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Ciencia y tecnología

SMARTBAND FERTILIDAD

Ava, la pulsera inteligente que ayuda a quedarse embarazada

La tecnología le echa una mano a la madre naturaleza y a esas parejas que quieren ser padres pero no consiguen concebir un hijo.

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Ava, la pulsera inteligente que ayuda a quedarse embarazada

La tecnología y la naturaleza hace tiempo que han dejado de ser extrañas en el mundo de los dispositivos portátiles, puesto que un lector de huellas en un móvil, un medidor cardíaco en un smartwatch o el lector de iris del Samsung Galaxy Note 7 son dispositivos biométricos que se valen de recursos tecnológicos aplicados al ser humano y su condición. Y en este campo entra Ava, una startup sueca que quiere revolucionar este mercado con su producto.

SmartPregnant

Cuando una pareja busca tener un hijo, la idea de tener sexo a diario sin protección parece la mejor y más barata forma de conseguirlo. Pero en realidad según las estadísticas, el porcentaje de éxito es de sólo el 25% según el New England Journal of Medicine. Así que para ayudar a la madre naturaleza está la tecnología. Y aquí entra Ava, un brazalete con 12 horas de autonomía y varios sensores encargados de enviar una gran cantidad de datos al móvil al que la emparejemos en base a nueve sensores que miden desde el pulso de la mujer hasta la pérdida de calor.

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Los datos aparecen en forma de varios gráficos junto con una línea de tiempo de su ciclo, mostrando el momento en que la mujer será más fértil para la reproducción en base a los seis días al mes en que puede quedarse embarazada, con un 89% de fiabilidad en cuando a la ventana de 5.3 días de fertilidad de la paciente al mes. El principio de Ava es que, "cuanto más lleve la mujer puesto el brazalete, más datos recabará Ava de ella y más exacta podrá ser la predicción".

Dispositivo médico

Según Lea von Bidder, co-fundadora de Ava, el brazalete parece "más un complemento de diario, pero es un dispositivo médico" creado tras un año de pruebas en el Hospital Universitario de Zurich seguido de un período de pruebas clínicas. Ava está catalogado como un dispositivo médico de Clase 1, lo que según la agencia de la FDA entraña un poco de riesgo y por tanto requiere de un control regulatorio.

Con la cantidad de productos tecnológicos de fertilidad que están apareciendo en el mercado, como OVwatch y su predicción del grado de fertilidad en base al sudor secretado por la mujer, o el monitor ClearBlue Fertility, que mide los patrones analizando una muestra de orina, Ava considera que ha ganado a sus competidores en base a la comodidad y a la fiabilidad de su brazalete, capaz de medir hasta 9 parámetros a la vez y brindar información sobre estos.

A las parejas interesadas, Ava acaba de salir a la venta y tiene un precio de 199 dólares la unidad, unos 181 euros al cambio.