La saga WipEout nos ha dado juegos de gran calidad, y Wip3out: Special Edition no es una excepción.

Para saber la importancia de este título, lo que ha significado y contribuido a PlayStation en particular, y al mundo de los videojuegos en general, hemos de echar marcha atrás, a un lejano mes de Septiembre de 1995. Por aquel entonces, la carismática consola de la "novata" Sony hacia acto de presencia en el viejo continente, dejando tras ella un comprensible escepticismo a cerca de como reaccionaria la máquina en el mercado europeo, donde los gustos de los consumidores son muy distantes de Japón. Como alternativa a Saturn y sus famosísimos Virtua Fighter y Daytona USA, PlayStation venía no con un pan bajo el brazo... sino cinco.

El que puede ser considerado el mejor quinteto que una consola a poseído jamás en día de su debut: Ridge Racer, Toshinden, Tekken, Destruction Derby y uno que brillaba con luz propia, Wipe Out.

El título que realmente demostró al mundo las capacidades técnicas del monstruo gris, arrasó literalmente en toda Europa. Tanto prensa especializada, compañías de software y usuarios no tuvieron mas remedio que inclinarse ante el juego que recogía mejor el espíritu de una nueva generación y una consola: Originalidad, revolución y calidad. Bajo estas premisas, Psygnosis la creadora del juego, fue laureada a mas no poder y Wipe Out coronado como mejor juego del año por la gran mayoría.

No sólo fue el culpable de desequilibrar la batalla de la anterior generación, sino de mostrar a las claras las deficiencias de sus rivales al adaptar Wipe Out 2097 a otros formatos. Sony ha de estarle agradecida a la compañía de Leeds el tremendo éxito que le supuso.

Pero ¿que era lo que el juego tenía en sus entrañas que tanto atraía a los usuarios ?

Muchas virtudes se podrían decir, pero las mas llamativas fueron la auténtica revolución gráfica llevada a cabo, creando un universo plenamente identificado con la estética y mentalidad del juego bajo la atenta mano de Designers Republic. Unos circuitos surrealistas, con curbas, subidas, túneles y saltos imposibles de superar desfilaron por nuestros ojos a una velocidad y suavidad nunca vista.

El hecho de prescindir de vehículos y dotar al juego de ese ambiente futurista con naves anti gravitatorias a ras de suelo supuso toda una novedad (algunos afirmaban cierta semejanza de planteamiento con F-Zero... ).

Y como colofón una banda sonora de música electrónica que hizo estragos en toda Europa... de esta forma nadie pudo resistirse (aquí se incluye un servidor).

Con cada nuevo lanzamiento de esta saga, se han ido limando defectos, siendo la abanderada de las nuevas generaciones de títulos de PlayStation. El acierto mas importante fue la eliminación de los choques al primer roce con cualquier elemento del escenario en la segunda entrega, pues suponía un verdadero handicap para los jugadores menos avezados.

Y de esta forma, el mito resurge de las cenizas del tiempo y vuelve a la carga para ponernos de nuevo el estómago en el cielo al coger rectas a mas de 700km/h. No nos encontramos en esta ocasión con un capítulo nuevo como muchos hubiésemos deseado (eso es coto privado para los futuros usuarios de PS2), sino mas bien un remake del último capítulo de la trilogía, Wipe3Out. De esta forma, la compañía quiere rendir homenaje al título que mayor éxito les ha proporcionado y dar la posibilidad a todos los usuarios de poder disfrutar de una recopilación formada en base de circuitos de la primera ( impagable el poder recorrer de nuevo el circuito de la demo de PlayStation del año 1995, eso sí, actualizado convenientemente a los días que corren) segunda y tercera entrega respectivamente.

Todos, en mayor o menor medida han sido modernizados con mas detalles, algún que otro efecto de luz y reflejo nuevo, alta resolución y una mayor suavidad en el conjunto general es la nota predominante.

En donde se han centrado los programadores ha sido en ofrecer multitud de modos de juego, por lo que la vida de este compacto respecto a la anterior entrega se hace mas duradera. Disponemos de Carrera Sencilla, Contrarreloj, Desafío, Torneo (por puntos). En todas estas modalidades se puede escoger entre Liga WipeOut, que contiene los circuitos de la tercera entrega, y la Liga Clásica, que posee circuitos de las dos anteriores ediciones.

En total, tendremos a nuestra disposición ocho circuitos, que se pueden incrementar según vallamos avanzando el Torneos y demás.

