Cine
Van Damme estuvo a punto de “llamarse” como el perro más famoso de Stephen King
Stephen King y su novela ‘Cujo’ sobre un perro asesino influyeron de forma indirecta en el origen del nombre artístico de Jean-Claude Van Damme.
Continuamos con el abultado anecdotario sobre Jean-Claude Van Damme. O, mejor dicho, sobre Jean-Claude Camille François Van Varenberg, el nombre real del actor y artista marcial belga nacido en 1960. Antes de saltar al estrellato, y consciente de que su nombre completo era muy complejo, JCVD decidió “bautizarse” no como Jean-Claude Van Damme, sino con otro nombre completamente distinto que cambió por culpa de un libro de Stephen King. “Frank Cujo” era el nombre con el que pretendía darse a conocer al público norteamericano, pero el éxito de la novela de terror ‘Cujo’ de King le hicieron replantearse la decisión.
Jean-Claude Van Damme originalmente iba a usar “Frank Cujo” como nombre artístico pero lo cambió por culpa de la novela de Stephen King
El razonamiento de Jean-Claude a la hora de “cambiar” su nombre para poder venderse mejor no era algo sin fundamento. A lo largo de los años, son muchas las estrellas que han usado nombres artísticos radicalmente distintos a sus nombres reales. ¿Un par de ejemplos? El nombre real de Jamie Foxx es Eric Marlon Bishop, o Vin Diesel, cuyo nombre y apellidos de nacimiento es Mark Sinclair.
Cuando se mudó a Los Ángeles en 1982, JC tenía claro que para poder triunfar también requería un cambio radical de nombre. Su primera opción fue “Frank Cujo”, nombre que para él tenía gancho... pero que desgraciadamente le asociaría con un perro también llamado Cujo y que se hizo famoso por la novela homónima de Stephen King de 1981.
La novela de terror de King dio el salto a la gran pantalla un par de años después, en 1983. En ambos casos se nos cuenta la historia de Cujo, un San Bernardo que es contagiado de rabia tras ser mordido por un murciélago, convirtiéndolo en un ser tremendamente violento que mata a personas. Efectivamente, a Jean-Claude no le convenía que se le asociara con un concepto tan desagradable.
Este fue el motivo por el que el ex-artista marcial descartó por completo su primera opción. No obstante, el origen de Jean-Claude Van Damme como nombre también tiene su historia, aunque breve. El belga pretendía homenajear a uno de sus mejores amigos de su adolescencia. ¿El nombre del amigo en cuestión? Paul Van Damme. De esta forma, JCVD no solo había “ganado” un nombre con gancho, sino que también homenajeaba a un amigo al que admiraba.