The Witcher III: Hearts of Stone

Siempre a la hora de encarar una expansión, especialmente de un juego tan analizado, revisado, discutido y alabado como The Witcher, surge la cuestión de qué decir sobre ella. ¿Qué busca el aficionado en una expansión exactamente? Han habido muchas en la historia del videojuego, no es precisamente un fenómeno nuevo, algunas son capaces de extender la experiencia original, dar respuesta a preguntas inconclusas que no tienen que esperar a una secuela para ser resueltas, o incluso alterar signíficamente lo ofrecido para ofrecer una nueva experiencia dentro de lo que permite el concepto de expansión. Hay otra categoría en la que una expansión es básicamente un nuevo juego dentro de otro, pero suele estar reservado para MMOs o títulos online -como hemos visto hace poco con Destiny-.

Entre todas estas opciones y posibilidades, la de “extender la experiencial” suele ser la más recurrida y esperable. Si has disfrutado algo, lo normal es querer más y una expansión es una buena forma de ofrecerlo sin la necesidad de crear un nuevo título -que en el caso de The Witcher, tardaremos muchos años en ver- Ahora bien, ¿cómo se juzga exactamente una expansión? a fin de cuentas si el contenido original es excelente, hay pocos motivos para que lo añadido no lo sea también. Sin embargo, hay factores que pueden ser considerados: ¿añade lo suficiente? ¿lo que añade es relleno o algo realmente sustancial? ¿hay una buena relación calidad/duración/precio?ç

Los hechos: Hearts of Stone es una de las dos expansiones anunciadas para The Witcher 3 y la primera expansión “tradicional” de la saga. Requiere el juego principal y se integra en la parte final de la campaña, alrededor del nivel 30, como una burbuja de contenido nuevo, integrado en el mundo como un arco más pero independiente en sí mismo. De hecho, puede ser jugado directamente desde cero, con un modo especial que elimina la campaña y pone al protagonista en el nivel adecuado para comenzar a jugar el contenido. Es también la expansión menos ambiciosa de las dos planeada, ya que no añade nuevo territorio al mapa -la segunda sí lo hará- limitándose a añadir algunas localizaciones específicas dentro de lugares ya establecidos como Oxenfurt. Eso no quita para que sea un nuevo arco denso, cuidado y cargado tanto de contenido jugable como narrativo.

De hecho, se nota que al poder centrar más tiempo en un arco concreto, se ha podido cuidar mucho el qué y el cómo se ofrece. Se nota, y es la mayor virtud de la expansión, que se ha tenido tiempo para cuidar los detalles y procurar que todas sus piezas se puedan ver como propias y originales, no como contenido reciclado. Se aprecia por ejemplo en aspectos como el combate: en el arranque de la expansión nos encontramos con tres combates únicos y diferentes con poca distancia entre ellos: una bestia nueva con habilidades propias, un mago oriental con conjuros que no habíamos visto nunca antes, y un duelo con otro personaje también dotado de movimientos y patrones fuera de lo común. Ese tipo de variedad en encuentros especiales es una de las cosas que echábamos en falta en la campaña, y el hecho de que Hearts of Stone empiece de esta manera parece ser una respuesta implícita a esa circunstancia, ofreciendo una serie de combates especiales e interesantes.

Sobre la historia, no queremos contar demasiado pero baste decir que es interesante, singular y algo extraña, en el buen sentido. Se nota que al separarla de las urgencias de la campaña principal, de esa sensación de persecución por la Wild Hunt, de Ciri y de otros elementos primordiales, se ha optado por hacer algo que combina lo extravagante, lo simpático, lo siniestro y lo serio. También es una aventura con mucho de sorprendente y un punto más sobrenatural de lo que estamos acostumbrados, no hasta el punto de desentonar en un mundo de magos, elfos y espíritus, pero sí que usa lo fantástico como un elemento importante para sostener mucho de lo que sucede. También aprovecha para jugar un poco con la propia personalidad de geralt y la manera en la que es percibido, pero no entraremos en detalle para no arruinar la sorpresa, baste decir que tiene momentos muy entretenidos. Mención especial para el regreso de Shani, que aporta mucho a esta expansión y nos hace lamentar que haya quedado tan relegada desde la primera parte.