La más portátil Lara que nunca hayas manejado

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Tomb Raider es una franquicia con sus buenos añitos. Acusada de plagiarse a sí misma y de sacar juegos demasiado parecidos, ahora vienen nuevos tiempos para la arqueóloga. Así, antes de que llegue la impresionante versión de PS2, todos los usuarios de GBA pueden disfrutar de esta vuelta a sus orígenes.

Lo primero que hay que decir de este nuevo Tomb Raider, es que quienes busquen innovación ya se pueden ir olvidando, porque los tiros (nunca mejor dicho) no van por ahí. Tomb Raider: The Prophecy es un juego que intenta devolver la saga a sus comienzos, a su primera entrega, la que deslumbró a usuarios de Saturn, Playstation y PC.

Por aquel entonces, Tomb Raider era una novedad. Sus puzzles, sus niveles, y sobre todo, su protagonista, hacían que todo el mundo cayera enganchado ante el televisor (o monitor) hasta conseguir terminar la historia de la arqueóloga. ¿Qué tenía aquel juego que lo hacía tan especial?... la verdad es que sería difícil encontrar un algo concreto, aunque lo principal era la innovadora idea que le daba lugar.

Evidentemente ahora esa idea está un poco usada (un poco bastante), pero si se cogen todos los buenos elementos que suponían aquel título, y se meten en una Game Boy Advance, sin duda saldría este The Prophecy. Muchos puzzles, muchos enemigos, muchos objetos... y sobre todo muchas tumbas para descubrir hacen que este juego tenga una gran parte del espíritu que hizo grande la primera entrega de las aventuras de Lara Croft.

 g r á f i c o s

Lo primero que se aprecia antes incluso de empezar a jugar es el aspecto gráfico con que se ha dotado a este título. Como los programadores no han visto posible realizar un Tomb Raider totalmente en 3D, lo han reducido un poco y lo han adaptado a la consola que lo tiene que mover. De este modo, los fondos están pre-renderizados, mientras que los objetos móviles, desde Lara hasta los enemigos han sido creados en 3D.

Esto se traduce en dos puntos: el primero, que los fondos han quedado muy bonitos, muy trabajados y llenos de detalles. El segundo punto, es que los personajes, tanto protagonista como enemigos, se mueven de una manera muy suave y fluida. Incluso se ha dotado de efectos de sombras a los mismos para que parezcan más reales, y la verdad es que el resultado es muy bueno.

Puede que el parecido con la mencionada primera entrega esté un poco limitado, aunque será después en la jugabilidad donde más similitudes aparezcan. En cuanto al de esta entrega, hay que considerar que teniendo en cuenta las capacidades de la consola, el trabajo realizado es magnífico, optando por una perspectiva superior, muy similar a la que suele usarse para los RPG, pero que en este juego también queda estupenda.

Quizás, si hubiera que buscarle algún pero a este apartado, se le podría achacar que los gráficos de cada nivel son un poco repetitivos (al igual que sucede en los juegos de rol), pero al estar uno concentrado en la resolución de los continuos puzzles que van apareciendo, no es un defecto que se deje notar.

 s o n i d o

El apartado sonoro se centra prácticamente en los efectos de sonido, dejando la banda sonora a un lado, del mismo modo que sucedía en la primera parte. De todos modos, este apartado está muy bien trabajado, habiendo sonidos para representar todas las acciones que se produzcan en la pantalla.

Por supuesto, se podrán escuchar los pasos de Lara, sus saltos y el sonido de sus armas (y sus gritos, que no podían faltar). También los sonidos que produzcan los enemigos estarán presentes, desde los ladridos de los lobos, o los disparos enemigos. Por último, también se puede escuchar sonidos ambientales, como el viento, agua o la maquinaria que vaya apareciendo.

 j u g a b i l i d a d

La diversión que se puede encontrar en este cartucho es muy similar a la vivida en el primer Tomb Raider. Y muchos son los motivos que llevan a esta conclusión. La estructura de los niveles, los numerosos puzzles que aparecen constantemente, las habilidades de Lara para salvar los obstáculos que van apareciendo. Todos los elementos que aparecen por aquí recuerdan en gran medida al juego original, a pesar de que la perspectiva no sea la misma.

El control de Lara no es el mismo que se pudo ver entonces, pero sí es bastante parecido. La principal diferencia está en que al cambiar la perspectiva, se cambia también el manejo de la heroína. Ahora, ella se moverá en la dirección que se pulse en la cruceta, de la misma manera que se manejaría a un personaje de un juego de rol. Con A se salta y con B se accionan los objetos, palancas y demás. Por otro lado, con L se realiza un sprint (con lo que se puede saltar más lejos) y con R se enfunda o desenfunda el arma seleccionada.

Cuando el arma seleccionada se desenfunda, se dispara con el botón B, con lo que las combinaciones de botones son bastante cómodas. Cuando Lara tiene el arma en la mano y aparece algún enemigo, cambia la manera de manejarla. Continuará desplazándose hacia la dirección que se pulse en la cruceta, pero mirará automáticamente al enemigo que tenga más cerca, apuntándole, por lo que únicamente habrá que disparar para hacer blanco.

Lo demás sigue prácticamente igual: Lara puede saltar, trepar, subir o bajar obstáculos, desplazarse colgada, coger objetos, usarlos en otros lugares para desbloquear caminos... lo clásico que puede verse en cualquier Tomb Raider. Y a partir de aquí, todos saben lo que queda: puzzles, enemigos, más puzzles y más enemigos. Todo ello aderezado con la magia Tomb Raider y comprimido en un cartucho portátil.

 c o n c l u s i ó n

Al final, todo esto deja una buena impresión, pero con 2 lecturas. Quienes quieran un buen Tomb Raider, divertido y clásico, éste es el juego que no deben dejar escapar. Pero quienes estén algo cansados de los mismos juegos de la señorita Lara, pues aquí sólo van a encontrar más de lo mismo. Por ello, este juego es a la vez muy recomendable, y poco recomendable, dependiendo de cada uno en particular. Lo único que se puede sacar en claro en cualquier caso, es que este Tomb Raider tiene la suficiente calidad como para ser una buena opción. A partir de ahí, el resto ya son opiniones personales.

 l o   m e j o r

 l o   p e o r