La historia de cómo Chris Hemsworth coló a su hija en una atracción de Disneyland

Faltan solo unas semanas para que se estrene la última entrega de 'Los Vengadores' y su carismático reparto se encuentra inmerso en una extensa campaña de promoción que ya está dejando varios momentos para el recuerdo. Y uno de los últimos ha sido la confesión de Chris Hemsworth sobre la experiencia que vivió junto a su hija India en el paraíso infantil por antonomasia: Disneyland.

Y es que Hemsworth, que forma junto a Elsa Pataky una de las familias de celebritys más queridas y admiradas, es todo un padrazo y parece estar dispuesto a hacer lo que sea con tal de ver los sueños de sus retoños cumplidos. Pero hubo una ocasión en la que que su empeño por conseguirlo casi se le fue de las manos, y lo que obtuvo en consecuencia fue un buen susto y cierto grado de arrepentimiento por 'saltarse la ley'.

El australiano contó su alarmante historia en el programa de Jimmy Kimmel, a raíz de que el presentador les preguntara a él y sus compañeros en el plató, Scarlett Johanson, Robert Downey Jr y Paul Rudd, por su visita al gran parque de atracciones californiano la pasada semana, con razón de un evento de donación para ONGs infantiles. Hemsworth recordó entonces, cómo, en un viaje anterior a Disneyland con sus hijos, su primogénita India quería fervientemente montarse en la atracción de la Torre del Terror, pero su estatura no llegaba al límite permitido.

"Estaba realmente disgustada, así que yo me puse en plan 'olvídalo, ven aquí', y cogí varias barras de Snickers (un tipo de golosina) y se las metí en la parte de atrás de las zapatillas, bajo sus tobillos". El truco para alzar la altura de su pequeña funcionó, porque efectivamente, le permitieron la entrada. Algo que Scarlett Johanson calificó mientras el australiano contaba el relato de "salvajemente inrresponsable". "Se pone peor" aseguró Hemsworth antes de proseguir la anécdota.

"Estamos en lo alto, me pongo a mirarla, ya atada, y el asiento le quedaba gigante, y le digo 'vencimos al sistema, bien hecho, cariño'". El problema llegó cuando la atracción se puso en marcha, y el actor se vio obligado a agarrar con fuerza a su hija para que no saltara por los aires. "Estaba gritando durante toda la bajada", recordó el intérprete antes de bromear: "A lo mejor hay una razón por la que ponen unos requisitos de altura".

A pesar del tono ligero con el que narró el episodio, el australiano aseguró que no debería haber cometido esa pequeña ilegalidad y que gracias a Dios, salieron de una pieza de la atracción. El propio Jimmy Kimmel, por otro lado, no pudo si no reconocer su impresión ante el ingenio del intérprete. "Tengo que decir que es muy creativo, lo de las barras de Snickers en las zapatillas", declaró el presentador.