El Alpha de World of Warcraft: The War Within nos ha mostrado una nueva zona hermosa y con grande promesa

World of Warcraft es un fenómeno que, si bien ha tenido sus altibajos, sigue siendo uno de los pilares insignia del género MMO. Durante casi 20 años desde su lanzamiento, Blizzard Entertainment ha lanzado expansión tras expansión para el juego, con hordas de jugadores volviendo a él cada vez. Pero de alguna manera, The War Within se ha sentido algo diferente desde que se reveló por primera vez en la Blizzcon 2023.

Considerado como el comienzo de una nueva forma de contar historias, así como la primera de una trilogía de expansiones que comprenden lo que los desarrolladores llaman “The Worldsoul Saga”, War Within ha prometido cambiar las cosas para el juego en más de un sentido. Hemos tenido la suerte de haber sido invitados por Blizzard para probar la primera Alpha del juego y durante la mayor parte de esta semana hemos estado explorando las áreas iniciales de la Isla de Dorn, donde toma lugar esta nueva expansión.

Directo a lo bueno

Tan pronto como iniciamos el Alpha, aparecimos en medio de una escena caótica: nuestro personaje despierta bajo un montón de rocas, después de haber sobrevivido a un accidente masivo debido a eventos aún no revelados. Pero considerando la horda de criaturas araña (los nerubianos) que atacan a los otros supervivientes en la playa, no es tan difícil adivinar qué pudo haber sucedido. Aquí, los héroes de Warcraft Jaina y Thrall mantienen a raya a un monstruo tras otro, ofreciéndote tus primeras misiones: matar algunas bestias y ayudar a otros supervivientes de algún evento catastrófico que le ocurrió a la ciudad flotante de Dalaran.

Después de luchar contra nuestros asaltantes, somos salvados por un grupo de Stormriders que proceden a llevarte en un vuelo a través de nubes tormentosas, elevándose lentamente a través de corrientes de aire hasta que ves la enorme ciudad de Dornogal, sus pilares mecánicos y mágicos elevándose alto en el cielo, levantándose en el horizonte.

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Es seguro decir que, incluso en un estado tan temprano en el que faltan escenas y texto donde debería estar el diálogo, esta expansión está pensada para ser mucho más cinematográfica y dinámica de lo que estamos acostumbrados en las anteriores. Esta vez no pasa mucho tiempo antes de que puedas explorar la ciudad y todo lo que la rodea. Desde el principio puedes ver una identidad clara en el diseño de todo lo que te rodea, difícil de explicar simplemente con palabras: es una ciudad hermosa y épica, claramente destinada a estar repleta de muchos jugadores, pero que por el momento se siente vacía a causa de la naturaleza de ser solo una prueba. Los Earthen (la raza principal de criaturas de esta expansión que parecen enanos, pero no lo son) caminan por doquier, y aprendes sobre su historia, cultura y tecnología en casi todas las misiones que encuentres.

Todo está en la aventura

Entonces, ¿qué haces exactamente en The War Within? Si bien hay mucha historia por descubrir y sentirse un poco abrumado por ella, Blizzard ha apostado por ofrecer nuevas cantidades de contenido para que los jugadores disfruten. Aparte de las muchas misiones habituales repartidas por la nueva zona de Dorn, que no se desvían mucho de lo que quizás estés acostumbrado en WoW y otros MMO, la principal novedad del juego es un nuevo tipo de instancia PvE llamada “Delves”.

Las “Delves” son esencialmente un nuevo tipo de dungeon, mucho más pequeños, que se pueden hacer en solitario o con un equipo de 2 a 4 jugadores. Estas instancias son experiencias PvE cortas que están destinadas a otorgar a los jugadores botín: desde oro hasta equipo y todo lo demás. La principal diferencia entre estas y los dungeons normales es que las “Delves”en realidad están diseñadas para ser experiencias narrativas. A lo largo de cada uno de estos, estás acompañado por un personaje NPC que interactúa contigo y con el entorno, mientras avanza la historia y, a veces, incluso forma parte de la trama principal de la expansión. Sin embargo, los desarrolladores nos dijeron que las “Delves” están planeadas como un nuevo tipo de contenido que se puede actualizar y expandir en entregas futuras.

