Star Ocean hasta el fin de los tiempos...

Más de 4 años de desarrollo han sido necesarios para que una nueva entrega de la saga Star Ocean llegue a nuestras consolas, en esta ocasión a PlayStation 2 y en Europa bajo una versión Director's Cut. ¿Estará a la altura de lo que esperan los fans de la serie?

Star Ocean: Till the End of Time es uno de aquellos juegos tantas veces promocionado y cuya salida se demora durante tanto tiempo que el resultado final muy pocas veces merece la pena. Han sido más de 4 años de desarrollo hasta que al final el título de Square-Enix ha visto la luz tanto en los mercados americano como europeo. Sí, por una vez uno de estos títulos llega a nuestro territorio PAL. Estamos de enhorabuena?

Hombre, podemos decir que estamos contentos de tener aquí lo que considero que es un gran juego de rol de acción en tercera persona. No se trata de un juego de acción con toques de rol, sino que estamos ante un producto que permite un nivel de personalización al estilo de los Final Fantasy, está basado en un guión que dirige la historia a la perfección y tiene un sistema de combate que aparta los turnos y permite un mayor dinamismo durante esas batallas.

A bote pronto, esta tercera entrega de la saga Star Ocean (recordamos que la SuperNES y la Playstation tuvieron la suya propia) puede colocarse en un híbrido entre Xenosaga: Episodio 1 y cualquier entrega de un .Hack. Además, guarda mucha similitud con el título de Namco no solamente en la fuerza de su historia sino también en la ambientación, al estilo de ópera espacial que tanta ambientación tiene entre los usuarios.

Por otro lado, hablar demasiado libremente del argumento de Star Ocean 3 sería hacerle un flaco favor, la verdad. Baste decir que en el año SD 772, la Federación Pangaláctica ha explorado ya la tercera parte de nuestra galaxia y sigue su expansión; nuestro joven protagonista Fayt Leingod pasa unas vacaciones con sus padres, expertos en la investigación de la simbología, en el planeta Hyda, pero pronto se torcerán las cosas…

Y no me gustaría entrar en materia hasta dejar bien claro un detalle. Cuando analizamos en su momento títulos como Suikoden III o Xenosaga, que no iban a salir al mercado europeo, quedó bien claro que nuestro deseo y reivindicación era que llegasen al territorio PAL… debidamente doblados y traducidos, claro. Star Ocean 3 llega en inglés tanto en diálogos, subtítulos y textos en pantalla. Y además a 50 hz. Es decir, que la única diferencia entre las versiones NTSC y PAL es que la nuestra es más lenta y eso, bajo nuestro punto de vista, no es la forma de hacer las cosas.

A nivel general podemos decir que Star Ocean 3 viste bastante bien. Nada es excesivamente espectacular pero siempre estamos hablando por encima de la media; es decir, no marcará un hito en la historia de los videojuegos, pero se hace bastante agradable. Además, Square incorpora la opción de poner el formato en 16:9 para aquellos que dispongáis de una pantalla de estas características.

Al contrario que la mayoría de juegos de este estilo, la cámara de SO3 es totalmente móvil mediante los pulsadores R y L. El entorno es completamente 3D y tenemos la posibilidad de observar la acción en todo momento desde cualquier ángulo posible. El juego además premia el uso de la cámara rotatoria escondiendo a propósito objetos que solo podrían verse si específicamente se buscaran mediante el empleo de esta técnica.

Obviamente el uso de entornos pre-renderizados no interactivos favorece mucho la espectacularidad, al estilo Resident Evil, Onimusha o los mismos Final Fantasy. Sin embargo encontramos aquí algunos de los más bonitos parajes jamás vistos en un RPG, para los que sus creadores han utilizado algunos 'trucos' que verdaderamente le sientan muy bien al juego. Hay zonas abiertas que verdaderamente da gozo echarles un vistazo.

No sucede lo mismo con las escenas cinemáticas presentes en abundancia durante el desarrollo de la acción; es cierto que Xenosaga: Der wille zur macht marcó un hito en cuanto al nivel de calidad de las CG y que cualquier otro título en ese aspecto, aún a día de hoy, tiene que buscar en él un punto de referencia. En cualquier caso, las secuencias de video no poseen la misma factura gráfica que puede haber en Final Fantasy X, por poner ejemplo, sin que ello signifique que estén mal hechas.

La definición de los personajes, tanto en el campo de batalla como en las mismas secuencias intermedias, tampoco es perfecta. Si bien es cierto que gozan de un número de polígonos bastante aceptable, la calidad de las texturas no es la óptima bajo mi punto de vista. En cambio, las animaciones de los personajes están muy bien conseguidas, sobre todo en los modos de combate.

Hay gran cantidad tanto de localizaciones como de efectos gráficos reseñables en Till the End of Time. Si bien algunos de ellos son bastante esquemáticos (como la zona de evacuación, muy pronto en el juego) la mayoría de entornos son muy variados y nunca da la sensación de repetición o de reutilización por parte de los grafistas de Square de elementos empleados en otros niveles.

