Star Wars: Jedi Power Battles

Es el primer juego de la factoría Lucas para esta plataforma. El primer juego basado en el universo Star Wars para la gran D de Sega. Por fin tenemos la posibilidad de emular a Anakin o a Sebulba (o a Gasgano o a Ben Cutromanos) en una de esas peligrosas carreras a casi 1.000 Km. por hora y sentir la vertiginosa sensación de que todo se mueve muy deprisa.

Esta es la mejor entrega, en cuanto a gráficos se refiere, y el poderío de la Dreamcast se muestra suficiente para manejarlo todo con soltura. Escenas de FMV introducen cada carrera y unos gráficos en alta resolución harán que nos sintamos partícipes de toda la emoción de las carreras de vainas.

Algunas de las secuencias de vídeo parecen escenas prerederizadas de la película, lo cierto es que es así, aunque también hay un montón de escenas de FMV que han sido creadas exclusivamente para el juego y que hacen su aparición en los momentos en los que nos se está compitiendo, como las presentaciones de los corredores, incluso de los personajes más "carismáticos" del planeta en el que se celebra la carrera y que se han acercado a ver la carrera. Y como no podía ser de otra manera veremos a Jabba the Hutt, con toda su grandiosa y "esbelta" figura.

El interior de los vehículos está reproducido a la exactitud de los modelos utilizados para la película, salvando las distancias, y el nivel de detalle es francamente supremo.

La sensación de velocidad es fenómena, una pequeña maravilla de a programación. Circuitos amplios con texturas muy imaginativas que pasan ante nuestros ojos a velocidad de vértigo para dotar al juego de una de las mejores sensaciones de velocidad que se hayan podido ver últimamente en el mundo del videojuego.

La variedad de mundos por los que debemos competir, cada uno de ellos con sus características climatológicas y geográficas así como el hecho de tener que correr carreras en pleno día, al atardecer o incluso de noche, hace que los efectos de luz sean otra de las pequeñas joyas del juego.

MÚSICA

¿Qué te vemos a contar de la banda sonora del juego qué tú ya no te estés imaginando?. Tomando como base la banda sonora de la película, y sobre todo su tema principal, se genera una colección de canciones que envuelven el juego para acabar de darle ese aroma de "Space Opera" que tanto nos gusta.

Es éste apartado uno de los más cuidados por los muchachos de LucasArts, y aunque lo tienen muy fácil para elaborar las melodías lo cierto es que no se han dejado levar por la vagancia y han realizado un buen trabajo (justo como le gusta al "tío" Lucas).

EFECTOS FX

Los efectos sonoros del juego están sacados directamente de la película, por lo que la calidad está asegurada. colisiones, explosiones, meteoritos, los motores a toda potencia, derrapajes, frenazos y un sinfín de efectos que se te puedan imaginar están reflejados en el juego pero teniendo en cuenta la zona en la que se produzcan. O sea, si es a cielo abierto, si es en un pasadizo entre montañas o en un túnel, etc.

JUGABILIDAD

Los vehículos que conduciremos en estas endiabladas carreras son las vainas (pods) que veíamos en la famosa secuencia de la película.

Cada una de estas vainas están propulsadas por dos o cuatro motores a reacción, controlados desde una pequeña cabina conectada a ellos por unos cables de más de 15 pies de longitud. Unos vehículos que tienen la capacidad de circular a 1000km por hora, mientras se suspenden algo más de un metro por encima del suelo. El peligro de estas carreras es evidente.

El juego nos permite meternos en la piel de Anakin Skywalker, o bien en la de Sebulba, Aldar Beedo, Mars Guo, Gasgano, o cualquier otro que pone el juego a nuestra disposición, en el muy competido campeonato galáctico con multitud de carreras. O, si lo preferimos, una carrera simple.

Cada corredor tiene su propia, y única en el universo, vaina de carreras, que se adapta a sus características, tanto físicas como "mentales". Diferentes en aspecto, tamaño, y otras características como velocidad punta, aceleración y facilidad de giro, por ejemplo. Pero con la salvedad de que tras cada carrera y según el premio obtenido (o el dinero que hayamos ido acumulando) podemos mejorar nuestras vainas en el "supermercado" de Watto, donde podemos comprar nuevas piezas que mejoren el rendimiento de nuestra vaina.

