Exín Castillos

Asaltos, sitios, defensas, puentes levadizos, fosos, aceite hirviendo… ¿qué aficionado a la estrategia no ha deseado alguna vez un juego en el que se pueda defender o atacar un castillo?.  Pues eso y mucho más es lo que ofrece Stronghold, un juego con un planteamiento un poco diferente a lo que estamos habituados a ver en la estrategia en tiempo real y con un montón de opciones que lo hacen ciertamente atractivo, pero también con algunos defectos que evitan que sea un juego excepcional.

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Stronghold nos lo venden como un simulador de castillos, allá ellos, de lo que  realmente se trata es de un juego de estrategia en el que podremos construir castillos, controlar sus recursos y defenderlo ante posibles ataques de los señores feudales rivales. Es una especie de Sim City Castillos con un poco de Age of Empires y algo de Majesty y aunque el resultado es bueno, con algunas mejoras sería una maravilla.

Stronghold es un juego ciertamente recomendable y seguro que os hará pasar momentos muy divertidos, especialmente en multijugador, pero que también nos lo hará pasar mal en muchas otras ocasiones debido a que algunas de sus misiones son realmente difíciles y a sus caóticos combates. No es frecuente ver algo original dentro de los juegos de estrategia y Stronghold lo es.

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Y tengo que comentar algo que es digno de elogio y es la perfecta adaptación al español de este juego. Ya no sólo el hecho que lo hayan traducido y doblado de manera correcta, si no que hasta han cambiado el mapa de la campaña por el mapa de España y es un buen ejemplo de cómo se deben hacer las cosas. Sólo por ello espero que tengan unas buenas ventas ya que servirá de referencia a otras compañías que quieran hacer lo mismo.

Audio / Vídeo

El apartado gráfico no es uno de los fuertes de este juego, pero tampoco es importante. Se puede decir que es clásico o típico, usando gráficos 2D en perspectiva isométrica como gran parte de los juegos de estrategia. Pero a pesar de que no son gran cosa tienen cierto encanto ya que tienen gran cantidad de detalles.

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Ya que se trata de un juego de castillos lo más importante es ver qué tal están representados y lo cierto es que están bastante bien. Tienen un montón de detalles y se puede decir que están representados todos los elementos externos de los castillos; torres, almenas, cornisas, torres del homenaje, garitas, puentes levadizos, fosos… todo lo que nos podríamos encontrar en un castillo de verdad.

Además no sólo hay castillos de piedra, también se representan fuertes de madera e incluso combinaciones de madera y piedra. Los castillos no son de una pieza, tendremos que ir construyéndolos por fascículos poniendo murallas, torres, puertas, etc., y también habrá que instalar en ellos edificios que permitan generar recursos, los cuales sí que son de una sola pieza y usan más bien una representación simbólica sin demasiado detalle. Estos edificios pueden ser estaciones de caza, serrerías, granjas, campos de cultivo, viviendas y son independientes de lo que es la representación del castillo.

Los castillos tienen que estar situados en algún sitio ya que construirlos en el aire no es algo recomendable. Se suelen situar en un terreno o escenario y la representación del mismo en el juego es sencilla pero correcta. Destacan dos aspectos; uno es el de los bosques, donde los árboles están dibujados con bastante detalle y otro es que esos árboles se mueven por el viento, algo que  no había visto en un juego 2D. Son escenarios muy elaborados en cuanto a la cantidad de elementos que lo forman se refiere pero en conjunto no se puede hablar de espectacularidad gráfica precisamente.

Sobre el terreno se mueven animales de todo tipo; hombres, osos, gacelas, conejos, águilas y está muy logrado el hecho de que parece que tienen vida propia ya que los osos se pelean con los lobos y cazan otros animales, los lobos también cazan, las gacelas huyen despavoridas y el hombre los caza a todos aunque para cazar un oso tienen que ir unos cuantos. Precisamente son los hombres los únicos que pueden manejar un castillo y sus instalaciones ya que el hecho de tener un pulgar enfrentado a los otros dedos les da cierta ventaja a la hora de manejar herramientas.

