En el análisis del capítulo anterior comentábamos lo sorprendente de que Telltale eligiera un mundo como el de Borderlands para crear una de sus historias interactivas que tan bien están funcionando en los últimos tiempos. Y también cierta agradable sorpresa en que ese escenario funcionara tan bien con este tipo de juego pese a su naturaleza salvaje y anárquica. Buena parte de la culpa de ello la tenían los personajes principales: el ejecutivo de Hyperion, Rhys y la estafadora de Pandora, Fiona , bien acompañados por sus respectivos compañeros y otros personajes que van apareciendo -particularmente importante es la aparición de Jack el Guapo, que jugará un papel importante en la trama y que aporta al juego su peculiar carisma-. Son sus chispeantes diálogos, la tensión que hay entre ellos y sus dilemas morales lo que da vida al juego de Telltale . Gracias al hecho de que están narrando la historia en pasado y desde sus respectivos puntos de vista, la trama se permite toda clase de bromas y usos de la técnica del “narrador mentiroso” para aumentar el sentido cómico del juego. Sin embargo, este gusto por el humor no va reñido con la naturaleza hiper violenta y amoral de Pandora, de hecho nuestros dos personajes no son precisamente hermanitas de la caridad, aunque en función de nuestras decisiones pueden ser más o menos despiadados según nuestras preferencias. Ese contraste entre humor, amoralidad y violencia, aplicado a un juego fundamentalmente narrativo, es uno de los elementos singulares del juego.
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Al principio de este capítulo, el narrador suelta con retranca: “síiii, ha pasado bastante tiempo, todo el mundo lo sabe”. La frase se refiere al hecho de la gran cantidad de tiempo que ha pasado entre el primer capítulo y el segundo, lo que ha resultado un tanto desconcertante para los que quieren seguir los capítulos. La verdad es que esta inconsistencia con las fechas es uno de los puntos débiles de la estructura episódica que plantea Telltale. Al contrario que una serie de televisión , o juegos como el reciente Revelations 2, está claro que el estudio tiene que desarrollar contenido entre episodio y episodio, lo que es complicado de planificar. Pero de cara al usuario, es difícil justificar un calendario tan anárquic y la verdad es que sólo da nuevos argumentos a los muchos que prefieren esperar a que las “temporadas” estén completas (que además siempre permite conseguir algún tipo de rebaja). Ahora bien, dicho esto, se aprecia que el tiempo entre episodios ha sido bien aprovechado. Se aprecia una mayor variedad de escenarios y secuencias más complejas de las que solemos ver en los juegos de Telltale, además de un mayor grado de cuidado. Es cierto que en el tiempo que en el tiempo que han aparecido estos dos episodios a Telltale le ha dado tiempo a hacer tres capítulos de Juego de Tronos , pero se nota que este segundo episodio de Tales from the Borderlands está a otro nivel de producción. Es también buena noticia que se haya modulado la acción directa frente a lo visto en el anterior juego. Esa idea de que por ser un juego de Borderlands tenía que incluir mini-juegos y QTE de disparos podía sonar bien en papel, pero en realidad eran un mal recurso para este motor. En su lugar encontramos los habituales QTE de dirección y presionar repetidamente, puestos en justa medida para dar un poco de interés extra a los momentos de acción, pero de forma discreta.
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Lo realmente interesante, como siempre en los títulos de este estudio, son las decisiones, opciones de diálogo (y las consecuencias). Todavía no estamos en la parte del arco argumental donde se puedan apreciar plenamente esas consecuencias, pero algunas ya son visibles y otras se empiezan a intuir. La lealtad y la confianza entre el extraño grupo de estafadores va a ser puesta a prueba y de nosotros dependerá qué actitud queramos adoptar ante ellos. El hecho de que no se pueda decir que ninguno de ellos sea un santo ayuda a tener cierta libertad a la hora de elegir diálogos, ya que muchas veces no está claro cuál es la decisión “correcta” si es que hay alguna que se pueda considerar como tal. De hecho, incluso en aquellas en el primer episodio que sí podían parecer más “nobles”, vemos en el segundo episodio que pueden tener una doble cara, u ocultar una decepción.