Otro aspecto destacable es la Modalidad Desafío, donde nos dan a elegir entre tres maneras posibles de disputar una cursa: Desafío Normal (ir disputando carreras y ganar medallas), Desafío de Tiempo y Desafío de Armas, este último el cual se basa en derrotar al mayo número de oponentes. En cualquiera de los distintos modos, si somos lo suficientemente hábiles, seremos recompensados con circuitos especiales de la primera y segunda entrega, todo un detalle por parte de los muchachos de Psygnosis.

Tampoco se han modificado los potenciadores de carrera, la esencia de Wipe Out. Todo sigue igual desde la segunda entrega. Así podremos utilizar en carrera turbos, escudo, misiles dobles, teledirigidos, invencibilidad, minas terrestres, misil mortal, piloto automático... y el mejor de todos... una onda expansiva que sacude el trazado cual alfombra al viento, creando un efecto muy espectacular e impresionante.

El control del juego pertenece intacto, y con él, los orígenes de una saga de culto. La suavidad de desplazamiento se ha mejorado, y la velocidad reducido un poco para llegar a ser mas controlable.

En definitiva, sabemos que la perfección no existe en un videojuego... pero este Wipe Out Special Edition es lo más cercano que puedes encontrar en este género. Una maravilla para cualquier tipo de usuario. Tengas los gustos que tengas, te enganchará sin remedio.

El entorno gráfico ha sido uno de los aspectos que han caracterizado este título a lo largo de su trayectoria. Las pistas son una verdadera obra de arte, ya sea en trazado y creación, como diseño de todos los elementos que rodean al juego. Unas curvas de infarto, rectas, túneles... todo esta echo perfectamente, a medida, para crear unas sensaciones de vértigo completamente reales.

El ambiente caótico-futurista que respira el compacto se debe en gran medida a los diseños de Designers Republic, que desde los inicios de Wipe Out ha mantenido fielmente las señas de identidad, dejando huella en los diseños de carteles, paneles, colorido de las fases, creación arquitectónica, incluyendo algún que otro circuito prototipo de anteriores entregas... incluso los menús del juego son los mas originales y sofisticados de cuantos se han creado hasta la fecha.

Mención especial a los geniales efectos de luces, creando unos degradados geniales y otorgando relieve a las texturas (a falta de bump mapping... talento de los programadores). Nunca se ha visto un juego de PlayStation con tantos puntos de luz en pantalla, distintos y de gran calidad, creando unas transparencias geniales. Si a esto le sumamos que todo esta en alta resolución en pantalla y se mueve a una velocidad y fluidez para quitarse el sombrero, solo nos queda reconocer que Psygnosis es una auténtica especialista con el hardware Sony.

Las naves se han visto estilizadas y ahora poseen unos modelos mas futuristas y atractivos si cabe. En pantalla podremos ver hasta un total de ocho naves, a toda velocidad sin ningún tipo de parón y realizando todas acciones diferentes. Estas poseen tres tipos de camara: exterior, interior y desde la cabina, las tres muy jugables y conseguidas.

En lo que respecta a los circuitos optimizados de capítulos anteriores, se han visto mejorados en resolución, colorido y detalles. Incluso a algunos, se les ha modificado el trayecto para así tomar mas variedad en cuanto a recorrido.

Por último, comentaremos la intro, ya que a pesar que no es tan espectacular como la de 2097, consigue crear expectación para verla. Es original, y sobretodo, muy bien echa.

Aquí nos llega otro de los puntos calientes del juego. Posee una de las mejores bandas sonoras que se han escuchado. En su creación se encuentran mitos de la música electrónica como DJ SASHA, CHEMICAL BROTHERS, ORBITAL, UNDERWORLD, PROPELLEHEADS, PAUL VAN DICK y MKL.

En total 13 serán las canciones remezcladas por estos grupos. Debido a la enorme calidad de estas, los productores han optado por la posibilidad de ser escuchadas en cualquier equipo de musica. Sin duda un elemento imprescindible y que sirve de acompañamiento ideal para el tipo de ambientación y acción frenética. Un sobresaliente en este aspecto.

Y en los FX, van por el mismo camino. Explosiones, choques, ruidos de motor, el cambio de consonancia al entrar en un túnel... todo es magistral.

JUGABILIDAD:

Pero lo mas trabajado ha sido el aspecto del control de las naves. Absolutamente todas están perfectamente equilibradas, no se van en las curvas, e mueven suavemente y poseen una estabilidad y física muy buena.

El poder utilizar el control analógico facilita mucho las cosas a la hora de enfrentarnos a curvas cerradísimas. La opción para dos jugadores a pantalla partida es magnífica, pues el engine apenas se resiente y todo fluye a una velocidad cercana a la de un jugador.