¿Qué libro leo esta semana?
‘Alas de Sangre’ viene a marcar época en la literatura fantástica moderna
Rebecca Yarros ha conseguido crear un mundo y unos personajes que han cautivado a millones de lectores a lo largo y ancho del mundo con una novela de romance, llena de acción y dragones despiadados.
Leer ‘Alas de Sangre’ tiene una gran advertencia o Red Flag como le gusta decir en estos días a la comunidad de la Generación Z. Y es que si no eres el público objetivo para el que fue escrito (adolescente entre los 13 y 25 años, mayoritariamente femenino), tal vez este libro no sea para ti. El lector debe asimilar ese concepto y separar prejuicios antes de embarcarse en la lectura de esta novela. Ahora bien, si el lector o lectora es capaz de abstraerse y simplemente darle la oportunidad a la obra de Rebecca Yarros, se encontrará con una historia que engancha y entretiene desde la primera línea.
‘Alas de sangre’ es el primer libro de una saga llamada ‘Empíreo’ y se mueve entre el género de fantasía y el romántico. Atención que aquí se vienen más anglicismos. Estamos ante un “Romantasy” (combinación de las palabras “romantic” y “fantasy”) y el tan de moda “Enemies to Lovers” (de enemigo a amante) que se emplea en este tipo de género. Es decir, el chica conoce a chico de toda la vida... Todo englobado, y aquí viene lo bueno para el resto del público, con magia, dragones y guerras épicas.
Una novela con tanto romance como acción
‘Alas de Sangre’ nos cuenta la historia de Violet Sorrengail quien creía que se uniría al Cuadrante de los Escribas para vivir una vida tranquila, sin embargo, por órdenes de su madre, debe unirse a los miles de candidatos que, en el Colegio de Guerra de Basgiath, luchan por formar parte de la élite de Navarre: el Cuadrante de los Jinetes de dragones.
Esta primera parte de la saga Empíreo tiene pasajes que recuerdan a grandes éxitos de la literatura. Hay ingredientes de ‘Sinsajo’ (supervivencia), los dragones de ‘Juego de Tronos’ y la crudeza o violencia del ‘Juego del calamar’ o ‘La Larga Marcha’ de Stephen King. La obra de Rebecca Yarros posee un ritmo frenético en el que en todas las páginas hay nueva información, la historia avanza constantemente y vamos descubriendo a los personajes poco a poco pero sin pausa y de una forma altamente entretenida.
Como punto negativo hay que destacar que hay situaciones que están vagamente descritas y algunos elementos contra los que luchan nuestros protagonistas son algo complicados de imaginar para el lector.
Además, estamos ante una novela que tiene varios giros de guion que harán las delicias de todas las personas amantes del suspense y, buenas noticias, si te acaba gustando ya tienes ‘Alas de Hierro’, la segunda entrega de la saga ya traducida y publicada no exenta de polémica.
¿Merece la pena leer ‘Alas de sangre’?
Sí, y si eses de esos lectores capaces de separar el público objetivo de la obra, vas a poder disfrutar muchísimo esta novela a pesar de tener todos los ingredientes de cautivar al público juvenil. ‘Alas de sangre’ está a la altura de otros fenómenos literarios que en su momento rompieron moldes.