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Lo que realmente son en el juego son aventuras cortas, de 10 a 15 minutos de duración, en las que realizas un recorrido rápido por escenarios interesantes. Cada vez que entres en una obtendrás un nuevo botín y hay dificultades desbloqueables para cada una de ellas que pueden ofrecer un mayor desafío y una mejor calidad del botín. Están claramente diseñadas.para jugadores que prefieren el contenido para un jugador y descubrir el mundo, en lugar de los ejercicios exigentes en los que se han convertido los Dungeons y las Incursiones.

Aparte de eso, en el poco tiempo que tuvimos con Alpha la otra característica principal que brilló claramente por encima de todas las demás es el nuevo Vuelo Dinámico. Anteriormente presentado como Dragonriding en la última expansión, Dragonflight, el nuevo y popular método de transporte se volvió tan exitoso que los desarrolladores no tuvieron dudas en convertirlo en una parte integral del juego. Y se nota como el diseño de la nueva zona es mucho más grande que las zonas clásicas del juego donde no se permite este tipo de vuelo.

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Esta es la primera expansión que permite a los jugadores volar desde el principio, lo que significa que los mapas están diseñados para adaptarse a este tipo de viajes, siendo enormes y, a menudo, más altos que nunca. Tu montura (un grifo azul brillante que usan los Stormriders de Dorn) puede mejorarse a medida que avanzas, con habilidades y “vigor” que dictan tus capacidades para volar. Una vez que lo dominas (ya que puede ser un poco complicado al principio), es increíblemente atractivo y divertido.

Entonces… ¿es este el mayor cambio en World of Warcraft hasta el momento?

Al observar solo esta pequeña porción del curso completo, es difícil evaluar cómo resultarán las cosas al final. Blizzard parece estar impulsando The War Within como EL MEJOR momento para que los nuevos jugadores se unan al juego, dado que recién ahora están comenzando un nuevo arco argumental. Pero cuando miras cómo se hacen las cosas en el juego, este no es el caso de momento.

Además del problema muy obvio de que debes ser nivel 70+ para disfrutar de esta expansión, lo que significa que debes subir de nivel en contenido antiguo o comprar un impulso para que puedas comenzar a jugar de inmediato, no existe una verdadera manera en que The War Within sea amigable para los novatos. Si haces lo último, empezarás a jugar con tantos talentos y habilidades que te llevará días acostumbrarte a los controles.

Viéndolo desde la historia, las misiones iniciales que nos mostraron tampoco ayudan: la historia no trata a los jugadores como protagonistas, sino que te hace sentir como una mosca en la pared mientras docenas de otros personajes se reparten montones de exposición y drama entre ellos para establecer la historia. Sí, eres “El Campeón” y, sin embargo, te reciben con misiones de “matar x cantidad de monstruos” y “ayudar a x personas tendidas en el suelo” otorgadas por los verdaderos héroes de la historia, que luchan heroicamente contra los monstruos mientras tu haces el trabajo de siempre.

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Incluso los Delves se centran en el NPC que te acompaña, lo cual, si bien es divertido, no sería tan emocionante para los nuevos jugadores que acaban de llegar sin saber quién es quién. Siempre lamentaremos la pérdida de la dualidad original de Warcraft, aquella que enfrentaba a la Alianza contra la Horda en una eterna rivalidad, y que aquí ha desaparecido por completo de cualquier tipo de trama.

Sin embargo, debemos reiterar que solo hemos experimentado una parte muy pequeña del juego. Este es todavía un trabajo en progreso con muchas cosas por agregar, por lo que no sabremos qué esperar de la historia o el juego hasta que Blizzard decida revelar más.