Ubisoft
The Rogue Prince of Persia, primeras impresiones de un nuevo principe roguelite
Evil Empire aprovecha lo aprendido en Dead Cells para traer una nueva versión de Prince of Persia, trayendo un príncipe listo para regresar a la acción.
Es impresionante que en menos de un año, tengamos dos títulos que lleven el nombre de Prince of Persia. El reciente The Lost Crown fue una sorpresa que supo adaptar al género Metroidvania, y que fue muy bien recibido por la crítica. Ahora, y de sorpresa, el estudio de Burdeos, Evil Empire, llega con su interpretación de esta franquicia, bajo la lupa de un rogue lite. Tuvimos la oportunidad de jugar un poco de esta nueva entrega en la franquicia, que va con el nombre de The Rogue Prince of Persia.
¿Cómo es que llegó a darse The Rogue Prince of Persia?
Es importante destacar que Evil Empire, un estudio que no es parte de los tantos estudios y subsidiarias de Ubisoft, tenga la oportunidad de hacer este título, o explicar en palabras de Matthew Houghton, marketing Manager del estudio, “qué estamos haciendo con nuestras manos sucias” en esta franquicia de Ubisoft. Tras el éxito con Dead Cells, su juego roguevania junto con Motion Twins y en una reunión tras una conferencia, alguien en Evil Empire preguntó “¿Qué genial sería si pudieramos usar lo que aprendimos de Dead Cells y crear un roguelike de Prince of Persia?” Esta idea fue el catalizador para que el estudio pensara qué se podía hacer, y es así el proyecto detrás de The Rogue Prince of Persia nació.
Un nuevo príncipe de Persia llega a salvar su pueblo
The Rogue Prince of Persia promete un juego roguelike 2D de plataforma que aprovecha muchas de las mecánicas que hemos conocido en los últimos 20 años, como saltar, columpiarse y correr por las paredes, así como portar varias armas y realizar movimientos acrobáticos para superar a tus enemigos. Y a todo esto, agregarle los elementos de un roguelike que Evil Empire aprendió a implementar tan bien con Dead Cells.
En esta nueva entrega, nuestro nuevo Príncipe de Persia tiene que hacerse de estas habilidades para detener la terrible invasión de los Hunos liderada por el rey Ogai y los cuales están usando magia que corrompe todo lo que toca. El príncipe, por su lado, tiene cierta magia de su lado, ya que porta un amuleto que le permite revivir en el último lugar verdaderamente seguro en el que estuvo antes de morir, lo cual en el juego se traduce a un Oasis escondido a las afueras de la ciudad.
Y es que este Oasis es nuestro hub para cada uno de los runs de este roguelite. Dentro de nuestra sesión de juego tuvimos la oportunidad de jugar durante 30 minutos los dos primeros niveles y enfrentarnos a primer jefe (spoiler alert, no logramos derrotarlo). Este hub nos permite cambiar nuestras armas, entre espadas, dagas gemelas y una gran hacha, así como otras armas secundarias. Aquí pasamos a un primer nivel que sirve como un breve tutorial de cómo moverte a lo largo de la ciudad, algunas de las trampas que puedes encontrar, así como los primeros enemigos a enfrentar.
Dentro de las mecánicas conocidas de Prince of Persia, tenemos mucho el movimiento de saltar, brincar en las paredes, y atacar, pero más importante el de correr por las paredes. Si bien en juegos anteriores podíamos hacerlo hacia la izquierda o derecha, ahora también lo podremos hacer con cierto grado de inclinación hacia arriba, permitiendo que el mapa tenga una mayor verticalidad y que el jugador alcance puntos que podrían ser inalcanzables. Y claro, si has jugado algún título de Prince of Persia, también ayudará a evitar las mútliples trampas, picos, y demás elementos que uno tendrá que evitar.
Tomando mucho de Prince of Persia, el combate es rápido y muy caótico. El uso de espadas para un combate cercano es apenas una parte, ya que también podrás lanzar patadas para desestabilizar a los enemigos, o incluso caer desde arriba para causar un gran impacto en un área. La agilidad del príncipe también permite que uno logre escabullirse rápidamente entre los enemigos, saltar, y buscar siempre la manera de atacar sin ser atacado (algo muy importante en un título de esta índole).
Otro de los detalles son los diferentes medallones que encontramos en el camino. Estos nos darán ciertos bonus en nuestros ataques y funcionan como las bonificaciones que crean permutaciones en cada run de un roguelike. Solo podemos cargar 4 de estos medallones por run, pero lo interesante es que dependiendo de dónde se coloque en esta fila de espacios, es qué tan efectivo se volverá. Alguno pedirá ya tener dos medallones a la derecha, o a la izquierda, o estar rodeado, por lo que también tendremos que ser estratégicos en cómo los vamos colocando para aprovecharlos mejor. Estos medallones permiten no solo darle más fuerza a nuestro ataque, sino en algunos casos si llegamos a patear algún enemigo o lanzar una flecha, enveneralos, o dejar alguna sustancia que los alente.
El arte tiene un aspecto muy particular. Personalmente, no fui muy fan del acabado de los personajes, pero dentro del juego es algo que pasa a segundo plano. El movimiento de estos es bastante fluido, y se podría decir que el propio principe tiene un buen lejos.
¿Cómo es que llegará The Rogue Prince of Persia?
Uno de los detalles sorprendentes es que Evil Empire tiene planeado que The Rogue Prince of Persia llegue como un título en acceso anticipado en Steam. Aunque la base del combate y movimiento es bastante fuerte el estudio considera que pueden hacer una mejor versión del juego con el apoyo de la comunidad. El título irá agregando nuevos niveles, jefes, armas y enemigos, así como elementos que considere la comunidad. The Rogue Prince of Persia estará disponible a partir del 14 de mayo y ya se encuentra listo para agregar al wishlist de Steam.
The Rogue Prince of Persia nos presenta un título que tiene un gameplay bastante solido y que hace un gran tributo a la franquicia. El gameplay es intuitivo si has jugado algo relacionado a Prince of Persia en los últimos 21 años y las mecánicas rogue lite se acoplan bastante bien. Media hora es apenas suficiente para entender bien las mecánicas básicas del juego, pero nos da una idea de hacia dónde quieren ir.