Así te afecta el período de carencia en la cotización para cobrar una pensión de jubilación de la Seguridad Social
Uno de los conceptos técnicos más recurrentes a la hora de solicitar una pensión de jubilación contributiva es el período de carencia. Te explicamos todos los detalles.
A la hora de solicitar la pensión de jubilación de la Seguridad Social, hay varios requisitos a tener en cuenta: acreditar la carencia genérica, la carencia específica y tener la edad exigible para poder acceder a ella.
Respecto al último de los requisitos, la edad, en 2024 para acceder a la jubilación ordinaria con 65 años es necesario tener cotizados 38 años cotizados (o más). Si tienes menos de esa cifra cotizada, la edad de jubilación aumenta hasta los 66 años y seis meses.
Los otros dos requisitos, vinculados a la carencia, son conceptos más técnicos que conviene explicar.
¿Qué cotizaciones a la Seguridad Social sirven para acreditar el periodo de carencia?
Se establece un doble requisito para el acceso a la pensión contributiva de jubilación, conocido como el requisito de carencia:
Carencia general
Para acceder a la pensión de jubilación ordinaria, hay que tener cubierto un período mínimo de cotización de 15 años. Es decir, un total de 5.475 días computados a lo largo de la vida laboral. En este caso, este periodo mínimo permite a los trabajadores tener derecho a sólo un 50% de su base reguladora. Conforme aumentan los años cotizados, también lo hace la base reguladora.
Según explica la Seguridad Social, “a efectos de acreditar el período mínimo de cotización, debemos tener en cuenta que solo se computan las cotizaciones efectivamente realizadas o las asimiladas a ellas legal o reglamentariamente. Por otro lado, no se tendrá en cuenta la parte proporcional correspondiente por pagas extraordinarias”.
Si no se llega a los 15 años cotizados, no se puede acceder a la pensión contributiva, pero sí a una pensión no contributiva, que es una prestación económica de carácter asistencial que se otorga a aquellas personas que carecen de recursos económicos suficientes para su subsistencia.
Carencia específica
La carencia específica implica que dos de esos años se encuentren comprendidos dentro de los 15 años inmediatamente anteriores al momento de causar el derecho.
En este sentido, entra en juego la conocida como ‘Doctrina del paréntesis’. Se trata de una doctrina del Tribunal Supremo que facilita cumplir los requisitos exigidos para acceder a la jubilación, concretamente con el de la carencia específica, cuando el interesado no ha cotizado por causas ajenas a su voluntad. Los supuestos para utilizar esta doctrina están descritos por la Seguridad Social, considerados como situaciones asimiladas a las de alta.