Las 6 novedades de Counter Strike 2 que marcan una nueva era en la saga

Hace algo más de una década que Counter Strike: Global Offensive está con nosotros. Sus inicios fueron humildes, quizás incluso infames, gracias a un lanzamiento más bien rocambolesco de las manos de Hidden Path Entertainment. Poco después Valve toma los mandos del timón y durante el resto de la década procede a perfeccionar Global Offensive hasta convertirlo en el multijugador táctico de disparos por excelencia. Los que dudaron al principio y se mantuvieron firmes a las previas versiones del juego, ya fueran 1.6 o Source, poco a poco fueron migrando a Global Offensive hasta que millones de personas se reunían cada día en Mirage o Dust II para apuntarse a las cabezas.

Ahora, de repente, nada de eso existe. De golpe y porrazo, sin haberlo pedido por gran parte de la comunidad, Global Offensive ha desaparecido y reemplazado violentamente por Counter Strike 2. Quizás haya sido un movimiento controvertido y la secuela se nos presenta un producto algo escueto, con menos modos y mapas que Global Offensive. Pero el esqueleto que tenemos aquí ya es digno de admiración gracias a la transformación total que sufre Counter Strike al pasar a Source Engine 2. A continuación vamos a contarte las seis grandes mejoras que hacen de Counter Strike 2 el marco perfecto en el que encuadrar la década venidera.

Humos volumétricos

Sin duda, la mayor novedad de esta secuela son las nuevas bombas de humo. Lejos quedan aquellos humos de Global Offensive que la comunidad aprendió a manipular para poder ver desde ángulos en los que los enemigos podían detectarse. Los nuevos humos siempre se ven igual para cada jugador, se expanden para rellenar los huecos a su rededor y reaccionan a disparos y granadas. La estrategia milenaria de tirar un humo sobre la bomba para desactivarla ahora puede desbaratarse con una sola granada de fragmentación, dejando al descubierto al pobre contraterrorista que creía ser maestro del sigilo. En un juego donde el cambio más mínimo a las granadas de humo es significativo, no podemos esperar a ver como el “meta” se desarrolla entre los profesionales.

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Mejoras gráficas

Un nuevo motor gráfico no puede sino merecer una gran mejora gráfica y lo cierto es que el salto hacia adelante de CS2 es significativo. Por supuesto, nunca vamos a hablar de un juego con la fidelidad gráfica de otros grandes del género, pues aquí lo importante es que el juego corra de la manera más fluida posible para el máximo número de jugadores. Pero esto no impide que Valve haya hecho acopio de innumerables detalles para darle nueva vida a la experiencia. El cocktail molotov ahora tiene liquido dentro que reacciona al movimiento y un nuevo efecto, las armas tienen nuevos modelos, hay nuevos efectos para los tiros a la cabeza, brillos, reflejos que no estaban antes… Todo es nuevo sin haberse perdido la esencia de lo viejo.

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Los mapas de siempre, ahora más bonitos

Al igual que el resto de detalles, la estrella de Counter Strike, sus eternos mapas, ha recibido también el mimo adecuado. Algunos como Mirage, Dust II o Ancient solo han recibido mejoras gráficas para ponerlos al día con el resto del motor. Otros, como Overpass o Inferno han recibido substanciales mejoras gráficas que cambian completamente su aspecto. Inferno, especialmente, se ha convertido ahora en un pequeño pueblo italiano repleto de detalles, siendo ejemplar la evolución de su iglesia. Lo que antes era una pequeña capilla ahora da sensación de ser una gran iglesia, eco en sus sonidos incluido. Cada mapa goza de pequeños detalles en su iluminación que no solo los hace más bonitos sino que hace que ahora los jugadores proyecten sombras en algunos lugares. Esto puede ser clave para la jugabilidad, permitiéndonos saber por donde viene un enemigo antes de que se muestre en pantalla. Como mejora jugable, se ha quitado el techo invisible de los mapas, permitiendo nuevas formas de tirar humos.

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Nuevo sistema de armamento

Antaño todo el mundo empezaba la partida con las mismas armas. Ahora deberemos escoger las que queremos llevar al campo de batalla antes de empezar la partida. Esto hace que algunas armas vayan a quedar relegadas a la ignominia, si, pero también trae consigo nuuevas posibilidades como llevar la misma versión de un arma silenciada o sin silenciador, o llevar la Desert Eagle con el Revolver. Los usuarios de escopetas y LMGs quizás echen de menos tener a gente que se las pueda prestar durante una partida, eso sí. Otra incorporación, tomada directamente de Valorant, es la posibilidad de devolver los objetos una vez comprados. Una muy útil incorporación que minimiza las veces que compramos el arma equivocada.

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Modo Premier

Finalmente, no podía faltar un nuevo sistema de emparejamiento de jugadores. El modo premier se estrenó en Global Offensive, pero vuelve aquí evolucionado y posicionado como el modo de juego principal. Busca partida y en poco tiempo estarás prohibiendo o escogiendo mapas. En unos dos minutos ha empezado la partida y, al terminar, ganaremos o perderemos ‘ELO’. Según vayamos subiendo o bajando, veremos nuestra posición en el ranking, con la posibilidad de situarnos en las tablas clasificatorias si lo hacemos suficientemente bien. El sistema funciona bastante bien, aunque está por ver como de justo es en largo plazo. Mientras tanto, si no queremos jugar al mapa que toque, siempre podemos escoger jugar partidas clasificatorias en mapas concretos. Tendremos rango individual en cada mapa, lo cual impide que alguien que domina en Mirage se enfrente a gente que solo juega Inferno al cambiar de mapa. En cada mapa jugaremos con gente de nuestro nivel en cada mapa.

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Nuevo sistema de red

Counter Strike es un juego de precisión y velocidad absoluta. Cada muerte suele depender de fracciones de segundo y milímetros de posicionamiento del ratón. Es así que la importancia de que nuestros tiros vayan a donde deben ir, cuando deben llegar, es sumamente importante. Counter Strike 2 introduce el nuevo sistema de “subtick” donde, en vez de que el servidor solo sepa 128 veces por segundo lo que ocurre, cada acción lleva una especie de marcador que indica cuando ha sucedido. Por ahora hay pegas, como el movimiento y los retrocesos que no se adecúan suficiente a lo que había en Global Offensive. Pero lo que ya se ha conseguido es que jamás tenemos la sensación de haber dado un tiro que el juego nos ha negado. Fuera queda esa sensación de que hemos presionado el gatillo antes de lo que muestra el juego. Dispara y si fallas o aciertas está en tu mano. Queda por ver si Valve conseguirá replicar la sensación del movimiento y los retrocesos en servidores de 128 ticks, eso sí.

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