Marina García desvela sus fuentes de ingresos tras ‘La isla de las tentaciones’

Marina García saltó a la fama gracias a su paso por la tercera edición de ‘La isla de las tentaciones’, el programa de Telecinco al que acudió para poner a prueba su romance con Jesús Sánchez. Una historia de amor que saltó por los aires cuando la andaluza cayó en la tentación con Isaac Torres. Sin embargo, Marina y Jesús supieron superar este bache por lo que a día de hoy siguen juntos.

Tras su aventura en República Dominicana, la joven optó por alejarse de los platós de televisión para poner a resguardo su salud mental. A diferencia de muchos de sus compañeros de programa, Marina prefirió establecer sus fuentes de ingresos más allá de la pequeña pantalla siendo las redes sociales y sus empresas su principal fuente de sustento.

“Estoy asegurando mi futuro emprendiendo”, dice. “Tengo una clínica, y si Dios quiere, otra en camino. Además son creadora de contenido en redes sociales”, explica muy orgullosa. “Yo de chollo tengo poco, lo que tengo es esfuerzo”, añade. La andaluza suma más de 730.000 seguidores en Instagram y se acerca al medio millón en TikTok.

Una clínica de estética

Con ayuda de su madre y un equipo de profesionales médicos, Marina García ha visto cumplido su gran sueño de ser propietaria de una clínica estética: ‘Abril’. Un centro en el que se realizan tratamientos de lo más variados y que está siendo todo un éxito, según ha revelado la propia joven en sus redes sociales. En cuanto a Instagram, la influencer suele compartir a diario sus looks, así como diversos consejos de belleza y moda.

Su relación con Jesús Sánchez

“Las segundas oportunidades funcionan. Si no hubiera ido a ‘La isla de las tentaciones’ y no hubiera hecho frente a todo lo que allí pasó, no seguiríamos juntos a día de hoy. Muchas veces tienes que perder algo para darte cuenta de que lo echas de menos y eso fue lo que nos pasó a nosotros. Cuando tú quieres a alguien y ese alguien es tu vida, se perdona. Cuando quieres formar una familia con alguien y empezar los dos de cero, y veis realmente el cambio se perdona”, confesó.