Xenoblade Chronicles X: Definitive Edition - explorando las aventuras de hace una década

Han pasado varias vidas, pero hace poco más de 10 años me encontraba haciendo lo mismo. Xenoblade Chronicles X debutó originalmente en Wii U, una de las joyas menos reconocidas de la desafortunada consola. Nintendo ha venido trabajando en recuperar varios títulos de esa generación, dándoles una segunda oportunidad gracias al éxito del Switch, la cual ya se encuentra en su recta final. Este juego de Monolith Soft era de los pocos que quedaban pendientes, y su llegada no solo rescata una experiencia destacada, sino que permite tener toda la saga jugable en una misma plataforma.

De vuelta en Mira

Xenoblade Chronicles X: Definitive Edition es, como su nombre indica, una versión renovada y mejorada del título original. Este RPG comienza con la humanidad huyendo de la Tierra tras un conflicto con razas alienígenas en arcas que garantizan su supervivencia. Una de las naves de escape, la White Whale, termina aterrizando de emergencia en el planeta Mira. Allí, los sobrevivientes fundan su primera ciudad, New Los Angeles y comienzan la tarea de adaptarse, explorar el nuevo mundo y recuperar los restos de su nave, entre las cuales su prioridad se encuentranmateriales así como cápsulas con otros humanos. Uno de ellos es el protagonista, un personaje personalizable que servirá como nuestro avatar.

Mira sigue siendo un entorno fascinante: vasto, impredecible, con una topografía única y con criaturas de todos los tamaños y niveles. Desde el inicio, Xenoblade Chronicles X no tiene reparos en lanzarte enemigos que fácilmente pueden superar tu nivel, obligándote a replantear rutas si quieres sobrevivir. La exploración es uno de los pilares principales del juego. Desde el principio, el mundo abierto está disponible, permitiendo que coloques sondas para descubrir recursos, enemigos únicos y otros secretos. Estas sondas también ayudan a potenciar las tiendas y facilitan la recolección de información útil.

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La exploración del planeta es una de las piedras angulares de este título, con un mundo abierto libre desde el principio, Parte de esto se da gracias a las múltiples sondas que puedes dejar en los puntos designados, pudiendo descubrir desde tesoros, enemigos más grandes, y uno que otro misterio. Estas mismas sondas podrán especializarse, ayudándote a obtener más recursos para mejorar las tiendas en New Los Angeles, u obtener más información sobre las zonas al rededor. El juego cuenta con sus misiones de historia, divididas en capítulos, pero como buen RPG, parte de la diversión y exploración se encuentra en sus misiones secundarias las cuales serán la guía de este juego.

El juego se mantiene muy similar a lo que vimos en la versión de Wii U, para bien y para mal. Hay algunos cambios en cómo se controla el juego, considerando que su versión original se jugaba tanto en el televisor como en la pantalla del Wii U, teniendo que hacerse algunos cambios para que corra en el Switch. En este aspecto, hay detalles que hacen que este sea un juego que se aprecie mejor en un televisor que en el modo handheld, sobre todo a lo que se refiere con textos, los cuales quedan muy pequeños en la pantalla del Switch.

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A pesar de los avances visuales y las mejoras que muchos personajes recibieron para esta versión, hay elementos como los modelos de los personajes, que ya se ven de hace una década. Aunque no es algo completamente malo, sí son detalles que se comienzan a notar, y que pudieron haber tenido un retoque. El aspecto visual se ve y se siente bastante bien. Si algo hay que reconocerle a Monolith Soft es su habilidad en poder crear mundos abiertos extensos con múltiples elementos, sin hacer que haya caídas de cuadros.

Una mejor calidad de vida

Aunque claro, hay cosas que mejoraron y se añadieron para esta versión, teniendo una gran cantidad de elementos de calidad de vida y que ayudan a mucho de los elementos que le pesaban al original. Las primeras diferencias están entre todos los menús, haciendo que aspectos como cambiar el horario en Mira, como la administración de tu equipo se pueda hacer en el momento deseado, sin tener que estar moviéndote de un lado para otro. Por otro lado, la cámara del original también cambia, siendo el control de esta mucho más sencillo e intuitivo que en la versión de Wii U.

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Por otro lado, el combate se ve renovado. Ahora tenemos la opción de recargar de forma rápida nuestras habilidades (o Arts), siempre y cuando se haya acumulado la energía necesaria para poder hacerlo. Esto hace que los combates se vuelvan más rápidos y ágiles. Si si sincronizas bien con tu equipo en sus peticiones, logras activar el modo Turbo, acelerando las acciones de forma notable

Finalmente, tenemos un modo en línea renovado que desafortunadamenteno pude probar, pero que promete una experiencia de MMORPG en este JRPG. Y claro, también se cuenta con una historia extra al final de todo lo que jugamos, otorgando más horas de juego para quienes busquen alguna excusa para seguir recorriendo Mira.

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Xenoblade Chronicles X cumple en varios frentes. Rescata uno de los clásicos del Wii U sumado con aspectos renovados, así como permitir jugar toda esta franquicia en una sola consola. La historia se mantiene y los ajustes de calidad de vida le dan un nuevo aire a esta obra, aunque claro, otros detalles visuales como los modelos de los personajes ya se le notan mucho los años.

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