Sí, no me escondo, 'Star Wars: The Acolyte' me ha gustado y estas son las razones por las que debería renovar
La serie ha recibido numerosas críticas y su continuidad está en entredicho, pero hay argumentos a favor de que la historia se siga desarrollando.
No recibo billetitos frescos de Disney como me han acusado en las redes sociales. Tampoco soy de los que se callan ante ciertos comentarios misóginos, machistas, homófobos y racistas que se vierten todos los días en este estercolero llamado X. Desde aquel primer teaser tráiler en el que un zumbado se dedicó a contar el número de mujeres y personas no blancas que había en una de las escenas, supe que a ‘Star Wars: The Acolyte’ le iba a caer un chaparrón de odio, como así ocurrió: review bombing, insultos, que si agenda woke, que si ‘Star Wars’ ha muerto... otro día más dentro de esta comunidad, que ha normalizado ciertos comportamientos tóxicos. Quiero dejar claro que es totalmente lícito que la serie no te haya gustado. Estoy seguro de que puedes argumentar y construir un debate sano desde el respeto. Y sí, es posible que no estemos de acuerdo, pero esto no va de verdades universales.
Voy a dejar de lado toda la mierda que rodea a ‘The Acolyte’, ese odio visceral que nada tiene que ver con la serie en sí. Tampoco deseo perder el tiempo con esos que hiperventilan ante supuestas violaciones del canon o que se enfadan por los cambios con respecto al Universo Expandido. Primero porque Legends no es canon y segundo porque nunca lo fue, aunque tanto George Lucas como los actuales creativos de Lucasfilm hayan incorporado numerosos elementos de esos productos. De hecho, la showrunner Leslye Headland ha demostrado que conoce en profundidad el lore del UE.
No es infalible, pero tiene cosas muy interesantes
‘The Acolyte’ está lejos de ser perfecta: tiene inconsistencias de guion, el montaje es por momentos errático y no todas las actuaciones están a la altura. También padece uno de los males que se han visto en otras series de ‘Star Wars’ y de Marvel: algunos escenarios parecen de cartón piedra. Al principio lo atribuía al uso de Stagecraft, pero esta serie se ha filmado a la manera tradicional y tampoco luce como una producción de 180 millones de dólares. Lucasfilm tiene que empezar a cuidar más este aspecto, porque lo visual siempre ha sido una de las señas de identidad de la saga. Y eso que las coreografías y las batallas con sables láser han sido las mejores desde las precuelas.
¿Por qué una segunda temporada de ‘The Acolyte? Para empezar, porque estamos en una época muy interesante de la galaxia. Es el final de la Alta República y las grietas dentro de la Orden Jedi comienzan a hacerse patentes. Bajo ese revestimiento de esplendor reverencial se esconde una capa de polvo y suciedad que esconden bajo los adoquines del Templo jedi. Algunos han criticado que la serie represente a los Jedi como “los malos”, pero la realidad es más compleja. Tanto las precuelas como la trilogía original giran en torno a la idea de que la Orden no es infalible, que tenía buenas intenciones, pero que contribuyó irremediablemente al desastre. Tan cegados estaban que el Alto Consejo se reunía con un Sith en su despachoy ninguno se percató de que el peligro estaba en su propia casa. De Ki-Adi Mundi mejor ni hablo, ya que es un personaje creado ex profeso para plasmar esa realidad.
Que el maestro Sol sea un buen hombre no quiere decir que no pueda hacer cosas malas. Que Vernestra sea una gran Jedi no significa que no pueda tomar las peores decisiones. Las palabras del senador Raillencourt contra la Orden Jedi son una especie de profecía de lo que ocurrirá en los años posteriores, pero Vernestra reacciona con altivez y prefiere tapar el asesinato de sus compañeros y la identidad del asesino, su Padawan Qimir. Mejor culpar a alguien que ya no puede defenderse porque está muerto e incinerado. En la escena final, la veterana maestra mantiene una conversación con Yoda, y aunque no se conoce el contenido de la reunión, tampoco es descabellado que el Gran Maestro sepa cosas que luego oculte a los demás. No olvidemos que el sabio maestro mantuvo en secreto la verdad sobre la creación del ejército clon, es decir, encubrió los errores de los Jedi con buenas intenciones, pero las consecuencias fueron terribles.
La serie ha establecido la bases para desarrollar una historia que enlaza con las precuelas. Uno de los problemas a la hora de valorar un argumento en constante evolución es que no conocemos todos sus entresijos, por lo que se pueden llegar a conclusiones equivocadas. Lo que nos ha narrado ‘The Acolyte’ es que las brujas de Brendok lograron crear a las gemelas Osha y Mae a través de la Fuerza, pero ¿cuál es el papel de Darth Plagueis el Sabio en esto? ¿Es mero espectador o un agente activo en el experimento? El maestro de Darth Sidious consiguió manipular los midiclorianos para crear vida, aunque su objetivo final fue siempre la vida eterna.
Es cierto que la trama principal de ‘Star Wars: The Acolyte’ ha concluido, pero al mismo tiempo se abren muchas incógnitas con respecto al futuro de Qimir y Osha —maestro y acólita—, lo que Plagueis hará al respecto (por esa época regía la Regla de Dos) y lo que hará Vernestra con Mae. Toda esta intriga no se puede dejar en el aire, Lucasfilm debe continuar la historia de una u otra manera. Un nuevo caso como el de ‘Han Solo: Una Historia de Star Wars’ no sería para nada deseable, así que abogo por una segunda temporada o una nueva serie que aborde este fascinante período. #RenewtheAcolyte.