Ni la tercera posición: una consola infantil desconocida ha vendido más que Xbox en Estados Unidos durante el Black Friday

La marca Xbox se encuentra en una enorme encrucijada, y sus ventas de hardware están bajo mínimos históricos. Un nuevo hito se ha producido durante el pasado Black Friday en Estados Unidos. Mientras que PlayStation 5 y Nintendo Switch 2 se han convertido en las compras estrella de cara a la campaña navideña, en tercer lugar no ha estado Xbox Series X|S, sino NEX Playground, una consola basada en control por movimiento enfocada al juego en familia.

Una consola relativamente desconocida arrebata el tercer puesto en ventas a Xbox en el Black Friday 2025 en Estados Unidos

Un reporte reciente de Circana/Mat Piscatella ha analizado las tendencias de compra y consumo durante el pasado Black Friday en el ámbito de los videojuegos en Estados Unidos. La primera y la segunda posición de las consolas más vendidas no sorprenden: un 47% de las ventas de hardware corresponden a PS5, lo cual indica que goza de muy buena salud. El 24% corresponde a Nintendo Switch 2, que ha sido lanzada este año y goza de un enorme interés entre sus fans.

Pero en el tercer puesto es donde está la sorpresa: lo normal sería pensar que esta posición quedaría reservada para Xbox... pero no, en tercer lugar está NEX Playground, con un 14% de las ventas de hardware. El 15% restante estaría vinculado al resto de plataformas, donde entrarían la primera Nintendo Switch, PlayStation 4 y Xbox Series X|S, así como otras videoconsolas dedicadas de terceros como la peculiar NEX Playground.

La noticia se ha viralizado en redes debido a lo ilustrativa que es sobre el estado real del ecosistema Xbox en cuanto a ventas de consolas, máxime teniendo en cuenta que Estados Unidos ha sido la región donde típicamente se han registrado las mayores ventas de hardware de Xbox. Sin embargo, en esta ocasión, una consola tan ignota como NEX Playground ha conseguido imponerse en ventas en estas fechas ante la máquina de Microsoft.

A grandes rasgos, NEX Playground es una consola pensada para niños y familias, con cinco juegos preinstalados, y la posibilidad de acceder a su catálogo completo digital mediante un sistema de suscripción. Entre sus títulos se encuentran juegos como Fruit Ninja, Starri, Whac-a-Mole, Go Keeper o Party Fowl, e incluso juegos licenciados basados en ‘Barrio Sésamo’ o ‘Bluey’.

Para muchos usuarios no ha pasado desapercibida la ironía de que una consola con control basado en el movimiento haya superado a Xbox, marca que en el pasado impulsó su propio periférico dedicado, Kinect, hasta su discontinuación a mediados de la década pasada tras apenas cinco años de vida y muchas promesas incumplidas.

Microsoft ha metido a Xbox en un agujero del que es muy difícil salir

De las tres grandes fabricantes de consolas, Microsoft/Xbox es, sin duda, la que más ha abrazado un modelo de negocio digital en detrimento del físico. A base de impulsar su servicio de suscripción Game Pass y de prescindir de muchos lanzamientos físicos tradicionales completos en disco —juegos first party como Indiana Jones y el Gran Círculo son “falsos físicos”—, muchos expertos coinciden en que han ido “educando” paulatinamente a sus usuarios para dejar de comprar juegos físicos... e incluso consolas, gracias al juego en la nube y a través de otros dispositivos.

Microsoft lleva años empujando a sus usuarios tradicionales a pagar tanto por videojuegos digitales en consola o PC como por sus diferentes servicios de suscripción, como el citado Game Pass y Xbox Cloud Gaming. El razonamiento es maximizar beneficios a base de captar usuarios y reducir costes, pero, por contra, esta estrategia ha alienado a muchos jugadores tradicionales, quienes vieron tierras más fértiles tanto en PC fuera del ecosistema de Microsoft/Xbox como en consolas de la competencia.

En este contexto, el dato del Black Friday no es un simple tropiezo puntual, sino el enésimo síntoma visible de un desgaste que no comenzó ni ayer, ni hace un mes. Este deterioro percibido de la marca lleva fraguándose durante muchos años, y está teniendo consecuencias trágicas para las consolas Xbox. Que una consola infantil, desconocida para el gran público y sin más pretensiones que ofrecer pasar ratos agradables en familia haya logrado adelantar a Xbox Series X|S en el mercado históricamente más fiel a Microsoft deja claro que la estrategia actual no solo no funciona, sino que es contraproducente.

Si Xbox no redefine pronto su propuesta —ya sea con un hardware que realmente marque la diferencia con respecto a lo que ofrece la competencia, un ecosistema mejor cohesionado, o “rescatar” de nuevo el concepto de exclusividad—, nada hará que puedan recuperar la confianza del jugador tradicional... y episodios como este no serán una anomalía, sino la nueva normalidad.

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