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‘Star Wars The Princess and the Scoundrel’, así es la boda y la ajetreada luna de miel de Leia y Han
Justo después de ‘Episodio VI: El Retorno del Jedi’, la pareja contrae matrimonio y se dirige a un nueva aventura, en la que tendrán que enfrentarse a peligros de muerte.
¡Fuego sobre la luna de Endor! ¿Estrellas fugaces zigzagueando por el firmamento? No, fragmentos de la Segunda Estrella de la Muerte, el arma definitiva del Imperio Galáctico, ahora convertida en polvo estelar. A la muerte de Darth Vader y Darth Sidious, la fiesta estalla, los ewooks bailan y los rebeldes celebran. Mientras tanto, Luke Skywalker vela la incineración de la armadura del Sith en el funeral de su padre, un acto de contrición que realiza en solitario. ‘Star Wars The Princess and the Scoundrel’ (traducido como ‘La Princesa y el Bribón en Latinoamérica) es la novela que narra los hechos inmediatamente posteriores a ‘El Retorno del Jedi’.
Beth Revis plasma un contexto político muy complejo. A pesar de la caída del emperador y de la derrota en Endor, las estructuras del Imperio no han sido destruidas por completo. Eso significa que en la práctica todavía hay sistemas que controlan, destructores estelares que pilotan y esclavos que retienen. Poseen acceso al arsenal y a las tropas armadas, con lo que la rebelión ha de actuar con presteza, correr la voz y enfrentarse a los remanentes imperiales para evitar cualquier conato de resistencia.
En una galaxia compuesta por tantos sistemas, confeccionar noticias falsas y bulos es relativamente sencillo. ¿Quién se va a creer que Palpatine ha muerto? El Imperio Galáctico se esfuerza en difuminar la verdad y en difundir que el emperador no se encontraba en la Estrella de la Muerte cuando esta se hizo añicos. Por todo esto, Leia es reticente y descarta tomarse un descanso, aunque Mon Mothma—exsenadora y figura clave de la Rebelión— trata de disuadirla.
La novela narra un episodio clave en la historia de Star Wars, la boda entre Han Solo y Leia. La ceremonia se produce de manera casi abrupta, íntima, en la mismísima luna de Endor y oficiada por los ancianos Ewoks. El general viste una chaqueta prestada por Lando (le dice que se fabricó en Alderaan, pero luego se descubre que es mentira) y la princesa un bonito vestido. Justo después de la ceremonia, la pareja accede a viajar en un crucero turístico de luna de miel.
Ni que decir tiene que Leia Organa no se queda de brazos cruzados, ni siquiera en su luna de miel. Acepta hacer el viaje bajo la condición de poder ejercer como diplomática, así que se las ingenia para desviar el crucero hasta Madurs, un planeta helado que esconde un gran misterio y unos cuantos peligros (por supuesto relacionados con el malvado Imperio Galáctico). La princesa se debate entre sus dos naturalezas, la de la diplomática y la de la Jedi: sabe que es sensible a la Fuerza, pero teme convertirse en un monstruo como Darth Vader, su padre biológico. La restauración de la República y la transición hacia el modelo democrático depende de lo que ocurra en los días postreros, por lo que contar con otra Jedi puede ser una ventaja.
Como casi todas las obras basadas en Star Wars, ‘The Princess and the Scoundrel’ no destaca por el estilo de su prosa, poco adornada con figuras retóricas y aderezos literarios, pero sí narra una historia que retrata el futuro de dos los personajes cruciales de la saga, su futuro inmediato tras ‘El Retorno del Jedi’. Junto a ‘Leia: Princesa de Alderaan’ y ‘Star Wars Bloodline”, esta novela sigue construyendo a Leia y Han, camino hacia las secuelas, diferente con respecto al Universo Expandido (véase la antigua trilogía de Thrawn de Timothy Zhan).