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China se despliega cerca de Taiwán

Una flota de la Armada china, encabezada por un portaaviones, ha navegado cerca de la isla como respuesta a una cumbre entre Taipéi y Washington.

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FILE PHOTO: Chinese President Xi Jinping meets the media following the 20th National Congress of the Communist Party of China, at the Great Hall of the People in Beijing, China October 23, 2022. REUTERS/Tingshu Wang/File Photo
TINGSHU WANGREUTERS

Una de los mayores giros territoriales que impuso discretamente el siglo XX fue la revalorización del Océano Pacífico, reconvertido en caldera de tensiones internacionales, lugar de pruebas atómicas y escenario de uno de los frentes más duros de la Segunda Guerra Mundial; también allí se dio el ataque a Pearl Harbour. Esta inmensa masa de agua es, básicamente, el muro natural entre China y Estados Unidos, siendo la primera parada del viaje la isla de Taiwán.

La ínsula atraviesa durante estos meses una de las épocas más difíciles desde su enemistad directa con el país vecino desde 1949. Xi Jinping ha llevado a un nuevo escalón su idea de Estado, la de una China unida a la que, si bien es cierto nunca ha renunciado, ahora impulsa más que nunca. Es parte del proyecto político del actual presidente chino y así lo hace saber cada vez que encuentra un estímulo que puede catalogar como “de mal gusto”.

Un nuevo aviso encabezado por un portaaviones

En esta línea, una flota de la Armada china, cuya punta de flecha es el portaaviones Shandong, ha navegado muy próxima a la isla en dirección al Pacífico oriental. Y allí, tal y como han informado medios oficiales del régimen, tiene previsto realizar unas maniobras militares. Esta zona es, en términos geopolíticos, de una posición estratégica muy valiosa: supone rodear la isla y, con ello, impedir que las fuerzas extranjeras puedan intervenir militarmente en la cuestión taiwanesa.

La caravana de buques ha surcado las aguas del Océano unos 400 kilómetros al sur de Taiwán. Y no es casualidad que haya llegado tan solo horas después de que la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, se haya reunido con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, en Los Ángeles. Reunión hacia la que Pekín se ha mostrado profundamente reacia: definen esta alianza como “confabulación”.

Portaaviones Shandong
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Portaaviones Shandong

¿Qué supone este movimiento militar?

A través de un comunicado, el ministerio de Defensa de taiwanés ha hecho saber que el portaaviones ha sido detectado en el Canal de Bashi, que es precisamente el paso entre Taiwán y Filipinas. Una ruta ideada con mucha voluntad y poca discreción por parte de China y que el mismo gabinete taiwanés que lo ha detectado se ha encargado de denunciar como un “intento de intimidar y desestabilizar la paz regional y el status quo, un comportamiento impropio de un país moderno y responsable”.

Lo cierto es que hasta ahora se desconoce si el Shandong pertenece también a los buques que van a realizar las maniobras. Con todo, diferentes analistas del rotativo chino Global Times han considerado que el hecho de que este portaaviones zarpe tampoco es casualidad. “Demuestra que está preparado para operaciones mar adentro y para salvaguardar la soberanía e integridad territorial”, dicen del buque gigante y moderno, cuya fabricación concluyó el año pasado.

Pekín continúa con sus intenciones sobre Taipéi

China no ve con buenos ojos las alianzas occidentales de Taiwán. La isla es, quizá, uno de los activos territoriales más valiosos por su capacidad y desarrollo en el mercado de chips. Pekín no valora únicamente su concepto territorial de Estado, sino el liderazgo mundial en la carrera tecnológica que supondría contar con la república como una provincia más. Por ello, Estados Unidos, que es el mayor defensor de la integridad territorial de Taiwán, es también el mayor suministrador de armas de la república. De haber un conflicto, también sería su mayor aliado militar.

Bajo este contexto tienen lugar las amenazas chinas, las acusaciones taiwanesas y las vigías estadounidenses. La última, que, en cierta parte, recuerda a esta, se dio el verano pasado con la visita de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Entonces las tensiones elevaron, de nuevo, el debate sobre la cuestión taiwanesa a la primera plana de la opinión pública. En esta ocasión, China ha tomado directamente cartas en el asunto mediante una flota de su Armada.