Bad Bunny hace historia: el impacto socioeconómico y cultural de su residencia en Puerto Rico
La histórica residencia de Bad Bunny en Puerto Rico llegará a su fin con un streaming sin precedentes. Estas son las cifras y el impacto de “No Me Quiero Ir De Aquí”.
Bad Bunny llegó para revolucionar la música latina. Tras un total de 31 fechas vendidas, en cuestión de minutos, el intérprete de ‘NUEVAYoL’ está por finalizar su histórica residencia, “No Me Quiero Ir De Aquí”, en el Coliseo de su natal Puerto Rico, lo que dejó una derrama económica sin precedentes para la isla, además de un considerable impacto social y cultural.
El nacimiento de “No Me Quiero Ir De Aquí”
Lo que comenzó como un plan arriesgado está a punto de convertirse en toda una revolución. En agosto de 2023, mucho antes de lanzar su exitoso álbum “DeBÍ TiRAR MáS FOToS”, los productores del cantante se pusieron en contacto con Jorge Pérez, funcionario de turismo en Puerto Rico, para pactar una residencia en el Coliseo, el venue más grande de la isla.
“No tenía ni idea de que iba a ser tan grande”, recuerda Jorge Pérez para CNN. “Pudo haberlo hecho en cualquier lugar... Las Vegas, cualquier ciudad grande, y eligió Puerto Rico, donde están sus raíces”, agregó.
Para asegurar el éxito, Bad Bunny - cuyo nombre real es Benito Antonio Martínez Ocasio - tomó una decisión arriesgada, pero fructífera: saltarse el territorio continental de Estados Unidos. De tal modo, todo aquel que quisiera presenciar su show tendría que viajar a San Juan. En este sentido, y para no dejar fuera a su gente, los primeros nueve shows de la residencia estuvieron abiertos sólo para ciudadanos de la isla, mientras que el resto para los fans en general.
“El hecho de que Bad Bunny decidiera que sus primeros conciertos fueran para puertorriqueños hace que la gente esté orgullosa de su identidad. Y también es una postura firme frente al estatus colonial de la isla”, explica para AS USA Fernanda Quiroz, Maestra en Lengua, Arte y Literatura con enfoque en Estudios Hispánicos y Latinoamericanos por la Universidad Lumière Lyon 2. “Es una denuncia a la gentrificación y a la influencia externa que desplaza a los puertorriqueños y a todas estas personas que vivimos en América Latina”.
El plan se concretó. Con más de medio millón de tickets vendidos, la residencia dio inicio el 31 de julio. A lo largo de 30 fechas, ‘San Benito’ no sólo hizo vibrar la isla, sino que también recibió a toda una lista de celebridades de talla internacional, incluidos LeBron James, Austin Butler y Belinda, por mencionar algunos. “No había visto algo así en los 20 años de historia del propio Coliseo, ni en la industria del entretenimiento de Puerto Rico”, señala Pérez.
Ahora, la aventura está por llegar a su fin.
“No Me Quiero Ir De Aquí”, directo al streaming
A nivel global, el tour de Bad Bunny, “DeBÍ TiRAR MáS FOToS”, logró repartir más de 2.6 millones de tickets sóloen su primera semana de ventas. En un inicio, la gira contemplaba 24 fechas. No obstante, ante la abrumadora demanda, el tour se extendió a más de 50 fechas, distribuidas en 54 estadios de 18 países y cuatro continentes.
“Bad Bunny está elevando el reggaetón. Lo pone dentro de todos estos sistemas que rechazaron el género porque nació en los barrios. Por mucho tiempo, fue marginado, pero gracias a Bad Bunny se le está dando el respeto y la visibilidad global que merece”, agrega Quiroz.
Ahora, impulsado por el fervor de su público y el abrumador éxito de su residencia, el oriundo de Vega Baja, Puerto Rico, ha optado por llevar su show al siguiente nivel y cerrar esta primera etapa de su gira con broche de oro: una transmisión en streaming a nivel global.
El último show de “No Me Quiero Ir De Aquí” está programado para este sábado, 20 de septiembre, y será transmitido a nivel global a través de la apps de Amazon Music y Prime Video, así como el canal de Twitch de la plataforma, a partir de las 20:30 horas ET (19:30 horas CT y 17:30 horas PT). Teniendo en cuenta las cifras de Bad Bunny, se espera que el boricua alcance un nuevo hito en su carrera, al romper el récord de la mayor cantidad de espectadores simultáneos en una transmisión en vivo.
Acho PR es otra cosa🇵🇷 @sanbenito’s ‘No Me Quiero Ir De Aquí: Una Más’ live-streaming September 20. Watch free on @amazonmusic app, @primevideo & @twitch. #BadBunnyUnaMas pic.twitter.com/Xe95S67SUL
— Amazon Music (@amazonmusic) September 15, 2025
El récord actual pertenece al concierto de despedida de Black Sabbath y Ozzy Osbourne: ‘Back to the Beginning’, celebrado el 5 de julio en Birmingham, poco antes de la muerte del Príncipe de las Tinieblas. La transmisión alcanzó su punto máximo con 5,8 millones de espectadores simultáneos. Actualmente, Bad Bunny ocupa el puesto número 13 en el mundo de artistas más escuchados en Spotify, con más de 77 millones de oyentes mensuales, lo que ofrece un adelanto de los imponentes números que se avecinan.
El impacto socioeconómico y cultural de la residencia de Bad Bunny en Puerto Rico
La residencia de Bad Bunny no sólo representó impresionantes cifras e hitos para el cantante. También significó un impulso para Puerto Rico, que gozó de la mayor derrama económica de la última década. De acuerdo con proyecciones de Moody’s Analytics, la residencia del aclamado Conejo Malo tendría un impacto económico directo de $250 millones de dólares, mientras que el gasto total, que incluye compras no relacionadas con el evento, podría alcanzar una inyección económica de $400 millones de dólares.
En cuanto al impacto sociopolítico y cultural, esta serie de conciertos no sólo buscan enaltecer al pueblo boricua, sino que también ofrecen un vistazo a la vida cotidiana de la comunidad, las tradiciones e, incluso, las problemáticas de la isla. Con ello, el tres veces acreedor al GRAMMY ha logrado transformar su show en un símbolo de resistencia.
“Un claro ejemplo de ello es ‘El apagón’, donde habla de la privatización de la energía y el éxodo de los puertorriqueños. Convierte un problema local en un himno de resistencia colectiva”, explica Quiroz. “Esto también se nota en el uso del famoso ‘sapoconcho’ - un nuevo accesorio de peluche del cantante - que si bien está inspirado en una especie de peligro de extinción, también lo convierte en un símbolo de resistencia frente a la amenaza de gentrificación y explotación ambiental, que no sólo se vive en Puerto Rico, sino en todo el continente y, sobre todo, en los países de América Latina.”
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El papel de Bad Bunny en la industria musical va más allá del entretenimiento y las ventas. Benito Antonio está empoderando a todo un pueblo, mientras construye su legado. “Los puertorriqueños tenemos ese pensamiento de que aquí no hay futuro, pero Bad Bunny nos hizo entender que Puerto Rico es más que eso”, señala para CNN Sebastián Muñiz Morales, ilustrador y fan de Bad Bunny.
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