La dicotomía de los Dallas Cowboys
Los Dallas Cowboys tienen el mejor ataque, pero cuentan con la peor defensa de la NFL y eso no es suficiente para contender.
Los Dallas Cowboys son un equipo distinto con Brian Schottenheimer como head coach. El entrenador en jefe ha comenzado su periplo con el ‘America’s Team’ con un récord de 1-2-1 tras cuatro semanas y parece que tiene destellos de lo que podría hacer de una franquicia mediocre en una ganadora.
Schottenheimer fue el coordinador ofensivo de Dallas durante las dos temporadas previas y ahora es el encargado de llamar las jugadas. Eso es vital para un equipo que tiene en Dak Presscott al quarterback mejor pagado de la NFL y trata de alcanzar el Super Bowl por primera vez en 30 temporadas.
El cambio ha sido tan bueno que los Cowboys tienen la mejor ofensiva de la NFL en cuestión de yardas generadas. Prescott y compañía han generado 1,617 yardas totales, para un promedio de 404.25 por partido.
El quarterback de Dallas es el número uno en la liga en pases completados e intentados. Además, a Prescott no lo supera ningún otro quarterback en yardas porque acumula 1,119 tras sus primeros cuatro juegos.
El nivel de Prescott ha sido tal que Jerry Jones dijo que era indispensable pagarle al quarterback y no así en el caso de Micah Parsons. Después de enviarlo a Green Bay en un canje, los Packers hicieron del linebacker al jugador defensivo mejor pagado de la NFL.
“Es muy simple: para mí, Dak era indispensable”, dijo el dueño de los Cowboys. “Micah no. Son solo números. Así de fácil. Y no es nada personal”.
Una ofensiva excelente, una defensa insignificante
El problema de Dallas es que su defensa no detiene a nadie. La unidad comandada por Matt Eberflus, el antiguo head coach de los Chicago Bears, ha dejado que todos los rivales les pasen por encima. Los Cowboys han permitido 1,682 yardas a la defensiva y eso significa que son 420.5 por encuentro.
La defensiva terrestre de Dallas se defiende, puesto que permiten solo 493 yardas, suficiente para estar en la mediocridad de la liga. Sin embargo, la secundaria es la peor unidad de los Cowboys. Las 1,189 yardas en contra son la mayor cantidad de cualquier otro equipo.
La franquicia texana ha permitido 10 touchdowns por la vía aérea, pero tres de ellos han sido en contra de Trevon Diggs. Él no es el cornerback que más yardas permite, porque esa posición de deshonor le pertenece a Kaiir Elam, tras permitir 244.
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Si los Cowboys quieren competir por un puesto de playoffs en 2025, deben hacer un cambio. La ofensiva puede mantener el ritmo, pero si la defensa sigue porosa, no hay solución en el primer año de Schottenheimer como head coach.
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