The Wolf Among Us, Ep 1

El año pasado, Telltale cerró con brillantez uno de los juegos más comentados de los últimos tiempos. El estudio, fundado por varios ex-LucasArts en el 2004, se creó bajo la idea de que la aventura gráfica tenía un futuro que sus antiguos jefes. Para desarrollar esa idea y minimizar riesgos, el estudio adoptó desde sus comienzos una estructura episódica, bajo la cual se lanzaron a dar nueva vida a algunos nombres clásicos de su anterior casa: Monkey Island o Sam & Max, que combinaron con otras iniciativas como aventuras bajo licencia como la de Regreso al Futuro o el fracaso de Jurassic Park. Entre altos y bajos, con creaciones mejores y peores, el estudio llegó a The Walking Dead, haciéndose con la licencia de los cómics para dar vida a una aventura única y propia, una historia interactiva original con dos protagonistas luchando por sobrevivir en un mundo de pesadilla.

Para conseguir su mayor éxito, un título capaz de ganar premios de "Mejor Juego de Año" -en los VGA Awards- a juegos como Halo 4, sus responsables decidieron destruir parte de su propia identidad para crear algo nuevo. Siendo especialistas en el género, sus responsables optaron por eliminar casi por completo la complejidad de los puzles, poniendo todos los esfuerzos y el interés en la narrativa, en presentar al jugador un argumento creíble en el que era constantemente obligado a tomar decisiones terribles y cruciales en cada episodio. Dichas decisiones no sólo marcaban elementos clave como quién moría o quién vivía, también forjaban la historia y la ponían en un cauce u otro, a la vez que alteraba la forma en la que el resto de los supervivientes veían al protagonista. El tremendo ritmo de la narrativa, una serie de personajes memorable, una gran historia ejecutada a la perfección y la adrenalina pura de tener segundos para tomar decisiones claves, conformaron una experiencia imprescindible que ha puesto a Telltale en un nuevo lugar en la industria.

Dejando al margen 400 Days, el "puente" que conducirá a la 2ª temporada de The Walking Dead, The Wolf Among Us es el primer trabajo de Telltale después de su gran éxito, lo que supone un considerable extra de presión sobre el grupo. Además, el potencial del nuevo trabajo es grande, utilizando como base otro cómic serio y rompedor como es el Fables de Bill Willingham para crear una nueva historia interactiva, con un universo fascinante lleno de posibilidades. “¿Estará a la altura?”, esa ha sido la pregunta de los aficionados desde hace meses, desde que se anunciara el proyecto y aparecieran los primeros tráilers. Ahora, con el primer episodio "en el aire" por así decirlo, la respuesta parece clara: un rotundo sí.

Para los que no conozcan Fables, un cómic de culto con numerosos premios dentro de la prestigiosa marca Vertigo de DC, se trata de una singular historia en la que los personajes de leyendas y cuentos han huidos de sus ancestrales hogares, escapando de un tirano conocido como El Adversario. Forzados entre la esclavitud y el exilio, personajes como Blancanieves, Barba Azul, la Bella y la Bestia y otros protagonistas de cuentos clásicos se encuentran ahora en el mundo mortal, formando una cerrada comunidad en Nueva York que trata de sobrevivir a los sinsabores de la vida de los "mundanos" como conocen a la gente corriente. No es una situación nada fácil, con príncipes y princesas acostumbrados a sus castillos viviendo en miserables casas de alquiler sin recursos para costearse algo mejor, con hombres-bestia que necesitan caros conjuros de Glamour para mantener apariencia humana y con una gran cantidad de tensiones internas que marcan la vida de estas figuras. Ser un Fable tiene por otro lado su lado positivo: "disfrutan" de inmortalidad parcial, no envejecen y se puede recuperar de heridas que matarían a un ser humano normal, además de tener ciertos atributos sobrehumanos según el personaje en cuestión.

Al contrario que en The Walking Dead, aquí controlamos un personaje protagonista y bien conocido de los cómics: Bigby Wolf, más conocido como Big Bad Wolf, el gran lobo feroz de cuentos como Caperucita Roja o Los Tres Cerditos. En el exilio, las fábulas exiliadas llegaron a un pacto por el que se perdonaban pasadas disputas. Bigby era el amo y señor del gran bosque negro, una fuerza de la naturaleza capaz de devorar a ejércitos enteros, pero cuando decidió exiliarse, acosado por los intentos del Imperio de cazarle, los líderes decidieron darle un nuevo papel en esta nueva realidad: el de sheriff, garante del orden, responsable directo de procurar mantener las leyes propias y de mantener a su gente fuera de la atención de los humanos. La elección estaba cargada de lógica, por un lado Bigby cuenta con unos instintos sobrenaturales y unos sentidos tan afinados que le permiten ser un detective sin igual. Por otra parte, todos temen al “gran lobo feroz” a fin de cuentas, y aunque de apariencia humana, Bigby puede volver a su estado feral cuando se altera, algo que nadie quiere. Ser temido es útil en esa posición, aunque también tiene sus problemas.

