MAYWEATHER CONTRA PACQUIAO
Hoy se libra el combate del siglo
Tras seis años evitándose, Mayweather y Pacquiao subirán hoy (05:00) al ring para luchar por tres Mundiales del welter y la consideración de mejor boxeador de los últimos tiempos.
En la ciudad donde todo es posible, Las Vegas, se oficia esta noche (05:00 horas) el combate del siglo, del exceso, la pelea que rompe todas las marcas de expectación y recaudación en la historia del boxeo. Ahora, de Floyd Mayweather y Manny Pacquiao dependerá que se hable también, por los siglos de los siglos, de que deportivamente estuvo a la altura del Jack Johnson-James Jeffries, Joe Louis-Max Smelling, los Ali-Frazier, el Ali-Foreman de Kinshasa, el Leonard-Hearns… Luchas legendarias, impactantes, crueles, pero bellas…
Floyd Mayweather, de 38 años, llega invicto en 47 combates. Rocky Marciano se retiró inmaculado con 49 victorias, y un filipino que salió del infierno de las calles de Manila, Manny Pacquiao, amenaza su condición de mejor libra por libra (ránking que incluye todos los pesos) de los últimos tiempos. Lo de menos son los tres cinturones mundiales del welter que dirimirán (CMB, AMB y OMB), porque lo que está en juego es mucho más: convertirse en eterno.
PacMan, de 38 años, tiene un récord de 57-5-2 y menos alcance que el exhibicionista Mayweather, el deportista mejor pagado del mundo. En 2012, una derrota con Bradley a los puntos y un KO tremendo contra Márquez hicieron tambalear su carrera, que retomó con victorias ante Ríos, Bradley y Algieri. “Estoy ansioso y confiado. El instinto asesino y el feeling que siento es el de hace diez años”, cuenta Pacquiao, que tiene la determinación suicida de quien cree que Dios vive en su esquina.
“No vean esto como el combate entre el bueno y el malo, el bien y el mal –advierte Money–. Yo soy un boxeador especial: 47 lo han intentado y aún no saben por qué no han podido vencerme”. Mayweather es un elegido. Ha ganado títulos mundiales en cinco divisiones (el filipino, en ocho) y su defensa es inigualable: se escurre como una anguila para contragolpear y puntuar.
Diablo. Enfrente, el pegador Pacquiao, que se transmuta en diablo y se olvida de la piedad divina en el ring. “Será vital que lance más de 800 golpes en esta pelea, porque la defensa de Floyd es excelente, así como la precisión de sus golpes, porque llega a conectar el 50% y eso es asombroso”, analiza el veterano Al Bernstein, de Showtime.
“Llevo 50 años en el boxeo y nunca he visto nada comparable a esto. No hay cláusula de revancha. Ninguno contempla perder. Esto va a ser como una marea que levante el boxeo”, aventura Bob Arum, de Top Rank. De momento, la marea inunda Las Vegas y se extiende por todo el mundo. Sólo falta que el combate de los récords sea también el combate de todos los siglos.