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INDIAN WELLS

Nadal sobrevive a Muller y se cita con... Fernando Verdasco

Tras 131 minutos de intenso sufrimiento, Nadal venció por 6-2, 2-6 y 6-4 al zurdo luxemburgués Gilles Muller. En el próximo partido espera Verdasco. Nadal-Muller en directo

Actualizado a
Rafa Nadal consiguió vencer a Muller tras un largo partido. Espera en la siguiente ronda Fernando Verdasco.
AFP

Un triunfo enloquecido en una noche siniestra en el Desierto del Valle de Coachella coloca a Rafael Nadal en la tercera ronda del Masters 1000 de Indian Wells, ante... Fernando Verdasco, que ha ganado a Rafa en tres de sus cuatro últimos cruces: el más reciente y crucial en la primera ronda del Abierto de Australia, en enero pasado. Eso, pese a que Nadal domina el 'cara a cara ' total por 15-3.

Tras 131 minutos de intenso sufrimiento, Nadal venció por 6-2, 2-6 y 6-4 al zurdo luxemburgués Gilles Muller, quien en la tercera manga dispuso de dos puntos sobre el saque de Rafa para irse a servir con 4-3 a favor. Antes, Verdasco había pasado su turno cuando el zurdo eslovaco Martin Klizan se retiró con 5-3 para el madrileño y 15/40: fue justo tras la séptima doble falta de Klizan, que se quejó de lo que parecía un tirón abdominal o intercostal. Verdasco y Nadal se cruzarán en la jornada del martes.

Ante Muller (número 45 de la ATP), Nadal gobernó el primer set con un solvente 6-2 en solo 36 minutos y con sendas roturas a favor... solo para verse envuelto, al cerrarse la noche en Indian Wells, en un inesperado carrusel de rachas de viento y servicios cortados de Muller: 1,93 de altura. En el primer set, Muller solo tuvo un punto de 'break' a favor (0/1). Pero lanzado al ataque en la red (donde ganó 17/20 puntos en esa segunda manga) el luxemburgués se apuntó el segundo parcial con un dominador 6-2... y con 3/11 en puntos de rotura, frente a esa solitaria ocasión de 'break' que Muller había manejado en el primer set. En ese set inicial, Nadal había ganado 80% de puntos con primeros servicios. En el segundo... 50%, y con segundos saques por debajo de 140 km/h, que optimizaban los ataques de Muller. Este es el primer set que Muller gana a Nadal desde 2005, cuando apeó a Rafa en Wimbledon.

La bola volaba muy alto y fuera de control, entre el viento, los lejanos aullidos de coyotes y al aire del desierto californiano de Palm Springs: era un combate de zurdo contra zurdo. Larry Ellison, el multimillonario propietario del torneo, y Conchita Martínez, capitana de los equipos españoles de Copa Davis y Federación, sufrían como demonios (al igual que Francis Roig, técnico de Nadal en Indian Wells)... y se hundían entre mantas, como si fueran tramperos.

Entre plásticos y papeles voladores, y con el público entregado a favor de Nadal, el tercer set fue un 'Thriller' o un 'Western', pese a tratarse solamente de una segunda ronda. Algo salvaje. Entre efectos demoníacos, Muller cabalgaba hacia la red (26 puntos ganados en 46 subidas, por 12/20 para Nadal), a base de martillazos secos y planos, menos sensibles al viento. Con reveses cortados e intentando controlar, Nadal se defendió como un coyote cercado o tiroteado: al fin, hubo 22 errores no forzados para Rafa por 31 totales para Muller.

El punto de inflexión llegó en el 3-3 de ese set final, cuando Nadal escapó de los dos últimos puntos de rotura a favor de Muller (3/14): el segundo, un dramático intercambio en la red. El luxemburgués ya solo ganaría un juego más.

Con 5-4, Rafa Nadal (64% de puntos ganados con primeros servicios, frente a los seis saques directos de Muller) resolvió al tercer 'match point. Fue con un 'passing' de revés cruzado al resto, en su tiro ganador número 27: Muller, 28. Al fin, Rafa Nadal aulló en triunfo al viento de la salvaje noche de Coachella. Y mañana le espera... Verdasco.

Nadal: "He ganado por carácter"

Rafa Nadal analizó así su victoria ante Muller, aún sobre la misma pista del Stadium de Indian Wells: "Ha sido un triunfo importantísimo y que me hace feliz, por el tipo de partido que se ha tenido que jugar y ante un rival tan incómodo como Muller, que no ha parado de ser agresivo. El viento ha hecho que juguemos en condiciones muy difíciles. Hubo que luchar todo el tiempo para poner cada bola en pista. Había esperar la oportunidad correcta en cada momento. Por todas estas circunstancias y por el mismo juego de ataque de Muller, tuve que jugar mucho tiempo en posiciones traseras en la pista pero luché y peleé con la actitud y el carácter que hacían falta. Ese carácter es lo que me ha dado la victoria"