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Estos hombres, como el resto de los animales, tienen una representación bastante simple que los hace parecer monigotes. No esperéis grandes alardes gráficos con las unidades, su representación no es para que alucinemos con la cantidad de detalles que tienen si no para que sepamos que tipo de unidad o animal se trata, sin más. Me gusta mucho el efecto de cuando un fulano muere a flechazos, eso sí que está bien.

Los efectos de explosiones, daños y demás tampoco son ninguna maravilla y siguen la tónica general del juego; sencillez. Stronghold es uno de esos juegos que demuestran que para hacer algo divertido y diferente no son necesarios unos gráficos de última generación que se coma todos los recursos de nuestro ordenador. Unos buenos gráficos siempre son agradables, pero si las otras cosas que se ofrecen suplen la ausencia de pirotecnia espectacular, a mí por lo menos me importa más bien poco.

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El sonido viene marcado por el excelente doblaje al español, algo bastante inusual. Aunque es un doblaje un poco de dibujos animados, se nota el trabajo de unos buenos dobladores y estoy seguro de que es algo que agradecerán los usuarios de habla hispana. El resto de sonidos están bien, como en los gráficos no hay alardes técnicos importantes y pasan más bien desapercibidos. La música que acompaña a las misiones está bastante bien, con el aire medieval que tiene ambienta perfectamente y no molesta demasiado por ser machacona.

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Lo dicho, técnicamente Stronghold no es ninguna maravilla, es más bien discreto, pero las propias características del juego hacen que esto no tenga mayor importancia. Sólo si eres un fanático de las 3D y de los gráficos espectaculares mejor que busques otra cosa.

Guión

Stronghold está ambientado en la edad media europea, con sus abundantes castillos y los señores feudales que los dirigían oprimiendo a la población que vivía esclavizada en las tierras pertenecientes a los mismos. Afortunadamente representarás a un señor feudal y no a los campesinos y como tal tendrás que administrar los recursos de tu castillo y mantener contenta a la población para que quieran vivir en tus tierras y no pedir asilo a los señores feudales rivales.

Por supuesto no sólo tendrás que manejar todos los recursos del castillo y mejorarlo, si no que también deberás entablar batallas contra fuerzas invasoras bajo el mando de los señores feudales enemigos (La Rata es el más conocido) e incluso organizar asedios a sus castillos si conseguimos el ejército suficiente. Lo más destacable es que se puede jugar de varias maneras, una es la típica de la campaña militar en la que tendremos que combatir contra los señores rivales e ir ganando cada vez más prestigio y poder. Al principio de esta campaña los recursos son limitados y sólo podremos construir pequeños fuertes y a medida que vayamos avanzando podremos construir más y mejores castillos.

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Como suele pasar en los juegos de estrategia hay que hacerlo todo deprisa y corriendo porque el rival siempre hace todo infinitamente más rápido que tú y siempre te pilla en pelotas con las ropa tendida y las murallas a medio construir. Qué se le va a hacer, más que estrategia parece una carrera contrareloj, pero bueno, es lo que hay. Dentro de las opciones de combate podremos elegir jugar una sola misión de asedio en vez de una campaña completa.

Aquí dispondremos del ejército y la maquinaria suficiente para asediar a un rival o para defendernos de un asedio. No hay que construir nada, simplemente usar lo que ya tienes y no es una mala opción. A mí al menos me parece divertida y representa bastante bien lo que podría ser un asedio aunque con algunas cosas que no me gustan demasiado de las que ya hablaré en la sección de "jugabilidad". Y por último dentro de este modo de juego hay la opción de hacer una sola misión en la que se puede tanto construir tu castillo como pelear, es como si fuese una misión de la campaña.

Las otras opciones son más originales y son las opciones económicas en las que no hay combate, simplemente hacer que tu castillo prospere controlando los recursos necesarios para ello. En este modo no hay que estar pendientes de que te venga el típico pesado a atacar cuando ya estás a punto de acabar el castillo y entran por un agujero y te dan una paliza. Sólo hay que prosperar económicamente y por un lado está la campaña y por otro hacer sólo una misión. Estas misiones y las de la campaña suelen ser del tipo "consigue 500 piezas de oro antes de que pase una semana" y cosas por el estilo. Y la última opción de este sistema de juego es la de jugar gratis (mmm, esa traduccióooooon), que es estilo Sim City, no hay ningún objetivo ni límite de tiempo que te molesten durante la construcción de tu castillo.

