KCEN ha vuelto a sorprender con una fantástica adaptación de una película no tan fausta.

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La versión portátil de la épica entrega de Rick, contará además con el soporte del resto de sus compañeros; Evelyn y Jonathon. Para ello, cada uno ha sido ideado para desenvolverse en embrollos diversos. De esta forma, la mujer de la plantilla es la más equilibrada de los tres, Jonathon será capaz de coger todo tipo de bloques del suelo, y Rick, tiene una pistola suficiente como para amilanar a todos los enemigos que se les interponga por el camino.

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Si KCEN siguió la pauta de Pacman y Metal Gear en el Grinch, la Momia evoca en casi todos sus aspectos y dificultades al aclamado Castlevania, sin embargo, el cartucho de la división de Nagoya abandona látigos y acción, por calustrofóbicas estancias y puertas y pasajes infinitos... toda una muestra de imaginación.

En cuanto a los decorados, la dudosa impresión a la que nos somete Konami queda patente en planos sin profundidad, elementos que carecen de viveza, y lo que es peor, objetos a una escala de risa. Lo que desemboca a que no sea extraño ver como un simple libro es tres veces más grande que cualquiera de los protagonistas de la aventura.

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De todas formas, por la mecánica del juego, una resultado artificioso tampoco es que hubiera beneficiado en demasía el misticismo que desprende cada uno de los recovecos de The Mummy.

  m  ú  s  i  c  a

Fantástica Banda Sonora con algúna que otra reminiscéncia a clásicos de la casa nipona. Os vendrá a la cabeza más de una partitura de Castlevania, e incluso, del Grinch, especialmente por la forma y estilo de reproducción. Lo malo, es que de vez en cuando se escapan instrumentos estridentes sin ton ni son que no concuerdan para nada con el conjunto general.

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  s  o  n  i  d  o   f  x

Buena presencia de efectos como saltos, golpes, puertas, y algún que otro rebote para completar un labrado elenco que cumple de sobras su objetivo principal, pero que queda desfasado si tenemos en cuenta que en la portátil de 8 Bits circulan auténticas proezas del calibre de Cannon Fodder o Perfect Dark, incluyendo destellos sonoros dignos de una producción de mayor embergadura.

  j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d

El control sobre el trio cabezas de cartel es tan intuitivo como práctico. Se agradece que la respuesta de nuestro "ego" sea tan precisa y rápida, lo que permite mayor margen de error. Además, la minuscula pantalla sin scroll, aporta, por extraño que parezca, más libertat respecto a los pasos que vas a efectuar a posteriori; sirva de muestra el no tener que estar preocupado por donde y cuando vas a caer por temor a que te espere debajo de la pantalla un amasijo de púas que terminen definitivamente con la partida.

Más agradable aun, son la situación y capacidad que tienen los puzzles para romperte la cabeza. El hecho de ser un laberinto bidimensional, hace que el jugador deba estar continuamente estrucurando mentalmente como está dispuesto el escenario, para no tener que volver a parar al mismo callejón sin salida.

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Cuando lleves unos cuantos minutos jugando en la misma fase, viendo como poco a poco vas desmenuzando todos los entresijos que esconde el más escueto de los niveles, y como descubres y caes en la cuenta de que estás tomando el camino equivocado, es casi tan adictivo como exenuante. A la postre, el juego se hará corto, no porque sea fácil, sino por lo tremendamente jugable que llega a ser, y aun más, a los nostálgicos de los tiempos de NES que quieran revalorizar a Simon's Quest, una aventura que recuerda en muchos puntos al juego que nos atañe.

Es una lástima que no incluya posibilidad a dos jugadores a contrarreloj, seguro que hubiera reportado partidas trepidantemente caóticas.

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  c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n

KCEN ha vuelto a sorprender con una fantástica adaptación de una película no tan fausta. The Mummy confirma que Konami está exprimiendo sabiamente las licencias adquiridas el pasado més de Septiembre sobre las películas y juegos de Universal, por lo que a este paso, no sería de extrañar una prolongación de este contrato en favor de todos los usuarios consoleros. Una vez más, hay que quitarse el sombrero por el hecho de demostrar que un juego no va ligado ni es consequencia a un nivel técnico de aupa, y esto, siempre ha sido y será, uno de los puntos que hacen grande a un título: entretener por lo que es, y no por lo que se ve.

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