Este elemento marca uno de los elementos más interesantes y abiertos a debate dentro de este juego. En The Walking Dead, Lee y Clementine eran personajes nuevos con los que Telltale podía hacer lo que quisiera, sin miedo a interponerse en la continuidad de los cómics. En cambio aquí encarnamos a varios de los protagonistas principales de los cómics, en una aventura que está enmarcada antes de los primeros eventos de la serie. Eso plantea una serie de cuestiones, ¿puede el estudio hacer realmente lo que quiera con personajes de conocida progresión como Bigby o Blancanieves?, ¿pueden los aficionados del cómic disfrutar menos controlando a un personaje cuyo futuro conocen bien?, ¿o es, sin embargo, más interesante encarnar a un personaje popular y conocido? Con todo, y viendo el primer episodio, parece que Telltale está poco preocupada por este aspecto. Es más, el estudio hace un gran trabajo jugando con las expectativas de los jugadores que están familiarizados con la serie original, ofreciéndoles guiños y circunstancias chocantes para sacarles fuera de su zona de conocimiento. En cuanto al otro grupo, aquellos que no conocen el cómic, este primer episodio está muy bien diseñado para explicar de forma clara y sencilla los fundamentos esenciales de este mundo -ofreciendo además un sumario de personajes que van apareciendo para aquellos que quieran profundizar un poco-.

Para aquellos que vienen de The Walking Dead, el planteamiento es muy similar. La historia se va desarrollando en distintos escenarios limitados y en una progresión completamente lineal. En algunos momentos nuestra misión será investigar en los entornos, encontrar objetos o pruebas que sean relevantes, en otros momentos conversaremos con personajes, con más o menos tiempo para decidir nuestras respuestas dependiendo de lo difícil de la situación, y por último también tendremos momentos de acción, desarrollados a base de QTE sencillos como fijar el cursor en un punto adecuado o pulsar el botón que se nos pide. Ambos juegos son más novelas visuales que otra cosa, así que si lo que se espera son puzles complejos, o mecánicas de acción interesante, no lo van a encontrar aquí. La clave es la historia y nuestras decisiones, lo demás está de apoyo, para aumentar el dramatismo y ofrecer variedad.

Sin entrar en detalles sobre la historia en particular, que no serían bienvenidos por parte del lector dada la naturaleza del juego, sí podemos destacar la ejecución de la misma. Los personajes están muy bien definidos y caracterizados, empezando por el propio Bigby, dándonos suficientes opciones como para fijar nuestro estilo de hacer las cosas dentro de una personalidad marcada como la suya. La trama es pura novela negra, una sombría historia de detectives imbuida en el elemento sobrenatural de Fables, en una constante mezcla entre realismo y fantasía que resulta fresco e intrigante en todo momento. Este primer episodio no es tan vertiginoso como el primero de The Walking Dead, pero no está escaso de emoción ni de impactantes golpes que mantienen nuestro interés en lo más alto y nos harán larga la espera hasta el segundo episodio.

Siguiendo con la línea de aciertos, hay que mencionar que Telltale se ha superado en el departamento audiovisual. El estilo elegido con The Walking Dead era muy bueno, pero en The Wolf Among Us es realmente impactante, con un estilo gráfico muy bien conseguido, una gran ambientación, fantástico uso de color y una soberbia caracterización de personajes, muy bien animados. Es un estilo distinto al de los cómics, pero muy efectivo, con mucho énfasis en los personajes y en sus expresiones, un aspecto importante para un título tan centrado en sus diálogos. Además, la música es fantástica, empezando por la melodía de la pantalla inicial, una melodía mínima pero cargada de misterio y que refleja ese ambiente a película de detectives urbanos desde el primer momento. Las voces (en inglés) son muy apropiadas y demuestran un amplio trabajo de los actores y del director de doblaje, un paso necesario para que la historia gane ese extra de tensión y humanidad que necesita para brillar.