Tortugas A La Carrera

Las Tortugas Ninja, una franquicia muy querida en los noventa que nos regaló geniales títulos beat 'em up en consolas de 16 bits y salones arcade, vuelve a la actualidad con un título de acción para nuestros iPhone, iPad e iPod touch. Y lo hace como endless runner, un género muy popular que empieza a ofrecer serios síntomas de fatiga; tanto es así que muchas son las sagas que se apuntan al carro ofreciendo resultados más que discutibles. ¿Será también el caso de Tortugas A La Carrera? Leonardo, Donatello, Rafael y Michelangelo se pasan al formato táctil de la mano de Nickelodeon, en un trepidante juego de acción en el que deberemos eliminar a un buen puñado de enemigos pertenecientes al Clan del Pie para liberar a la ciudad de Nueva York de un absoluto caos. Veamos en nuestro análisis si mantiene el nivel de los títulos de antaño de las fabulosas Tortugas Ninja.

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Estamos ante el enésimo side-scroller en el que debemos esquivar obstáculos ‒como minas, abismos o muros‒ y combatir enemigos ‒de una manera bastante superficial‒ como los ninjas del Clan del Pie, esbirros de Baxter Stockman o peligrosos robots, con el objetivo de parar el avance de nuestra Tortuga Ninja favorita. En la parte superior de la pantalla se sitúa una barra de energía que iremos llenando mientras recogemos orbes verdes; si dicha barra se vacía, la partida llega a su fin. Y si caemos por uno de los numerosos vacíos entre los tejados de los edificios ‒algo que ocurrirá bastante a menudo sin mucho que podamos hacer‒ de nuevo terminará nuestra carrera. Eso sí, si logramos llenarla del todo, entraremos en el modo Turtle Time que nos permitirá participar en vistosos QTE contra nuestros enemigos y que nos otorgarán valiosas monedas doradas.

Dichas monedas servirán para adquirir power-ups, nuevas armas y trajes, como armaduras cibernéticas y de camuflaje y artefactos como el Laserbot o el Turtle Saver, elementos que nos otorgarán valiosas ventajas en nuestras futuras partidas; además, al final de cada carrera ‒que no durarán más de un minuto o dos‒ podremos participar en la Ruleta de la Pizza, en la que podremos ganar multiplicadores y otras pequeñas ventajas. El control es muy sencillo ‒puesto que saltaremos y atacaremos con sólo tocar la pantalla en el momento adecuado‒ aunque el resultado no es del todo gratificante. Y es que moriremos demasiado a menudo sin mucho que podamos hacer, ya que la cámara no nos dejará ver lo que nos espera entre salto y salto, algo que llega a ser tan desesperante como frustrante. 

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Por otro lado, su presentación audiovisual no está muy cuidada, con modelados muy sencillos, efectos poco trabajados y escenarios algo vacíos; los fondos urbanos sí tienen cierto encanto. Aunque su mayor problema es el uso abusivo de los siempre controvertidos micro-pagos, puesto que deberemos pasar por caja sí o sí para desbloquear nuevos personajes a precios desorbitados; tanto es así, que en cada partida ganaremos unos pocos cientos de monedas mientras que los precios de los desbloqueables empiezan en 3.600 por Tortuga, con todo tipo de extras hasta unos desproporcionados 28.500, una locura. Y es que el propio desarrollo del juego no invita a pasar horas y horas para un mínimo de progreso, ofreciendo un icono grande y llamativo que nos recordará, una y otra vez, que podemos pasar por la tienda para adquirir packs de monedas. Y todo por 1,79 euros, eso sí, totalmente localizado a nuestro idioma.