NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ACTUALIDAD

¿Cómo saber si me he intoxicado por setas venenosas?

Algunos síntomas como el lagrimeo, sudoración, vómitos o calambre estomacal son signos de intoxicación. Suelen manifestarse dos horas después de su consumo.

Actualizado a
¿Cómo saber si me he intoxicado por setas venenosas?

Entramos en el otoño y con él llega la temporada de setas, uno de los productos más consumidos en esta época del año. Hay muchos sitios de nuestro país donde se pueden recolectar setas para su consumo, aunque siempre debemos ir con precaución para evitar las setas venenosas.

Algunas setas tóxicas tienen una forma casi idéntica a las comestibles y nacen en los mismos lugares, como puntos de pinares y bosques. Es por ello que organismos como el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, recomienda la recogida de setas siempre que se acuda acompañado de un experto. Con ejemplares como Lactarius Torminosus o Russula Emetica, aparecen síntomas leves después de su consumo aunque con otras se manifiestan síntomas más grave, al igual que con la variedad Cortinarius.

Los síntomas varían en función del tipo de seta, aunque los más comunes en todas son los vómitos y dolor abdominal. Aquellas que son menos peligrosas, provocan la aparición de síntomas en un plazo máximo de dos horas, a diferencia de lo que sucede con las que causan síntomas tardíos. Sin embargo, pueden aparecer otros síntomas como el estrechamiento de las pupilas, sudoración, dolor de cabeza, malestar corporal generalizado o calambres estomacales.

El consumo de setas venenosas también puede provocar otros síntomas más graves como espasmos musculares, confusión, coma y convulsiones ocasionales. Consumir un solo ejemplar de la variedad Amanita Phalloides, por ejemplo, puede provocar la muerte. Los síntomas aparecen pasadas las 6 o 12 horas desde su consumo en forma de náuseas, vómitos, diarrea sanguinolenta o cólicos.

Sobre las setas que sí son comestibles, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) destaca algunas como el boletus, oronja, setas de cardo, setas de San Jorge, angula de campo, colmenillas, rebozuelo, lengua de vaca, níscalo y el champiñón. Hay que llevar un especial cuidado con los colores llamativos como el rojo, verdoso y anaranjado fuertes. También es importante fijarse en el tallo. Si cambia de color y adopta un tono azulado o suelta un líquido lechoso no la comas, es probable que sea venenosa.

Las setas, un alimento saludable y rico en hierro, fósforo y calcio

Bajas en grasa, de alto contenido proteico y ricas en fibra, las setas son un alimento saludable que es rico en hierro, fósforo, calcio, potasio, zinc y diferentes tipos de vitamina como la A, C, D y algunas del Grupo B como B1, B2 y B3. También es un alimento rico en agua. Según la Fundación Española de Nutrición, la composición por cada 100 gramos de porción comestible es de 25 kilocalorías, 1,8 gramos proteínas, hidratos de carbono (4), fibra (2,5) y 0 de colesterol.