Del mismo modo, la Symbology (que es la magia de SO3) y los combat skills también tienen un despliegue gráfico ejemplar. Algunos de estos movimientos contienen un gran número de efectos de luces que harán las delicias de los más sibaritas. El sistema de bloqueo automático también posee un efecto muy curioso que a muchos les resultará extrañamente familiar. En cualquier caso, un apartado muy notable mermado por el tema de las bandas y de los herzios.

También cabe añadir que el juego soporta Progressive Scan para todos aquellos afortunados poseedores de pantallas de última generación que puedan soportar el incremento de definición en pantalla.

Que esto suceda a día de hoy con Chronicles of Riddick, un shooter para Xbox con argumento pero que no deja de ser un mata-mata en primera persona, es grave. Pero que suceda con un juego como puede ser Star Ocean Till the End of Time, en el que una de sus principales bazas es precisamente la fuerza de la trama, de su hilo argumental, más que grave es completamente inexplicable. Y eso es algo que se puede constatar si le echamos ya un ojo a las quejas que los usuarios van exponiendo en los foros del país.

Pero en fin, a pesar de todo, el juego de tri-Ace dispone de una banda sonora al máximo nivel, como acostumbra a pasar en todo título que lleva el sello de Square. Banda sonora que además el juego nos permite poner en estéreo y en Dolby Surround Pro-Logic 2, al margen de una opción que nos permite incluso optimizar su salida para el uso de auriculares. Todo un lujo para los que jugamos a ciertas horas en las que no nos conviene despertar a quién duerme a nuestro lado.

Todas las músicas que acompañan al juego, desde los mismos créditos de inicio hasta la que pasa desapercibida, pasando por la de los momentos críticos argumentalmente hablando roza un altísimo nivel de calidad. Música orquestada que se adapta perfectamente a los distintos ambientes del juego (pronto estamos en el espacio que en un bosque, en el agua, etc.) y a los distintos ritmos de la acción. Simplemente escuchando es sencillo discernir que está pasando en la pantalla.

Sin embargo, algo sucede con el doblaje de los personajes. Si uno juega a Xenosaga 1 en japonés se dará cuenta de que el doblaje es perfecto; probablemente no entenderá nada, pero lo nada que entiende cuadra con lo nada que los personajes hablan. Si uno juega Xenosaga en inglés, verá que aunque la sincronización labial no es perfecta, la elección de las voces si es la adecuada para el caso.

En Star Ocean 3 hay un poco de todo. Si bien la sincronización es casi inexistente (pero tampoco se puede pretender que sea perfecta, es evidente) encuentro muy poco adecuada la elección de determinados actores de doblaje a ciertos personajes. Y eso es algo que, para los que estamos habituados a jugar juegos de importación con cierta frecuencia, salta mucho al oído. Sophie y Pepitta, por ejemplo, no son nada del otro mundo. Pero la voz del guerrero Klausiano Cliff o la del pequeño Roger deja mucho que desear.

Y no se puede evitar que eso afecte propiamente al dramatismo que quiere transmitir el juego pero, en cualquier caso, el sabor que nos deja es bastante bueno, ya que siempre prefiero un mal doblaje a tener que estar continuamente pulsando la X para saltar las líneas de diálogo, como pasaba en Suikoden III. Lástima que no sea en castellano, la verdad, que desde el mítico doblaje de Snake en Metal Gear Solid no hemos vuelto a ver en PlayStation una auténtica joya que reluzca precisamente en ese aspecto.

Los encuentros no aparecen de forma aleatoria como en Final Fantasy, sino que físicamente se ven en pantalla y deberemos dirigirnos a ellos para entablar combate, como en el mismo Xenosaga o en Breath of Fire V o en Hack. Eso hace que, a excepción de los eventos inevitables que se suceden en varios momentos, debemos ser nosotros los que vayamos a buscar pelea para mejorar las habilidades de nuestros personajes o si no nos veremos muy justitos en determinadas luchas.

Hay hasta 6 patrones de comportamiento distintos para los personajes, en función de las habilidades que deseamos que realicen. De todos modos, el cambio entre uno y otro es bastante sencillo y rápido, de forma que es posible controlar bien a un personaje y semi-controlar a otro de forma manual. En cualquier caso, pretender dominar las acciones de todos ellos es tarea imposible.

En la parte inferior de la pantalla aparecen los retratos de los personajes con 3 barras distintas. En la primera de ellas está representada la vida, cuya definición es auto-explicativa. La segunda de ellas representa los puntos de magia (que no son puntos de magia, pero es mejor explicarlo así) que tampoco conviene que se terminen y la tercer refleja un parámetro denominado 'Furia'. La 'Fury' representa el nivel de impacto de nuestros golpes en el enemigo; a mayor nivel, mayor daño. Además, cuando está al 100%, es la única forma que disponemos para bloquear los ataques enemigos.