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Las campañas van siguiendo un hilo argumental acompañadas por conversaciones entre los principales protagonistas. Están bastante bien y ayudan a ambientar el juego. Pero eso sí, algunas misiones son realmente difíciles, al menos para mí, aunque puede ser debido a mi torpeza y poca paciencia. Por si fuera poco, hay un editor que nos permitirá hacer los mapas que nos de la gana, tanto para las misiones individuales como para los mapas multijugador. Es una gran opción que los juegos vengan con un editor incorporado, algo que sin duda alargará la vida del mismo.

Multijugador

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El sistema de juego es sencillo y fácil de entender. Las unidades tienen vida propia y actúan por su cuenta pero en cualquier momento podemos darles las órdenes oportunas. Todo se controla con el ratón aunque hay atajos de teclado para controlar diversas acciones. El control con el ratón no es todo lo bueno que debiera ya que con muchas unidades es difícil y lento seleccionarlas. Bueno, no es que no sea bueno, es que es patético.

Para jugar hay que tener en cuenta una cosa fundamental, y es que los campesinos estarán en nuestro castillo si las condiciones son favorables para ellos y si no, se empezarán a marchar dejando la población por los suelos, incluso hasta llegar a 0. Para mantenerlos contentos hay que darles comida, alojamiento y no quemarlos con los impuestos (en la edad media no eran tan considerados), y deberemos cuidar nuestro prestigio, que hará que la población sea más leal. 

Hay una cosa rara y es que la población siempre estará cabreada si le pones impuestos aunque sean muy bajos. De esta manera resulta muy difícil conseguir oro ya que si se suben un poco los impuestos se piran; creo que debería ser más fácil encontrar un equilibrio. Las unidades no se "construyen", se reclutan y por eso es importante tener población porque si no, no tendríamos a quien reclutar.

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Así que si tenemos a la población contenta deberemos conseguir más recursos como comida, madera, piedra y oro para pagar a los soldados. El control de recursos está bastante bien,  hay puestos de caza en el que despellejan a los animales cazados, serrerías en las que procesan la madera, granjas, en donde se crían vacas que hasta pueden tener enfermedades, plantaciones de trigo, minas de hierro, canteras… también serán necesarios algunos edificios para poder tener determinadas cosas como combustible (brea) para las flechas de fuego.

Además los recursos nos permitirán construir e ir mejorando nuestro castillo al más puro estilo Sim City, con varios tipos de murallas, torres, puertas (que se pueden abrir y cerrar) y todos los elementos de los que constaba un castillo salvo por las trampas y los pasadizos secretos. El sistema de construcción de las murallas me parece un poco tosco, se queda como atascado a veces y es complicado hacerlo de una manera precisa. Se puede cambiar la orientación del mapa para facilitar un poco las cosas por si hay edificios o árboles tapando la zona por la que queremos construir las murallas. Se pueden desactivar los objetos para que no molesten demasiado ya que se pueden acumular muchas cosas en una zona pequeña.

Los asedios están francamente bien, hay unidades que manejan maquinaria de asedio, otras que usan escaleras para subirse a la muralla mientras los soldados que defienden las intentan tirar abajo, los soldados usan las palas para rellenar el foso, etc. Todo muy bonito pero que se va a la porra cuando ves a un grupo de piqueros derribando una muralla enorme de piedra con la punta de sus lanzas. Imaginaos la escena en la realidad, la risa que les iba a dar a los del castillo.

Esto es una concesión al juego que no me gusta nada y que desespera bastante en determinadas fases. Al menos hay abundante maquinaria de asedio, como catapultas, ballistas, arietes, trabuquetes o la opción de cavar túneles. Tampoco me gusta que no haya unas buenas opciones de diplomacia o de hacer alianzas con otros señores feudales, con lo que se impide el poder ofrecer dinero a un rival para que te ayude, ofrecer a una hija en matrimonio y hacer ese tipo de  intrigas tan frecuentes en la edad media.