La sensación de velocidad que nos transmite el juego está muy lograda y es de agradecer a los programadores que hayan tenido en cuenta esta características del juego, ya que sin la sensación de velocidad y vértigo este juego no valdría para nada.

Aunque algunas veces puede llegar a parecer que la vaina se escapa de nuestro control, esto no es así, ya que el control del juego es bastante fácil de aprender (otra cosa será llegar a dominarlo). Y bastará con saber dosificar el turbo de una manera racional para no sobrecalentar los motores, ya para no usarlo en ciertas curvas que no son ni tan anchas ni tan pronunciadas como pensamos, aunque en otras curvas sí que lo podemos usar a discreción.

Las carreras tienen lugar en circuitos situados en los planetas del universo Star Wars, como Tatooine y su circuito de Mos Espa, en Tatooine, donde tiene lugar la clásica carrera Bonta Eve. También encontraremos el circuito de Mon Gazza, con su cielo rojo cubriendo cada rincón de la pista. El circuito helado de Ando Prime, y muchos más hasta llegar a correr en 25 circuitos, aunque muchos de ellos no son más que variaciones de los mismos. El mismo circuito de antes al que se le ha modificado el trazado sensiblemente. Al final habremos competido en 8 (ocho) planetas del universo Star Wars, cada uno de ellos con una representación sublime de su geografía y características climáticas.

Los circuitos tiene como principal diferencia entre ellos en longitud, lo que hará que en algunos recorrer en una vuelta el circuito apenas nos lleve 30 segundos, mientras que en otros tardaremos algo más de 2 minutos. Aún así los circuitos están trazados con pocos giros imposibles, algunas curvas de vértigo, obstáculos, trampas, así como sus propios peligros según el origen de cada planeta, como lagos de lava incandescente, lluvias de meteoros o los inefables moradores de las arenas.

Lo más destacado es que en los circuitos largos nos podemos encontrar con unas distancias enormes, muy adecuadas para la utilización de la hipervelocidad, aunque esto reste espectacularidad y "enfrentamientos" cara a cara con los rivales, puesto que si accedemos a la primera plaza de la carrera y controlamos un poco el circuito es posible que no veamos nuestros enemigos en toda la carrera. Bueno, si no vamos los primeros podemos ver a lo lejos unos números que nos indican por donde van los corredores que están delante de nosotros, es decir a lo lejos veremos un dos más o menos por donde va el segundo, un tres por donde va el tercero pero todo esto si la distancia que nos llevan no es del todo grande.

Como curiosidad decir que uno de los circuitos está situado en Ovo IV, una prisión-colonia minera. Aquí las vainas deben "negociar" las curvas y "chicanes" con una precisión milimétrica, mientras gigantescas rocas se mueven entre ellas. Pues bien en este circuito es donde más se nota el ácido humor de la pareja de comentaristas Beed/Fode Annodue, el extraño alienígena de dos cabezas que se encargará de introducir cada competición y de ir narrando el desarrollo de la misma.

Todavía nos preguntamos por qué si la versión de PC tenía la posibilidad de jugar hasta 8 (ocho) jugadores en red, en la versión de Dreamcast sólo podemos usar Internet para subir nuestros mejores tiempos y compararlos con los del resto de la galaxia.

Y lo peor de todo es que la opción multijugador se queda en una triste partida a dos jugadores que, lejos de fomentar tensiones y piques, lo único que consigue es dificultar la visión de los circuitos al partir la pantalla en dos, pero del tema de la emoción, nada de nada ya que en cuanto uno de los dos cobre un poco de ventaja, el perseguidor sudará de lo lindo para darle alcance. Evidentemente esta no es la idea de una partida multijugador que nosotros tenemos.

CONCLUSIÓN

Más vale tarde que nunca. Por ha llegado al catálogo de Dreamcast un juego ambientado en el universo Star Wars. Toda la emoción de las carreras de vainas, todo su peligro, toda su velocidad y todo su humor han llegado a nosotros. "May the Force be with you".