Solitario
- PlataformaDS5
- GéneroPuzle
- DesarrolladorDTP Young Entertainment
- Lanzamiento15/11/2008
- TextoEspañol
- VocesEspañol
El de toda la vida
¿Quién no ha echado horas y horas al solitario de Windows? La portátil de la gran N sigue recibiendo juegos de todos los tipos y ampliando catálogo con géneros hasta ahora poco dados a las consolas. Toca repartir cartas con el stylus.
Uno de los juegos más adictivos para un solo jugador da el salto a Nintendo DS. Después de su más que exitoso paso en los sistemas operativos actuales de Microsoft, quién no ha echado horas y horas al solitario de Windows, la portátil de la gran N sigue recibiendo juegos de todos los tipos y sigue ampliando catálogo con géneros hasta ahora poco dados a las consolas. Toca repartir cartas con el stylus.
El Solitario es de esos juegos que pueden matar una tarde aburrida y sola en casa. Un juego para disfrutar uno mismo y en el que el jugador se prepara la partida y, si las cartas lo permiten, finalizarlo correctamente. El objetivo es el de utilizar todas las cartas de la baraja para llenar las cuatro pilas de naipes por palo y en orden ascendente, del As hasta el Rey. En la parte inferior, donde se van situando las cartas hasta que se pueden ordenar poco a poco en las cuatro pilas, estás se pueden ir moviendo mientras sean de números correlativos y de color distinto (negro-rojo-negro rojo).
Cuando las cartas de la parte baja de la mesa no se pueden mover más, ya sea para iniciar alguna de las pilas o para destapar las que están al fondo de las filas, se empieza a destapar una por una las cartas de la baraja restante hasta que salga una que se pueda utilizar. Sencillo y, de paso, útil para ordenar los naipes.
Solitario para DS tiene dentro de si hasta doce variedades del famoso juego de naipes. Al principio sólo hay cuatro desbloqueados, entre ellos el clásico, y los demás se van descubriendo a medida que se completan partidas con los otros. Las variantes dotan de más color al cartucho, desde la limitación de ver las cartas de la baraja tres veces a modificaciones a la hora de poder mover los naipes de la parte inferior del tablero. Hay modos más complicados e interesantes que otros, pero por lo general son pequeños cambios que ofrecen retos distintos con un mismo objetivo: completar la baraja.
El videojuego de Proein ofrece algunos detalles menores, como la posibilidad de dar un diseño personalizado a las cartas que vamos a usar, o poder usar el micro para soplar y barajar las cartas. Además, cuenta con unas estadísticas que se pueden compartir con otros jugadores.
La apuesta de la compañía con este producto se completa con seis juegos de mesa. Otro clásico que sirve para acompañar a los naipes. En un tablero lleno de bolas y algún espacio vacío, el jugador deberá eliminar el máximo número de bolas, a ser posible todas, pasando una por encima de otra que tenga un hueco libre a su lado. Otro reto adictivo y sencillo sin más.
El Solitario para DS parece una apuesta simple pero segura. Se trata de coger dos juegos de toda la vida y trasladarlos a la portátil de Nintendo. Su control con el stylus es ideal tanto para los retos de mesa como para el Solitario. Pero la oferta acaba ahí. Doce variantes del Solitario no son pocos, aunque en Internet circulan centenares.
Y los seis juegos de mesa, una vez terminados, no tienen rejugabilidad alguna. A pesar de salir a precio reducido, las posibilidades se antojan pocas, sobre todo cuando hay en el mercado otros juegos que incluyen diversos y variados juegos de toda la vida y el solitario es, en ese caso, uno más.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejará huella. Sólo recomendable en caso de sequía de este género de juegos.