The Beatles: Rock Band
- Plataforma3608.5PS3
- GéneroSimulación
- DesarrolladorHarmonix
- Lanzamiento09/09/2009
- EditorElectronic Arts
Be the Walrus
Harmonix y MTV nos regalan algo más que un videojuego. Nos regalan un rendido homenaje a uno de los principales pilares de la música contemporánea, a uno de los mitos populares más conocidos, al grupo cuyas canciones, después de cuarenta años, siguen sonando como si hubiesen salido ayer.
Imaginemos a dos hipotéticos amigos (pongamos, por ejemplo, que él se llama Francisco y ella Pilar), conocidos de toda la vida. Él ha pasado de los dos prestigios en Call of Duty: Modern Warfare y sabe tocar y cantar (a la vez) todas las canciones de Rock Band en experto sin mirar a la pantalla. Ella en cambio es fan de los Beatles hasta el punto de saber lo que desayunaba Paul McCartney el día de su undécimo cumpleaños, pero si le preguntases qué es un pad te contestaría que es una almohada. Podría ocurrir perfectamente al contrario, pero por un momento borremos los prejuicios de género de nuestra mente. Pongamos, pues, que ambos quedan para tomar un café en la Plaza Mayor. Él le comentaría rápidamente que ha salido un juego de los Beatles, y a ella, como es lógico, se le harían los ojos chiribitas, pero primero preguntaría de qué va, si es caro y si sale John Lennon matando alienígenas. Poniéndonos en el lugar del hipotético muchacho, respondámosle, pues, a todas esas preguntas. Si estás familiarizado con el título o te llamas Francisco, por favor, pasa a la segunda página.
Probablemente todos conocemos Guitar Hero, ese invento en el que nos ponemos a tocar, guitarra de plástico mediante, temas de grupos famosos. El proceso funcionaba de la siguiente manera: durante la canción aparece una especie de mástil de guitarra en pantalla, del cual venían hacia nosotros círculos de colores que se correspondían con los del artefacto, y nosotros mientras debíamos "tocar" la guitarra sincronizando nuestras pulsaciones con lo que veíamos. Tremendamente difícil de explicar, pero muy intuitivo, divertido y con varios niveles de dificultad. Salieron dos, y luego la empresa que popularizó el concepto (Harmonix) se alió con MTV para crear Rock Band. Rock Band nos pasó de ser guitarrista a poder jugar a ser un grupo completo, como su propio nombre indica, añadiéndole bajo, batería y voz (muy al estilo SingStar), y transformado de esta forma la experiencia en el complemento perfecto para momentos etílicos y, de vez en cuando, tardes lluviosas de invierno.
Mientras tanto apareció por parte de Guitar Hero, ahora competencia de sus propios creadores, un juego dedicado a un único grupo. Éste fue Guitar Hero: Aerosmith, el cual nos demostró que el formato tenía un potencial de documental o de disco recopilatorio que no se había explotado hasta el momento. Así que en un movimiento tremendamente irónico, los chicos de Rock Band decidieron hacer algo parecido, pero no con un grupo cualquiera. Sería El Grupo, los Fab Four, los chicos de Liverpool. Los Beatles, vaya.
Sin embargo, The Beatles: Rock Band como concepto nació en 2006, por parte de tanto el presidente de MTV (Van Toffler) como del hijo del difunto guitarrista George Harrison, Dhani Harrison, quienes pensaron en un juego de los Beatles y vieron que las mejores manos donde podrían caer eran en las de los creadores de Guitar Hero, Harmonix, recientemente comprados por MTV tal y como os comentábamos. Así que se pusieron manos a la obra y convencieron a las otras partes implicadas, esto es, Yoko Ono, Ringo Starr y Sir Paul McCartney de la viabilidad del proyecto.
