Los 10 lugares que no te puedes perder si viajas a San Petesburgo para ver el Suiza-España
Este viernes se disputará en San Petesburgo el primer partido de los cuartos de final de la Eurocopa. Si viajas a esta ciudad, no te puedes perder sus lugares con encanto.
Este viernes 2 de julio España disputará los cuartos de final de la Eurocopa ante Suiza en el Estadio Krestovsky de San Petesburgo. Tanto aficionados suizos como españoles viajarán a Rusia para animar a sus selecciones en la recta final del campeonato. Algunos cogerán un avión de ida y vuelta y otros aprovecharán para hacer turismo por la ciudad rusa. Por ello, desde Civitatis han elaborado una lista con 10 lugares imprescindibles que no te puedes perder si viajas a San Petesburgo.
Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada
Visitar la iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada es una de las cosas fundamentales que debes hacer si viajas a San Petesburgo. Es un edificio de estilo ruso y es uno de los iconos de la ciudad. En su interior se puede observar una de las colecciones de mosaicos más importantes de toda Europa y visitar el lugar exacto donde fue asesinado el zar Alejandro II. Precisamente, esta basílica fue mandada construir por su hijo, Alejandro III, en honor a su padre.
Palacio de Invierno
Fue construido en el siglo XVIII y fue la residencia oficial de los zares de Rusia. Est un complejo barroco y rococó que posee un total de dos kilómetros de fachada y en su interior hay 1.500 habitaciones y alrededor de 2.000 puertas. Este lugar fue el escenario del Domingo Sangriento ocurrido el 22 de enero de 1905.
Teatro Mariinski
Este lugar es un referente artístico en todo el mundo mandado construir por la zarina Catalina la Grande. Está decorado con piedras semipreciosas y mármol de diferentes colores. Fue construido por el arquitecto Alberto Cavos y debe su inspiración a la Ópera de Dresde. En sus 160 años de historia ha sido escenario de grandes bailarines como Vaslav Nijinsky y Anna Pávlovna.
Catedral de San Pedro y San Pablo
Está ubicado dentro de la fortaleza de San Pedro y San Pablo, a orillas del río Neva. Dentro de la basílica cuelgan lámparas de araña y se pueden ver algunas de las tumbas de la dinastía Romanov.
Columna de Alejandro
Se trata de una pilastra de más de 47 metros que conmemora la victoria de los rusos contra las tropas francesas en la época de las guerras napoleónicas. Es otro de los lugares obligados de visitar si viajas a la ciudad rusa.
Museo Dostoyevski
Fiódor Dostoyevski fue una de las grandes y más importantes figuras literarias de la Rusia zarista. Su museo se encuentra en la última casa donde vivió el artista y donde escribió su novela Los hermanos Karamázov. En su interior los visitantes pueden observar objetos personales del literato, como fotografías, muebles o documentos.
Catedral de San Isaac
Está considerada una de las iglesias más grandes del mundo y también ostenta el título de la cuarta catedral más alta del mundo debido a los 101,5 metros de su cúpula. Esta catedral guarda una curiosidad y es que debido a los bombardeos de las II Guerra Mundial fue pintada de gris para que no pudieran destruirla y pasara desapercibida desde las alturas.
Palacio Peterhorf
Es un conjunto de edificios y jardines barrocos que en la antigüedad fue la residencia de verano de los zares y es conocido como el ‘Versalles ruso’. Está situado a 29 kilómetros de San Petersburgo, en la orilla del golfo de Finlandia.
Campo de Marte
Es el parque más grande de la ciudad y es uno de los lugares más representativos de San Petersburgo. En 1942 se cubrió de tierras de cultivo para abastecer al ejército de la antigua Leningrado. En la actualidad alberga algunas tumbas de los caídos durante la revolución, como bolcheviques y comisarios del Ejército Rojo.
Museo Fabergé
Este museo acoge una colección de 4.000 obras de plata, pintura, porcelana, bronce y otros materiales. Pero, sin duda, la pieza más importante son nueve huevos de Pascua imperiales realizados por la joyería Casa Fabergé para los dos últimos zares: Alejandro III y Nicolás II. La pieza más llamativa es el huevo de la coronación, un tesoro realizado con rubíes y platino que esconde un carruaje zarino dotado con todos sus detalles, tal y como explican desde Civitatis.