos casos, el Instituto reclamará a los pensionistas el dinero que han cobrado de forma indebida.