Tras varias demostraciones técnicas para contentar a Apple Corps (la multinacional propiedad de los miembros restantes de los Beatles), en 2008 Harmonix les enseñó a unos caricaturescos Beatles tocando en el Abbey Road la mítica 'Here Comes the Sun'. De repente, al poco de comenzar la canción abandonábamos el estudio para encontrarnos viendo a la formación en un prado de ambiente absolutamente psicodélico. Se llamó a este ensueño 'dreamscape'. Apple Corps quedó contenta, viendo en el juego una manera ideal de recorrer la carrera del grupo y mostrársela a las nuevas generaciones. El juego se anunció y, desde aquel momento, se convirtió en uno de los más esperados del género.
Lo que vemos en el juego final es, ni más ni menos, el apartado visual más cuidado en el género. Punto. Abandona ese concepto de 'acompañamiento gráfico' mientras tocamos para convertirse en un auténtico festival para los sentidos. Para el capture motion tuvieron que usar a bandas tributo, y eso se nota (más a comparación de su similar Guitar Hero: Metallica, un poco más auténtico' en ese sentido), pero lo compensa con creces el acabado de cada uno de los escenarios, de cada uno de los ángulos de cámara, de cada una de las vestimentas que los Beatles han ido llevando a lo largo de su trayectoria, de cada fan enfervorecido. Pero, sobre todo, lo que lo compensa con creces son los llamados 'dreamscapes', las ensoñaciones que tienen lugar durante veinte temas pertenecientes a su época en los estudios Abbey Road. Son auténticos videoclips, rendidos homenajes y objetos de nostalgia para cualquiera que conozca al grupo, lleno de guiños, referencias, y alguna que otra sorpresa que nos provocará una sonrisa.
Otro cantar son los temas elegidos, 45 en total que recorren toda la trayectoria del grupo. Una selección muy compensada, de la que sinceramente os destacaríamos algunas, tal y como tradicionalmente hacemos. Sin embargo, en el caso de los Beatles tenemos que hacer una excepción. Pocas canciones no serán conocidas por todos (probablemente las de la primera época, mucho más de rock n roll simple con ese toque pop que siempre tuvieron) y no pocas se han tenido que eliminar por efectos lúdicos, como las míticas baladas 'Yesterday' o 'Michelle'. Lógicamente no llueve a gusto de todos, pero gracias a que el proceso de remasterización digital de la discografía entera del grupo (y cuyo lanzamiento se produce el mismo día que este juego, el día 9 de septiembre) fue necesario para este desarrollo, es muy probable que veamos en el futuro todos los discos listos para descarga y disfrute. Pero por ahora, la lista, que nos despistamos:
Desde el primer día y durante un tiempo limitado tendremos en Xbox 360 la canción 'All You Need Is Love', cuyos beneficios se irán a la asociación Médicos Sin Fronteras, y el disco 'Abbey Road' íntegro (sin contar las canciones ya incluidas en el juego, claro). Y sí, 'The Medley' también.
Decíamos que íbamos pasando, entre videos y localizaciones, por las épocas del cuarteto como si de un interactivo pase de diapositivas se tratase. Esto podríamos hacerlo sin demasiadas diferencias a través del modo Partida Rápida, que nos permite tocar cualquier canción del tracklist en cualquier momento (de hecho, allíl cada miembro del grupo podrá activar el modo Sin Fallos, que hará que sea imposible que nos eliminen antes de completar un tema si sólo queremos pasar el rato). Si te estás preguntando entonces qué recompensa tiene el modo Historia te respondemos, pero primero debes saber cierto hecho fundamental en un juego de este estilo. Te explicamos. Cada componente del grupo, para no interferir a sus compañeros, puede elegir el nivel de dificultad de su instrumento. Esto significa que si el cantante suena como si le hubiesen pisado la cola a un gato, puede ponerse en modo fácil, tararear sobre la marcha y salir del paso durante una canción. Y esto significa que si el guitarrista se cree Joe Satriani, puede ponérselo en Experto y disfrutar con algunos de los retos que nos ofrece The Beatles: Rock Band. Luego volveremos sobre esto.
