Anime
‘Yaiba’, un clásico del creador de Detective Conan, regresa en forma de remake
Un regreso que promete y del que se encargará la prestigiosa Wit Studio.
‘Yaiba’, una de las obras más populares a final de la década de los 80 y comienzos de los 90, siendo junto a ‘Magic Kaito’ la obra que catapultó a la fama a Gosho Aoyama, el creador de ‘Detective Conan’. Ahora, ‘Yaiba’ tendrá una adaptación animada en forma de remake que estará a cargo de Wit Studio, el prestigioso estudio de animación que adaptó las primeras temporadas de ‘Shingeki no Kyojin’ y otras obras como ‘Vinland Saga’ o ‘Ranking of Kings’.
‘Yaiba’ es una de las series más destacadas en la historia de la Weekly Shonen Sunday, la revista semanal de manga de la editorial Shogakukan que es una de las competidoras de la popular Weekly Shonen Jump de Shueisha. A lo largo de las décadas han aparecido en las páginas de la Weekly Shonen Sunday multitud de mangas destacados, y uno de sus autores más prolíficos es Gosho Aoyama, tanto por ‘Yaiba’ como por ‘Detective Conan’.
Un clásico que vuelve en forma de remake por un prestigioso estudio de animación
El manga de ‘Yaiba’ comenzó a publicarse en 1988 y terminó en 1993, con un anime que se estrenó en 1993 y llegó hasta 1994 con un total de 52 episodios, no llegando a adaptar el manga por completo.
La sinopsis de ‘Yaiba’ dice lo siguiente: “Yaiba Kurogane es un niño que quiere convertirse en el mejor samurái. Desde muy pequeño se entrenó en una remota isla con su padre, Kenjuro Kurogane. Para aprender a ser un verdadero samurái, regresa a casa junto a sus mascotas, un tigre llamado Kagetora y un buitre de nombre Shonosuke. Es allí donde conoce al rival de su padre y a su hija, Sayaka Mine. Un día, Yaiba se acerca al insituto de Sayaka y conoce a Takeshi Onimaru, capitán del equipo de kendo, con quien se reta para mostrar quien es el más fuerte. Yaiba gana el combate. Takeshi, cegado por su derrota, decide usar una espada legendaria, herencia de su familia, en la cuál está encerrado el espíritu del Dios del Viento, dejándose poseer por él y convirtiéndose así en un demonio”.