Los ataques básicos se dividen en dos clases: flojos y fuertes. Los flojos son veloces pero infligen poco daño, y además pueden bloquearse con un estado de furia del 100% (sin necesidad de introducir ningún comando). Un ataque fuerte se salta la barrera de protección de la Fury, pero es más lento y permite un contraataque rápido (un ataque flojo en cuanto vemos que nos van a atacar fuertemente), lo que da pie a pensar en estrategias de ataque y defensa dependiendo del enemigo.

La Symbology representa la magia durante el juego, y se aprende mediante la lectura de determinados documentos. Al tanto porque el personaje que aprenda esos hechizos consumirá el libro y ninguno más del grupo lo podrá leer. Para daros un consejo, Sophie es una especialista en Symbology, así que no dudéis en darle todo el material posible para convertirla en una hechicera potente.

A medida que avancemos en el juego iremos adquiriendo nuevas y más poderosas habilidades de este tipo. Sin embargo, ninguna de ellas sale 'gratis'. El uso de estas habilidades comporta un desembolso de algo, ya sean puntos de habilidad o incluso de vida, limitando así el uso abusivo que pudiéramos hacer de ellas, sobretodo cuando el patrón de comportamiento es automático y le hemos pedido a la máquina que repita estos ataques hasta la saciedad.

Con el aumento de la experiencia podremos adoptar además habilidades pasivas que nos ayudarán a aumentar nuestra vida, nuestra capacidad defensiva y ofensiva o nuestros puntos de 'magia'. Del mismo modo existen habilidades tácticas que suponen un gran consumo de 'fury' pero que pueden ayudar a desequilibrar un combate a nuestro favor. En cualquier caso, sea lo que sea lo que hagamos, la batalla se para en ese momento para permitirnos el uso de cualquier habilidad.

Al mismo tiempo, mientras vayamos superando combates, veremos una especie de contador que se va rellenando en la parte derecha de nuestra pantalla. Cuando ese contador llega al 100% se lanzará un nuevo combate que, de ganarlo, nos permitirá no solo conseguir un aumento importante en la experiencia sino tambieén habilidades y objetos especiales solo accesibles de este modo.

Y es que uno de los ingredientes que hacen Star Ocean 3 un juego que puede alargarse bastante es aquel que consiste en conseguir los Trofeos de Batalla. Los trofeos de batalla son reconocimientos que se nos dan al ir cumpliendo determinadas características por primera vez: matar un enemigo de un solo golpe, permanecer 5 combates sin recibir daño ninguno, defender un número determinado de veces… hay verdaderamente cientos de ellos, y el conseguirlos irá desbloqueando nuevas opciones de juego.

Una de esas opciones de juego consiste en la de luchar contra otro colega y contra la máquina en una especie de 'arena de batalla'. Allí, al más puro estilo de arcade de lucha, podremos seleccionar nuestro personaje con el traje que queramos (desbloqueables también unos cuantos) y batirnos contra la CPU para demostrar quién tiene mejores cualidades de combate.

Obviamente también existen pantallas de equipamiento para ir mejorando nuestras protecciones e ítems que podemos llevar, así como un completo glosario de términos y de localizaciones, en las que cientos de líneas de texto nos dan más información sobre el entorno, los personajes y los objetos que van pasando por nuestras manos, de forma que se añade cierta profundidad en la historia… para quien tenga la paciencia de leerla, claro.

El objetivo del juego, en sí, supone ir de un lado a otro de forma bastante conducida por el guión. Como he dicho siempre, más vale vivir una buena historia preestablecida que no tener libertad para hacer lo que nos dé la gana y que el resultado final sea frustrante. De todos modos, hay varios finales disponibles para quien aquel power player que pretenda saberlo absolutamente todo del juego, que ya adelanto que poco tiene que ver con las entregas anteriores.

Hay multitud de enemigos diferentes que requieren estrategias distintas, incluso muchos necesitan de un nivel de micromanejo de nuestros aliados bastante importante. Generalmente acostumbra a ser buena idea dejar un personaje que se dedique a curar al grupo y dedicar los otros dos a fundir a los enemigos. Las formaciones de combate, que deben establecerse previamente a su inicio, pueden formarse a partir de los hasta 10 miembros posibles, siempre y cuando estén disponibles.

El juego se presenta con 2 DVD, en su versión 'Director's Cut', y finalizarlo conlleva algo menos de 40 horas de juego consiguiendo algunas cosillas. Supongo que es posible llevarlo a 100 horas de juego si intentamos tener todos los trofeos de batalla y demás, pero honestamente requiere una dosis de fanatismo y de paciencia que, tal y como está el mercado y con la gran cantidad de buenos juegos que hay en las estanterías, muy pocos se pueden tomar.

l  o    p  e  o  r