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Otro aspecto negativo es que los combates se vuelven demasiado caóticos cuando hay muchas unidades, la selección de cada unidad se hace muy difícil o imposible y prácticamente se puede decir que seremos meros espectadores en las batallas. No hay demasiadas opciones de control y no hay manera de controlar formaciones, como por ejemplo poner dos filas de arqueros en paralelo para que unas disparen mientras las otras cargan.

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En definitiva se puede decir que es un juego divertido y con una idea relativamente original y que falla un poco en algunos aspectos como los combates o la falta de diplomacia, pero que aún así sigue siendo un juego bastante recomendable, en especial a los que les gusta el tema de los asaltos a castillos y batallas medievales..

Estrategia y trucos

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En este juego lo fundamental es manejar muy bien los recursos para poder construir rápidamente todos los edificios y mejoras de nuestro castillo. En la campaña de combate es fundamental ser rápido y en cuanto se pueda poner defensas al castillo porque los ataques serán inminentes. Si se quiere algo más pausado es mejor jugar la campaña económica. En los combates, como hacer algo durante ellos es casi imposible, lo mejor es prepararlos con la suficiente antelación colocando nuestras unidades en lugares estratégicos para defender el castillo. También hay que tener en cuenta que el enemigo puede tener unidades con armadura que son casi invulnerables a las flechas y habrá que atacarles de otra forma. Se tiene en cuenta la armadura de las unidades.

También es importante hacer murallas que protejan todos los edificios, incluidos los que sirven para recolectar recursos, así durante los asedios no nos quedaremos fácilmente sin comida. Y aprovechar la orografía del terreno a nuestro favor, construyendo si es posible en lugares altos y aprovechar los acantilados como si fuesen murallas. No os olvidéis de proteger al señor del castillo, si muere habremos perdido aunque nos queden tropecientos hombres. El jefe es el jefe.

Hay plagas que acaban con las vacas en las granjas y enfermedades que propagan los conejos. Para evitar esto construye boticas y pon casetas de leñadores cerca de los conejos. Los leñadores se los cargan y son los únicos que lo hacen. Paciencia, es lo principal en este juego. Sin paciencia lo tiraremos por la ventana en la segunda misión.

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Manual

Como el juego viene en caja DVD no se puede esperar mucho del manual, pero en contra de cierta tendencia actual, está impreso. Son 65 páginas en las que se informa de las opciones de juego y de las unidades, edificios y objetos que nos podremos encontrar en una partida. Es un manual correcto, con buena traducción pero que no explica ni tácticas ni da consejos. O sea, cumple pero nada más.

El juego es un CD y es necesario para poder jugar, sin que haya opción de hacer una instalación para multijugador, así que los que tengáis una red local en casa tendréis problemas. En el momento de escribir este análisis acababa de salir un parche que corrige algunos errores.

Comparándolo con…

Ciertamente es un juego que no se parece a ningún otro, como decía al principio es una mezcla de Age of Empires, Sim City y Majesty y que no puedo decir si es mejor o peor que alguno de ellos. Con el Age of Empires (el 2) se asemeja en  las batallas y en la recolección de recursos, pero en las batallas el control de las unidades en Age of Empires es mucho mejor mientras que los recursos en Stronghold son más originales.

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Con el Sim City se puede decir que se parece en el tema de la construcción y el que tengamos que hacer que la gente esté contenta y no se vaya, pero Sim City tiene muchas más opciones para conseguirlo; y con el Majesty se parece un poco en la ambientación, pero en Majesty las unidades se mueven solas y no podemos dirigirlas nosotros. De todas maneras Stronghold es inferior a todos ellos en cuanto al control de las unidades, salvo en Sim City que no hay unidades. Podía haber sido un juego excepcional pero se ha quedado en un buen juego sin más.

Lo mejor es la propia idea de poder dirigir un castillo y defenderlo de asedios con un montón de maquinaria tanto para asediar como para defenderse, es la idea en sí lo que está muy bien. Las opciones de juego también son buenas ya que nos permite poder estar pendientes del castillo sin estar además pendientes de los combates. El multijugador es muy divertido.

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