One Piece Odyssey anuncia su primer DLC, Reunion of Memories, con Enel y el arco de Skypiea

Bandai Namco Entertainment acaba de presentar en un tráiler (sobre estas líneas) Reunion of Memories, un primer DLC para One Piece Odyssey, el aplaudido JRPG basado en el manga de Eiichiro Oda que se estrenó el pasado 12 de enero en PS4, PS5, Xbox y PC. Por lo que podemos ver en el vídeo, esta expansión nos devolverá a los mundos de Memoria que ya visitamos durante la historia principal, aunque esta vez se nos presentará una realidad alternativa de los mismos. Una realidad distinta, más oscura (con suerte también más difícil) y totalmente ajena a los recuerdos de Luffy. Por ejemplo, en nuestro regreso a Arabasta descubriremos un reino en el que Crocodile se salió con la suya y se apoderó del país.

Pero no todo será reciclar contenidos y cambiar ligeramente las skins de los protagonistas (¡aunque nos alegramos de ver el traje de Robin cuando era parte de Baroque Works!). Al final del tráiler también hace una aparición estelar Enel, el temido “Dios” que aterrorizó Skypiea hasta la llegada de los Sombrero de Paja. ¿Se habrá animado One Piece Odyssey a incluir el arco más controvertido de la serie? Saltado por muchos como si de un vulgar relleno se tratara (Skypiea / Skipea, ba dum tsss), la Isla del Cielo ha resultado ser muy importante en el devenir de la trama, por lo que nosotros, como partidarios del mismo, nos alegramos.

Reunion of Memories será parte del llamado Adventure Expansion Pack de One Piece Odyssey, que puede obtenerse en la PlayStation Store y la Xbox Store por 24,99 euros (intuimos que no será el último DLC del juego). Y para los que aún dudéis de si merece la pena el juego, así hablamos de él en nuestro análisis:

“Quizás no sea el tesoro que escondió Gol D. Roger en su día, pero Odyssey es un sí como una casa de grande para cualquier fan de One Piece. Ha calcado el espíritu de la serie con acierto y está lleno repleto de guiños y bromas que harán las delicias de los fans del universo de Eiichiro Oda. Hay tantos detalles por los que sonreír (la historia inédita, las voces originales, los ataques, las ciudades) que a menudo nos olvidaremos de los puntos donde cojea y nos limitaremos a disfrutar de una de las mejores adaptaciones de One Piece hasta la fecha. Si lo despojamos de su licencia y ambientación nos queda un JRPG más discretito que, sin llegar a ser malo, sí que se antoja un tanto antiguo, simple y repetitivo. Evidentemente no llega al nivel de los Dragon Quest en los que se inspiraba, pero tampoco hace el ridículo por el camino y funciona mejor que muchos de los musous recientes de la saga. Café para muy cafeteros, sí, ¿pero acaso hay alguien que no sea fan de los Sombrero de Paja a estas alturas? Porque en ese caso tenemos algo que decir. Gomu gomu no… ¡bazooka!”