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Manga

‘Dragon Ball’ y el poder limitado de las Bolas de Dragón: esta es la regla inquebrantable de Toriyama

Repasamos el origen de las Bolas de Dragón y sus poderes y por qué están limitados a nivel de número y tipos de deseos a concedir.

Dragon Ball Goku

El mito de las Bolas de Dragón ha sido un elemento clave de la historia de ‘Dragon Ball’, más al principio con las continuas aventuras de Goku, Bulma y compañía para encontrarlas, pero que han tenido una gran importancia en sagas posteriores, tanto para ciertos villanos como parte de sus malvados planes como para nuestros protagonistas para resucitar a sus grandes héroes caídos en batalla, eso sin contar con algún que otro deseo de lo más egoísta y simple por parte de ciertos personajes de la serie creada por Akira Toriyama.

Las Bolas de Dragón y sus estrictas normas

Aunque lo que más llama la atención de las Bolas de Dragón es la aparición del dragón Shenlong tras reunirlas a través de una especie de efecto místico en el que se hace de noche. Cuando se ha pedido el deseo -o los que toquen en cada momento de la serie-, las bolas se convierten en piedra y vuelven a esparcirse por el planeta, quedando inutilizadas durante un año. Eso sí, las propias esferas mágicas cumplen con ciertas normas que no se pueden romper y vienen determinadas por su creador.

Dragon Ball Goku
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Tanto es así, que las Bolas de Dragón del planeta Tierra no pueden conceder deseos de poder superior a los de su creador, Kami-sama, tal y como ha indicado el propio dragón Shenlong en alguna ocasión. De esta manera, se entiende que el poder de las Bolas de Dragón va unido al poder de su creador, por lo que si su creador hubiera sido un personaje con más poder, las Bolas de Dragón podrían conceder deseos aún más poderosos.

Es por ello que ciertas normas como no resucitar a un personaje más de una vez o la muerte de un villano que no se puede derrotar son deseos imposibles para Shenlong, estableciendo así unos cánones a nivel de historia que no se pueden sortear según convenga.