Una buena condición física es un factor de vital importancia en casi cualquier deporte que se nos venga a la cabeza. Sin embargo, el hecho de gozar de unas grandes aptitudes en esta faceta no implica que podamos derrochar nuestra energía de una forma innecesaria.

En el mundo del tenis, encontramos jugadores físicamente muy capacitados pero que no saben gestionar su energía y terminan, en muchas ocasiones, más agotados que otros que no están tan en forma pero que saben dosificarse y medir los tiempos del partido.

A continuación, vamos a ver las claves más importantes que debemos tener en cuenta para convertirnos en jugadores más eficientes.

Aprende a recuperar

A nivel amateur, muchas veces ejecutamos un golpe que creemos que es contundente y automáticamente desconectamos nuestra actividad de piernas. Es imprescindible que después de cada golpe, tengamos al menos la intención de movernos hacia el centro de la pista para que no dejemos demasiado espacio abierto y tengamos que pegarnos un sprint que nos agote más de la cuenta.

Desplazamientos

Cuando nos movemos por la pista, debemos optar siempre por la ruta más corta desde nuestra posición hasta la bola. Por eso, debemos dominar muy bien los desplazamientos laterales, para llegar con el tiempo suficiente para ejecutar un golpe con garantías y con la colocación adecuada. Si corremos como pollo sin cabeza, vamos a exigir mucho a nuestro cuerpo y los resultados no van a ser tan buenos realmente.

Ubícate

Es muy importante que nos sintamos cómodos desde nuestra posición en todo momento. Por eso, debemos saber bien cuándo debemos situarnos sobre la línea de fondo, cuando podemos avanzar para desplegar un tenis ofensivo y cuándo debemos replegarnos para buscar nuestra oportunidad desde la retaguardia. Pero eso no es algo que se aprenda con un consejo teórico, eso es algo en lo que debemos fijarnos constantemente para mejorar nuestra visión de juego y estar siempre en la mejor posición posible para optar a ganar el punto.

Gestiona el riesgo

No todos los momentos son iguales en un partido de tenis. La mentalidad de no dar un punto por perdido y luchar cada bola como si fuera la última es un concepto romántico de este deporte que no siempre surte efecto y que no todos podemos llevar a cabo, porque nuestro físico no es el de Nadal. Entonces, debemos entender que si vamos perdiendo 4-0 en el primer set y no estamos finos en los intercambios largos, quizá sea el momento de buscar sensaciones arriesgando un poco más y generando dudas en la raqueta rival, porque ya no hay demasiado que perder en esa manga. El hecho de buscar la consecución del punto por la vía rápida te puede ayudar a afinar tus golpes y coger una bocanada de aire con la mirada puesta en el segundo set.