Time Stalkers

DLos juegos de rol no han abundado típicamente en ningún soporte de Sega. Sólo hay que recordar que la consolas de la compañía nipona con mayor número de títulos, la Megadrive, no contaba que digamos con muchos representantes de este género, aunque los que había ofrecían una calidad fuera de toda duda. A pesar de no ser el primer rpg para la Dreamcast ("Evolution" tiene ese honor), los usuarios nos quedemos con ganas de un título con más calidad. Por eso, y por la enorme calidad que atesoraba su primera parte, muchos éramos los que estábamos impacientes por probar este "Timestalkers".

El protagonista de la historia es Sword, el cuál tiene la habilidad de viajar en el tiempo. Toda la aventura transcurre en un mismo continente, en el cuál, extrañamente, sólo hay un pueblo ?¿. El resto de los personajes principales son la maga Marlin, Lyle, que es el elfo que ya aparecía en "Landstalkers", un león llamado Rio y una mascota de madera llamada Marion. Además podremos reclutar a engendros y hacer que se unan a nuestra causa, previo entrenamiento al más estilo Chocobo o Pokémon ¿Y cuál será la misión de tan completa y variopinta pandilla de guerreros? Vagar por su confundido mundo, una tierra en la que los enigmas y misterios abundan en cada esquina, y en la que tras cada puerta se esconde un problema que solamente unos héroes como nosotros podremos resolver. ¿Os gusta el plan?

El entorno gráfico recuerda al presente en las dos últimas aventuras de Link, "Ocarina of time" y "Majora's mask", con escenarios 3d enormes, plagados de un montón de lugares a dónde ir. Sin duda la resolución gráfica empleada en este "Timestalkers" es superior a la de ambos títulos de Nintendo, pero el resultado final en este apartado es algo inferior por lo mal que se lo han montado los programadores a la hora de solucionar la siempre complicada papeleta de la interacción personajes-escenarios. La calidad de éstos, aunque notable, contrasta con el patético diseño con el que se presentan los protagonistas. Eso sí, las caras que acompañan los diálogos escritos(a decir verdad es lo único que les hace compañía, porque las voces brillan por su ausencia) presentan un look mangaka muy conseguido.

Una de las principales diferencias con la eterna referencia del género, el genial Zelda, es su sistema de combates. Cual Final Fantasy aquí las contiendas se resuelven mediante el socorrido sistema de lucha por turnos. Si bien es cierto que en la saga de Square es todo un acierto, dada la espectacularidad de las magias y el gran abanico de técnicas a utilizar, aquí lo único que se consigue es ralentizar la acción y conseguir que más de uno se desespere ante los continuos combates en los que lo único que está en juego es un puñado de puntos de experiencia.

Y es que resulta poco menos que exasperante entrar en algunas contiendas que no tienen más historia que atacar hasta liquidar al adversario, por mucho que el presidente de Climax, Hiroshi Naito, se empeñe en decir que "El aspecto estratégico de este juego ha sido muy cuidado. Hay hechizos y armas que solamente serán útiles para ciertas ocasiones", lo cuál, en mi opinión, no hace más que complicar el asunto. Porque de lo que se trata es de disfrutar, ¿o no?

Pero bueno, para compensar un poco esto los combates no serán aleatorios como en "Parasite Eve" y cia. sino que al entrar en una habitación veremos a los enemigos y podremos esquivar a los malos de turno si así lo deseamos. El problema es que en ocasiones deberemos luchar obligatoriamente y, claro, los adversarios ineludibles suelen ser los más fuertes. Pero para conseguir ganarles hay que aumentar la experiencia, por lo que deberemos liquidar a los de menor envergadura... un pez que se muerde la cola ;(.

Pero toda moneda tiene dos caras, por muy devaluada que ésta esté. Hay cosas que tienen bastante mérito, como los recorridos que configuran las mazmorras o el útil mapa que nos sirve de ayuda, el perfecto ejemplo de que las transparencias sirven para algo más que para engrosar la larga lista de efectos gráficos que acompaña al informe de especificaciones técnicas sirve de presentación para una consola.

Contrastes en un apartado que podía haber catapultado al éxito a este título, pero que ha acabado condenándolo al fracaso. Un rpg no es que tenga que tener un apartado técnico súper virguero, pero debe saber mantener el tipo, y más siendo un juego de una consola con tantas posibilidades como esta 128 bits. Bastante infantiles.

  m  ú  s  i  c  a

A pesar de que cumple su papel, no puede evitar hacerse repetitiva. Una lástima, porque algunas de las musiquillas que pueblan las mazmorras consiguen crear un gran ambiente... una pena que sean las únicas, por lo que se pierden en la mediocridad general. Floja.

  s  o  n  i  d  o   f  x

No hay voces. Por increíble que parezca, en este GD no encontraremos más fx que los quejidos de los monstruos y de los personajes, los cuáles, la verdad sea dicha, no son ningún prodigio de la técnica. Bastante por debajo del apartado gráfico.

  j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d

Este tipo de títulos siempre son entretenidos, más que nada porque duran lo suyo. Ahora bien, debemos encontrar algún aliciente que nos impulse a seguir jugando, porque sino completar la aventura, una tarea que nos ocupará unas treinta y pico horas, se convertirá en una odisea bastante aburrida. Sin embargo, hay un detalle que consigue hacer que este apartado se salve del naufragio casi general: el adiestramiento de los monstruos mediante nuestra visual memory. Al más estilo entrenador Pokémon, capturaremos a diferentes criaturas que posteriormente podremos utilizar para enfrentarnos a los numerosos enemigos. Además, el número de sub-juegos diferentes que podremos cargar en nuestra unidad de memoria se eleva a 15.

  c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n

El problema no es que el juego sea especialmente malo, sino que no es bueno. A pesar de algunos buenos detalles como la trabajada historia, el background de los personajes y el uso tan completo que se hace de la visual memory, ningún jugón que se precie quedará contento una vez suelte el controller de nuestra querida 128 bits. Una lástima, porque si se hubiera conseguido un juego de la calidad de, por ejemplo, "Crazy Taxy" o incluso "Virtua Tennis", las ventas de la Dreamcast habrían subido como la espuma... aparte del hecho que ya me encuentro un poco raro jugando a la SNES y al "A link to the past" :). Y es que ¿porqué no hay todavía un buen rpg para mi 128 bits? :(