Durante el progreso de la canción podemos recolectar la llamada energía estrella' si hacemos bien ciertas secciones en las que las notas se iluminan de una manera especial. Se comprende rápido el concepto después de la primera partida. Eres muy bueno, se va llenando la barrita de energía estrella de tu instrumento, y cuando alcanza la mitad puedes activarla (en el caso del micro es gritando entre partes de la letra, en el de la guitarra es levantando el mástil, en el de la batería, nótese para seguidores de Rock Band que se han perdido las partes de improvisación, es tocar el pad verde cuando éste se ilumina) haciendo que puntúes mucho más. Activarla cuando acaban de eliminar a alguien por no dar ni una nota bien hace que éste vuelva al ruedo y el grupo entero se salve de tener que volver a empezar la canción. Si todos los miembros del grupo lo hacen a la vez, subirán los números más rápido que las acciones de Disney tras comprar a Marvel.
Termine como termine, al final del tema tienes una puntuación y una representación de vuestra/tú calidad como grupo/solista con forma de estrellas, de una hasta a cinco. Y aquí viene lo bueno: si consigues tres estrellas, una foto de los Beatles se te desbloquea, si consigues cinco estrellas, serán dos. Y aquí viene lo mejor: si consigues diez fotos de los Beatles, se desbloquea un video. Mucho del material mostrado en el juego es completamente exclusivo, cedido por Apple Corps para goce y disfrute de los fans de los Beatles, habiendo algunas curiosidades muy interesantes, como la rareza del 'The Beatles' Christmas Album', entre otras sorpesas. Quizás para los profanos en la materia sea una nimiez, pero para el fan estos extras valen su peso en oro. El Modo Historia nos recompensa con ellos si completamos las canciones como es debido. También nos recompensa, por cierto, dándonos pequeños 'retos' en cada escenario. Estos retos son, simplemente, completar todas las canciones de un escenario sin interrupciones. Un pequeño bonus para dar otra vuelta de tuerca a tu formación.
Aunque parezca mentira, hacer esto bien es complicado. Pero gracias al pie de micro (o si se compran los instrumentos por separado, un pie de micro es excesivamente asequible) podemos darle una vuelta de tuerca si no estamos contentos con la dificultad de nuestra guitarra o bajo y hacer coros con armonías e instrumento a la vez. O incluso ser el cantante principal y tocar a la vez. No hay posibilidad de contar con una segunda guitarra desgraciadamente, lo que evita que se pueda emular del todo a los Beatles, pero esto añade bastantes posibilidades para integrar hasta a 6 personas en la fiesta.
Respecto a la dificultad, ésta no se puede medir por su progresión en el modo principal porque, simple y llanamente, no es su objetivo. Podemos encontrarnos canciones difíciles al principio (aparece representada la dificultad de cada instrumento en el menú de selección de canción) o una extremadamente sencilla al final, pero todas tienen su particular atractivo que muestra la complejidad escondida detrás de la aparente simpleza en la discografía del grupo. Sobre todo en un instrumento que normalmente pasa desapercibido como es el bajo, con líneas que en ocasiones se hacen más divertidas que las de guitarra, y en otras nos piden a gritos que nos pongamos el pie de micro y nos sintamos Paul McCartney.
Aún así, lógicamente, aquellos que busquen un reto de verdad es posible que no lo encuentren aquí. Ahora, tampoco deben buscarlo: The Beatles: Rock Band está pensado como una experiencia retrospectiva dentro de la carrera de un grupo. El símil se encuentra en el típico libro/disco que te viene con fotos, un DVD de extras y varios CDs conteniendo los temas más significativos del grupo en cuestión, sólo que en este caso es interactivo. Encararlo como un reto de habilidad es simplemente ir en contra del objetivo del producto. Ni más, ni menos.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.